Celebra tabasqueño despertar ciudadano

CÓRDOBA, Ver.- Andrés Manuel López Obrador lucía contento y no dejaba de presumir el apoyo que le mostraron miles de ciudadanos en diversas partes del País y del mundo. Lo que calificó como "una muestra del despertar del pueblo".

"Agradecerles todas estas muestras de solidaridad. Todos estamos contentos. En 40 días más, vamos a lograr, entre todos, el renacimiento de México.

"Esta es una muestra del despertar ciudadano que se viene expresando en el País. Todos dispuestos a lograr un cambio, y creo que las cosas están muy claras", arengó al tiempo que la multitud concentrada en la plaza Miguel Hidalgo le gritaba "¡Presidente!".

Antes, en un hotel de esta ciudad, justificaba las protestas en contra de su adversario, el priista Enrique Peña Nieto.

"Es una expresión de inconformidad que se ha desatado a partir de que se está descubriendo la intención de imponer a Peña Nieto a través de medios de comunicación, lo cual es una especie de fraude anticipado", apuntó.

Sugirió a sus simpatizantes manifestarse en forma pacífica, sin caer en provocaciones, pues advirtió que el equipo de Peña "está nervioso".

Dijo que la mejor manera de protestar contra el abanderado del tricolor y "sus patrocinadores", es organizar a los ciudadanos para salir a votar el 1 de julio.

El tabasqueño presidió acto de campaña en el que predominaron los jóvenes, que no dejaron de echarle porras.

Al terminar el mitin, un grupo de 120 motociclistas escoltaron al tabasqueño hasta la carretera que lo llevaría a Tecamachalco, Puebla.

 
MENSAJE AMOROSO
 
Tras un trayecto de 138 kilómetros, el abanderado presidencial llegó a una cancha de futbol donde se concentraron centenares de indígenas mixtecos que bajaron de comunidades serranas.

Desde el templete, como si fuera un pastor, López obrador resumió los fundamentos de su república amorosa.

"No basta con ir a los templos o a las iglesias si no somos fraternos en nuestra vida cotidiana, si no existe esa presencia del cristianismo y del humanismo", indicó ante la actitud silenciosa de los poblanos que resistieron un sol agobiante.

Acompañado por el candidato al Senado por la izquierda, el priista Manuel Bartlett, a quien saludó y se despidió con un abrazo efusivo, López Obrador pidió tenerle confianza.

"Voy a estar a la altura de ustedes. Estoy consciente de mi responsabilidad no echaré por la borda lo que he construido, lo que he cuidado", expuso.

Tanto en Córdoba como en Tecamachalco, el tema central de su discurso fue la corrupción que penetra en todas las esferas, y exaltó el caso del líder del sindicato petrolero, Carlos Romero Deschamps, como muestra del enriquecimiento a costa del dinero de los trabajadores.

Dijo que acabará con los privilegios y reducirá a menos de la mitad los salarios de la alta burocracia.

Con su plan de austeridad y con los ahorros, reiteró, se financiarán los programas para rescatar de la pobreza a 15 millones de mexicanos.

"Si no combatimos la pobreza y desigualdad social, no vamos a poder vivir en paz, y para estoy convenciendo y persuadiendo a los que tienen mas", expuso en el municipio poblano.


Érika Hernández enviada, Reforma, 21 de mayo.