Ensenada, BC, 28 de agosto. Tras asegurar que existe consenso para reformar Petróleos Mexicanos (Pemex), la secretaria de Energía, Georgina Kessel, comentó que el Congreso de la Unión ahora tiene un reto histórico doble: construir un proyecto que logre el acuerdo de la mayoría necesaria para su aprobación, y que signifique un cambio que ayude estructuralmente a la paraestatal.
Ante el presidente Felipe Calderón dio la bienvenida a las propuestas presentadas y se congratuló de que todas las fuerzas políticas estén asumiendo su lugar dentro de las instituciones, al participar plenamente en el debate parlamentario.
La titular de Energía adoptó un discurso conciliador y dijo que las propuestas planteadas merecen el respeto y el reconocimiento de todos, ya que enriquecen el debate y permitirán contar con una mejor legislación, más completa y alimentada por la visión de todos los partidos políticos.
Reiteró que el gobierno federal sigue abierto para discutir y enriquecer las iniciativas, ya que “nos sentimos orgullosos y satisfechos del debate que se ha generado, de escuchar todas las voces”.
En opinión de Kessel, las iniciativas de reforma han generado un debate muy importante en México y han permitido construir el consenso de que la reforma de Pemex es necesaria, indispensable e impostergable.
“No podemos –añadió– perder la oportunidad de alcanzar cambios estructurales después de todo el esfuerzo de aquellos que han trabajado y participado ampliamente en este debate”.
Al defender la participación de la iniciativa privada en el sector energético, dijo que se puede ampliar la capacidad de operación de la paraestatal en refinación, transporte, almacenamiento y distribución sin comprometer recursos que son indispensables para las empresas y para el país en otras actividades de igual o mayor importancia.
Defendió las iniciativas que Calderón envió al Congreso, porque –según la funcionaria– responden a diversas necesidades del sector energético y mantienen en todo momento la propiedad de los hidrocarburos y la rectoría del Estado en la materia.
El Presidente, por su parte, se refirió de manera tangencial a la reforma, cuando aseguró que el mejor escenario al que pueden aspirar los mexicanos es producir su propio gas y dejar de importarlo de Texas, de las Rocallosas, de Trinidad y Tobago, de Indonesia o de Qatar.
En la inauguración de la terminal de regasificación de gas natural licuado Energía Costa Azul, Calderón insistió en que es “absurdo” que México deba importar ese producto, por lo que volvió a pugnar en favor de la modernización de Pemex.
Por eso llamó a transformar la industria petrolera, a modernizar Pemex y darle facilidades logísticas de contratación y de administración para que pueda expandir su capacidad de producción de petróleo y gas.
Ante el presidente Felipe Calderón dio la bienvenida a las propuestas presentadas y se congratuló de que todas las fuerzas políticas estén asumiendo su lugar dentro de las instituciones, al participar plenamente en el debate parlamentario.
La titular de Energía adoptó un discurso conciliador y dijo que las propuestas planteadas merecen el respeto y el reconocimiento de todos, ya que enriquecen el debate y permitirán contar con una mejor legislación, más completa y alimentada por la visión de todos los partidos políticos.
Reiteró que el gobierno federal sigue abierto para discutir y enriquecer las iniciativas, ya que “nos sentimos orgullosos y satisfechos del debate que se ha generado, de escuchar todas las voces”.
En opinión de Kessel, las iniciativas de reforma han generado un debate muy importante en México y han permitido construir el consenso de que la reforma de Pemex es necesaria, indispensable e impostergable.
“No podemos –añadió– perder la oportunidad de alcanzar cambios estructurales después de todo el esfuerzo de aquellos que han trabajado y participado ampliamente en este debate”.
Al defender la participación de la iniciativa privada en el sector energético, dijo que se puede ampliar la capacidad de operación de la paraestatal en refinación, transporte, almacenamiento y distribución sin comprometer recursos que son indispensables para las empresas y para el país en otras actividades de igual o mayor importancia.
Defendió las iniciativas que Calderón envió al Congreso, porque –según la funcionaria– responden a diversas necesidades del sector energético y mantienen en todo momento la propiedad de los hidrocarburos y la rectoría del Estado en la materia.
El Presidente, por su parte, se refirió de manera tangencial a la reforma, cuando aseguró que el mejor escenario al que pueden aspirar los mexicanos es producir su propio gas y dejar de importarlo de Texas, de las Rocallosas, de Trinidad y Tobago, de Indonesia o de Qatar.
En la inauguración de la terminal de regasificación de gas natural licuado Energía Costa Azul, Calderón insistió en que es “absurdo” que México deba importar ese producto, por lo que volvió a pugnar en favor de la modernización de Pemex.
Por eso llamó a transformar la industria petrolera, a modernizar Pemex y darle facilidades logísticas de contratación y de administración para que pueda expandir su capacidad de producción de petróleo y gas.
Claudia Herrera, La Jornada, 29 de agosto.
0 Responses to "Kessel: el Congreso, ante el reto de acordar la reforma a Pemex"
Publicar un comentario