LA HABANA. Frente al hotel Melía-Cohíba de La Habana, Roberto González, un mecánico de 47 años, dijo estar complacido por el libre acceso al hospedaje en esas instalaciones que abrió el gobierno de Raúl Castro, pero admitió que pocos bolsillos en la isla pueden darse "ese lujo".
"Es una medida muy positiva, era absurdo que un cubano no pudiera hospedarse en un hotel de su país", declaró González, quien ya hace planes para pasar cuatro días en agosto con su familia en un hotel de Varadero.
Sin embargo, el mecánico lamentó que "muchos cubanos seguirán soñando con esa posibilidad, porque sus salarios apenas les alcanzan para vivir".
En Cuba el salario promedio es de 408 pesos mensuales (17 dólares), pero muchos tienen entradas extras gracias a las propinas en el caso del turismo o las remesas.
A diferencia del acceso a la telefonía celular, que fue anunciado por los medios de prensa oficiales el viernes y comenzará a operar el 14 de abril, en este caso no se hizo anuncio alguno pero las personas se enteraban de boca en boca. Además, hoy empiezan a comercializar aparatos electrodomésticos.
Muchos de ellos les dieron su aprobación, aunque conscientes de que no podrán disfrutar de esos servicios con sus deprimidos salarios.
"Estamos prosperando, eso quiere decir que estamos saliendo del periodo especial", declaró Francisco Muñoz. Igualmente lo consideró Elizabeth Quintana: "La medida es buena, vivimos aquí y como cubanos debemos tener derecho a todo", expresó.
"La decisión sobre el turismo hotelero abarca no sólo a los servicios de alojamiento, sino también a los paquetes de viaje o recorridos y la renta de autos", informó una empleada del hotel Ambos Mundos, donde una noche cuesta en habitación doble 160 pesos cubanos en temporada alta.
En el popular balneario de Varadero, empleadas de un centro turístico indicaron que la medida es nacional y se preparan a recibir a sus connacionales, aunque en este momento no hay muchas habitaciones disponibles.
"Es una medida muy positiva, era absurdo que un cubano no pudiera hospedarse en un hotel de su país", declaró González, quien ya hace planes para pasar cuatro días en agosto con su familia en un hotel de Varadero.
Sin embargo, el mecánico lamentó que "muchos cubanos seguirán soñando con esa posibilidad, porque sus salarios apenas les alcanzan para vivir".
En Cuba el salario promedio es de 408 pesos mensuales (17 dólares), pero muchos tienen entradas extras gracias a las propinas en el caso del turismo o las remesas.
A diferencia del acceso a la telefonía celular, que fue anunciado por los medios de prensa oficiales el viernes y comenzará a operar el 14 de abril, en este caso no se hizo anuncio alguno pero las personas se enteraban de boca en boca. Además, hoy empiezan a comercializar aparatos electrodomésticos.
Muchos de ellos les dieron su aprobación, aunque conscientes de que no podrán disfrutar de esos servicios con sus deprimidos salarios.
"Estamos prosperando, eso quiere decir que estamos saliendo del periodo especial", declaró Francisco Muñoz. Igualmente lo consideró Elizabeth Quintana: "La medida es buena, vivimos aquí y como cubanos debemos tener derecho a todo", expresó.
"La decisión sobre el turismo hotelero abarca no sólo a los servicios de alojamiento, sino también a los paquetes de viaje o recorridos y la renta de autos", informó una empleada del hotel Ambos Mundos, donde una noche cuesta en habitación doble 160 pesos cubanos en temporada alta.
En el popular balneario de Varadero, empleadas de un centro turístico indicaron que la medida es nacional y se preparan a recibir a sus connacionales, aunque en este momento no hay muchas habitaciones disponibles.
Nota de AP y AFP, El Economista, 1º de abril.
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