Permite Raúl Castro a cubanos alojarse en hoteles de la isla

Cuba anunció un conjunto de reformas sociales que suavizan algunas de las históricas restricciones, sobre todo económicas, de comunicación y de disfrute, en su lento camino por lograr adaptar su sistema al mercado capitalista dejando atrás la ortodoxia socialista.

El incipiente gobierno de Raúl Castro Ruz confirmó el relajamiento de un conjunto de medidas “necesarias” para iniciar la transformación de una población con grandes prohibiciones sociales, algunas de ellas desde hace más de cuatro décadas, como el trámite que hace cada cubano para obtener un permiso de salida al exterior. Según dijo el ministro de Relaciones Exteriores, Felipe Pérez Roque, se flexibilizarán los trámites para que los cubanos viajen al extranjero.

Los guajiros cubanos se despertaron el pasado 25 de marzo con el anunció de que el gobierno comunista de la isla iniciaba la descentralización del sector agropecuario —bajo control absoluto del Estado— para elevar la producción nacional de alimentos y reducir las importaciones de los mismos, los cuales fueron de mil 600 millones de dólares el año pasado.

Cuba tiene un grave problema de ineficiencia y migración en el campo cubano. La descentralización de la agricultura está considerada como una de las más importantes reformas de Raúl Castro desde que tomó el poder en febrero pasado, pues otorgará créditos a las cooperativas campesinas establecidas en tierras estatales para estimular la producción de alimentos y generar mayores ganancias.

La segunda medida tomada por el gobierno de la isla fue la liberación de la venta minorista de computadoras, televisores, reproductores de DVD, hornos de microondas, tostadores eléctricos, entre otros electrodomésticos, los cuales serán vendidos libremente a cualquier ciudadano cubano. Los electrodomésticos no podían ser adquiridos directamente.

La lista de las nuevas medidas sociales tomadas por las autoridades de la isla incluyen la libre contratación del servicio de telefonía celular; la venta sin autorización previa de medicamentos y permitir su compra en cualquier farmacia del país.

Pero la cancelación de una ley que prohibía a los cubanos alojarse en cualquier hotel de la isla será uno de las medidas que será más celebrada por la población, porque fue una de las decisiones tomadas por el gobierno a partir de los años noventa más repudiadas dentro y fuera de Cuba.

Los cubanos ahora podrán también alquilar vehículos y usar otras instalaciones que anteriormente estaban limitadas sólo para el uso de extranjeros.

El turismo es uno de los pilares de la economía cubana, pues deja una derrama de más de 2 mil millones de dólares anuales que ha ayudado a evitar la debacle del único país socialista de América Latina, ha mantenido en pie el servicio gratuito de salud y educación y reanimó a una economía que se ha mantenido en coma.

Nota de Juan Balboa, El Universal, 1º de abril.