Pareciera que nos están dejando solos”
César Duarte Jáquez
Presidente de la Cámara de Diputados
El presidente de la Cámara de Diputados condenó el atentado que sufrió su paisano, el gobernador de Chihuahua, José Reyes Baeza, donde murió uno de sus escoltas y dijo que en materia de seguridad "pareciera que el gobierno federal nos está dejando solos". Acusó al gobierno federal "de no tener una respuesta sólida" y "de tener una actuación ligera" con respecto al tema de seguridad en Chihuahua, su entidad de origen.
“Las víctimas ahora serán políticos”
Gerardo Priego Tapia
Diputado panista
El diputado del PAN advirtió que la ola de violencia irá en aumento "y en adelante las víctimas serán políticos y funcionarios", por lo que consideró que el proceso electoral de julio entrante entrará en etapa de riesgo, ya que el narcotráfico "buscará colocar gente en las curules federal y locales e intentará financiar candidatos". Previó que "el tono de las campañas electorales sí estará en riesgo por el acecho del narco a los candidatos; porque esos criminales van a financiar campañas y van a proponer a su gente porque, claro que les interesan las curules porque es desde ahí que pueden detener leyes.
“Advertencia a quienes toman decisiones”
Emilio Álvarez Icaza
Presidente de la CDHDF
El presidente de la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal coincidió en que el atentado contra el gobernador José Reyes Baeza "es una señal más de una espiral de violencia, que ahora se agrava por la advertencia a tomadores de decisiones. Es un hecho grave, sin duda", puntualizó.
Violencia “agravada”, sólo en Chihuahua
GUSTAVO MADERO
Presidente del Senado
El presidente del Senado, Gustavo Madero, rechazó que la ola de violencia sea crítica en todo el país y la redujo al estado de Chihuahua donde –advirtió—“la situación es agravada”.
“Creo que hay un clima (de violencia) y una guerra declarada (entre autoridades y el crimen organizado), pero en el caso de Chihuahua se manifiesta con una crudeza insospechada, concentrada y exacerbada, que multiplica en un solo estado lo que sucede en un sinnúmero de entidades de manera concentrada”, estableció.
Para argumentarlo, el panista detalló que una de cada tres ejecuciones se suscita en Chihuahua, es decir, de 32 estados, en una sola entidad se concentra el 30% de las ejecuciones que se registran en el país.
Insistió en que la situación en Chihuahua “es extremadamente crítica”, sobre todo en Ciudad Juárez, y aseveró que la posibilidad de establecer un estado de excepción en esa ciudad fronteriza es una decisión que corresponde evaluar al gobernador de esa entidad José Reyes Baeza y al Congreso local.
Madero se solidarizó con Reyes Baeza por el ataque que sufrió el convoy en el que viajaba, y advirtió que esa situación obliga a realizar medidas mas concretas para combatir al crimen organizado como las reformas en materia de narcomenudeo que envió el presidente Felipe Calderón al Congreso de la Unión y que se mantienen en “impasse”.
Atentados pueden llegar al presidente
JESÚSORTEGA
Dirigente nacional del PRD
El dirigente nacional del PRD, Jesús Ortega aseguró que el atentado contra el convoy del gobernador de Chihuahua, José Reyes Baeza, “agrava la situación nacional”, y advirtió que si el Estado mexicano no frena la ola de violencia que se ha desatado, ese fenómeno seguirá escalando y no descartó que se ataque a funcionarios de alto a nivel estatal y federal, incluyendo al Presidente de la República.
—¿Los atentados pueden llegar al Presidente de la República?
—Pues pueden crecer más y más y creo que es el momento de pararlo, nadie desearía que altos funcionarios de los estados o altos funcionarios de la Federación también fueran víctimas de atentados del narcotráfico.
Ortega aseguró que los cárteles del narcotráfico requieren de una reacción del Estado en su conjunto y no solo de una acción unilateral del gobierno federal, por lo cual insistió en que se debe convocar a una reunión urgente de todos los actores fundamentales de la vida política del país para hacer frente a este embate del crimen organizado y la violencia desbordada que han provocado.
