Los bonos ciudadanos emitidos por Pemex se podrían vender de manera directa al público en general en tiendas de autoservicio, bancos y hasta en las oficinas de correo, explicaron fuentes de la Secretaría de Hacienda.
Vale recordar que la propuesta no es nueva, ya que en el programa Anual de Financiamiento 2008 se anunció el proyecto para masificar la tenencia de Cetes y bonos a pequeños ahorradores.
Según la dependencia, este mecanismo de distribución masiva se utiliza ya en otras partes del mundo para ofrecer ese tipo de títulos.
De aprobarse la reforma de Pemex, el gobierno federal utilizaría estos puntos de venta para el caso de los bonos que colocará la empresa paraestatal.
Los montos de adquisición mínimos se fijarán de tal forma que puedan ser alcanzables para la gran mayoría de los mexicanos.
Por otro lado, se establecerían montos máximos que podrían ser adquiridos por personas físicas, con el fin de evitar la concentración en la tenencia de dichos papeles.
Los mexicanos obtendrían un bono, lo que les dará derecho de beneficiarse de los rendimientos asociados al desempeño de la paraestatal. Conforme se vayan reportando resultados favorables, se traducirá en un cupón de pago proporcional a esa rentabilidad.
Se está analizando que estos títulos irán acompañados de una protección a su valor, es decir, que pagarían un mayor rendimiento sobre lo que genere Pemex o una tasa de interés predeterminada, de tal manera que preserven su valor y no constituyan un riesgo para los ahorradores.
En la reforma también se establece que sean adquiridos por las afore y las sociedades de inversión privadas.
Sin embargo, actualmente las administradoras de fondos de ahorro para el retiro ya invierten parte de los recursos de los trabajadores en papel emitido por Petróleos Mexicanos en el mercado de valores.
Hay que recordar que la empresa petrolera ha emitido Certificados Bursátiles que pueden ser comprados por inversionistas institucionales como las afore.
Datos de la Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro (Consar) indican que de los 868 mil 33 millones de pesos que manejan las afore, casi 3 por ciento están invertidos en papel de empresas paraestatales como Pemex y la Comisión Federal de Electricidad.
Es decir que han comprado certificados y títulos de deuda por un monto equivalente a 25 mil 18 millones de pesos, colocado en el mercado por esas instituciones y que tienen que sujetarse al régimen de inversión del sistema de pensiones.
Las afore sólo pueden comprar papel de buena calidad que tenga una calificación para solventar el cumplimiento del pago. Lo anterior con el propósito de garantizar la seguridad del ahorro previsional de los trabajadores.
La mayoría de las administradoras que integran el sector está invirtiendo en deuda de las paraestatales. Banorte es la gestora que tiene la mayor participación de esos instrumentos en su cartera de inversiones, con 17.9 por ciento, seguida de Banamex, con 17.8 por ciento, al igual que ING, con 17 por ciento del total de sus portafolios de inversión.
¿Esquema nuevo?
La venta masiva de títulos del gobierno para pequeños ahorradores no es una propuesta nueva. En diciembre de 2007, la Secretaría de Hacienda anunció que daría acceso a esa alternativa de inversión a la mayoría de la gente como parte de su Plan Anual de Financiamiento 2008.
El Plan Anual de Financiamiento dice que “una alternativa comúnmente utilizada por ese tipo de inversionistas es la adquisición de acciones representativas del capital social de una sociedad de inversión, las cuales ofrecen títulos gubernamentales únicamente como parte de una canasta o portafolios cuyas características no necesariamente se adecuan a las necesidades de estos inversionistas”.
La propuesta servirá para mejorar las condiciones de acceso y oferta de los servicios financieros para las familias de ingresos medios y bajos, lo que funcionará como un canal adicional para fomentar la generación de ahorro.
Vale recordar que la propuesta no es nueva, ya que en el programa Anual de Financiamiento 2008 se anunció el proyecto para masificar la tenencia de Cetes y bonos a pequeños ahorradores.
Según la dependencia, este mecanismo de distribución masiva se utiliza ya en otras partes del mundo para ofrecer ese tipo de títulos.
De aprobarse la reforma de Pemex, el gobierno federal utilizaría estos puntos de venta para el caso de los bonos que colocará la empresa paraestatal.
Los montos de adquisición mínimos se fijarán de tal forma que puedan ser alcanzables para la gran mayoría de los mexicanos.
Por otro lado, se establecerían montos máximos que podrían ser adquiridos por personas físicas, con el fin de evitar la concentración en la tenencia de dichos papeles.
Los mexicanos obtendrían un bono, lo que les dará derecho de beneficiarse de los rendimientos asociados al desempeño de la paraestatal. Conforme se vayan reportando resultados favorables, se traducirá en un cupón de pago proporcional a esa rentabilidad.
Se está analizando que estos títulos irán acompañados de una protección a su valor, es decir, que pagarían un mayor rendimiento sobre lo que genere Pemex o una tasa de interés predeterminada, de tal manera que preserven su valor y no constituyan un riesgo para los ahorradores.
En la reforma también se establece que sean adquiridos por las afore y las sociedades de inversión privadas.
Sin embargo, actualmente las administradoras de fondos de ahorro para el retiro ya invierten parte de los recursos de los trabajadores en papel emitido por Petróleos Mexicanos en el mercado de valores.
Hay que recordar que la empresa petrolera ha emitido Certificados Bursátiles que pueden ser comprados por inversionistas institucionales como las afore.
Datos de la Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro (Consar) indican que de los 868 mil 33 millones de pesos que manejan las afore, casi 3 por ciento están invertidos en papel de empresas paraestatales como Pemex y la Comisión Federal de Electricidad.
Es decir que han comprado certificados y títulos de deuda por un monto equivalente a 25 mil 18 millones de pesos, colocado en el mercado por esas instituciones y que tienen que sujetarse al régimen de inversión del sistema de pensiones.
Las afore sólo pueden comprar papel de buena calidad que tenga una calificación para solventar el cumplimiento del pago. Lo anterior con el propósito de garantizar la seguridad del ahorro previsional de los trabajadores.
La mayoría de las administradoras que integran el sector está invirtiendo en deuda de las paraestatales. Banorte es la gestora que tiene la mayor participación de esos instrumentos en su cartera de inversiones, con 17.9 por ciento, seguida de Banamex, con 17.8 por ciento, al igual que ING, con 17 por ciento del total de sus portafolios de inversión.
¿Esquema nuevo?
La venta masiva de títulos del gobierno para pequeños ahorradores no es una propuesta nueva. En diciembre de 2007, la Secretaría de Hacienda anunció que daría acceso a esa alternativa de inversión a la mayoría de la gente como parte de su Plan Anual de Financiamiento 2008.
El Plan Anual de Financiamiento dice que “una alternativa comúnmente utilizada por ese tipo de inversionistas es la adquisición de acciones representativas del capital social de una sociedad de inversión, las cuales ofrecen títulos gubernamentales únicamente como parte de una canasta o portafolios cuyas características no necesariamente se adecuan a las necesidades de estos inversionistas”.
La propuesta servirá para mejorar las condiciones de acceso y oferta de los servicios financieros para las familias de ingresos medios y bajos, lo que funcionará como un canal adicional para fomentar la generación de ahorro.
Nota de Leonor Flores, Milenio, 15 de abril.
0 Responses to "Venderán bonos de Pemex en el súper, bancos y correos"
Publicar un comentario