Cualquier cambio en Pemex es privatización, interpreta AMLO

Encabezadas por Andrés Manuel López Obrador, cerca de diez mil mujeres se declararon listas ayer, para emprender acciones en contra de una posible privatización de Pemex y como primera acción realizarán un cerco a la Cámara de Diputados en cuanto se presente la iniciativa de reforma energética, presumiblemente este martes.

Reunidos en el Monumento a la Revolución donde López Obrador les tomó protesta, los contingentes liderados por Claudia Sheinbaum, anunciaron que el cerco iniciará a cualquier hora de este martes, para evitar que pretendan sorprender al movimiento de resistencia con un albazo.

Frente a esa situación, las dirigentes de las 20 brigadas que coordinarán grupos de cien mujeres cada una, se declararon en estado de alerta para emprender las acciones aprobadas el pasado 18 de marzo, que incluyen cercos a instalaciones del sector financiero, toma de palacios municipales y en caso extremo, toma de aeropuertos y carreteras.

López Obrador arengó a no actuar con cobardía y advirtió que no permitirá simulaciones, pues acusó que se pretende "reformar leyes secundarias y darle la vuelta a la Constitución, como lo hicieron con la industria eléctrica nacional".

"Alianzas con empresas extranjeras es privatización; contratos de riesgos, es privatización; contratos con terceros, es privatización; contratos de servicios múltiples, es privatización; autonomía de gestión, es privatización", resaltó.

"No nos van a engañar, en esencia todo lo que signifique entregar o compartir la renta petrolera con particulares, nacionales o extranjeros, es privatización y por eso no lo vamos a permitir", retó el tabasqueño, quien aseveró que las cúpulas del PRI y PAN ya se han puesto de acuerdo sobre los términos de la reforma energética, por lo cual llamó a sus huestes a mantenerse alertas pues anunció que "es muy probable que la acción de resistencia civil inicie la semana próxima".

"Si se entrega el petróleo, si nos arrebatan este recurso va a quedar un ambiente de insatisfacción, de farsa, de frustración, y vamos a estar viviendo permanentemente en la confrontación, en el desacuerdo, en el conflicto; por eso no queremos la privatización del petróleo".

"Que se entienda bien, que se oiga lejos, no vamos a permitir la simulación, no nos estamos chupando el dedo".

"Vale más ahora impedirlo que el día de mañana estar enfrentados los mexicanos o tener que estar enfrentándonos con potencias extranjeras. Es mejor desde ahora resolver, en definitiva, este asunto".

Nota de Alejandro Páez, Crónica, 7 de abril