César Duarte Jáquez
Presidente de la Cámara de Diputados
El presidente de la Cámara de Diputados condenó el atentado que sufrió su paisano, el gobernador de Chihuahua, José Reyes Baeza, donde murió uno de sus escoltas y dijo que en materia de seguridad "pareciera que el gobierno federal nos está dejando solos". Acusó al gobierno federal "de no tener una respuesta sólida" y "de tener una actuación ligera" con respecto al tema de seguridad en Chihuahua, su entidad de origen.
“Las víctimas ahora serán políticos”
Gerardo Priego Tapia
Diputado panista
El diputado del PAN advirtió que la ola de violencia irá en aumento "y en adelante las víctimas serán políticos y funcionarios", por lo que consideró que el proceso electoral de julio entrante entrará en etapa de riesgo, ya que el narcotráfico "buscará colocar gente en las curules federal y locales e intentará financiar candidatos". Previó que "el tono de las campañas electorales sí estará en riesgo por el acecho del narco a los candidatos; porque esos criminales van a financiar campañas y van a proponer a su gente porque, claro que les interesan las curules porque es desde ahí que pueden detener leyes.
“Advertencia a quienes toman decisiones”
Emilio Álvarez Icaza
Presidente de la CDHDF
El presidente de la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal coincidió en que el atentado contra el gobernador José Reyes Baeza "es una señal más de una espiral de violencia, que ahora se agrava por la advertencia a tomadores de decisiones. Es un hecho grave, sin duda", puntualizó.
Violencia “agravada”, sólo en Chihuahua
GUSTAVO MADERO
Presidente del Senado
El presidente del Senado, Gustavo Madero, rechazó que la ola de violencia sea crítica en todo el país y la redujo al estado de Chihuahua donde –advirtió—“la situación es agravada”.
“Creo que hay un clima (de violencia) y una guerra declarada (entre autoridades y el crimen organizado), pero en el caso de Chihuahua se manifiesta con una crudeza insospechada, concentrada y exacerbada, que multiplica en un solo estado lo que sucede en un sinnúmero de entidades de manera concentrada”, estableció.
Para argumentarlo, el panista detalló que una de cada tres ejecuciones se suscita en Chihuahua, es decir, de 32 estados, en una sola entidad se concentra el 30% de las ejecuciones que se registran en el país.
Insistió en que la situación en Chihuahua “es extremadamente crítica”, sobre todo en Ciudad Juárez, y aseveró que la posibilidad de establecer un estado de excepción en esa ciudad fronteriza es una decisión que corresponde evaluar al gobernador de esa entidad José Reyes Baeza y al Congreso local.
Madero se solidarizó con Reyes Baeza por el ataque que sufrió el convoy en el que viajaba, y advirtió que esa situación obliga a realizar medidas mas concretas para combatir al crimen organizado como las reformas en materia de narcomenudeo que envió el presidente Felipe Calderón al Congreso de la Unión y que se mantienen en “impasse”.
Atentados pueden llegar al presidente
JESÚSORTEGA
Dirigente nacional del PRD
El dirigente nacional del PRD, Jesús Ortega aseguró que el atentado contra el convoy del gobernador de Chihuahua, José Reyes Baeza, “agrava la situación nacional”, y advirtió que si el Estado mexicano no frena la ola de violencia que se ha desatado, ese fenómeno seguirá escalando y no descartó que se ataque a funcionarios de alto a nivel estatal y federal, incluyendo al Presidente de la República.
—¿Los atentados pueden llegar al Presidente de la República?
—Pues pueden crecer más y más y creo que es el momento de pararlo, nadie desearía que altos funcionarios de los estados o altos funcionarios de la Federación también fueran víctimas de atentados del narcotráfico.
Ortega aseguró que los cárteles del narcotráfico requieren de una reacción del Estado en su conjunto y no solo de una acción unilateral del gobierno federal, por lo cual insistió en que se debe convocar a una reunión urgente de todos los actores fundamentales de la vida política del país para hacer frente a este embate del crimen organizado y la violencia desbordada que han provocado.
Alejandro PÁEZ, Crónica, 24 de febrero.
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