Así lo dijo ayer el propio Mandatario en entrevista con una televisora local.
Aunque evitó señalar si el Gobierno de Vicente Fox fue omiso en el combate a la delincuencia, Calderón dijo que él encontró "un problema muy serio".
El Presidente se congratuló de que Estados Unidos empiece a "tomar más en serio" el combate al crimen organizado.
Felicitó al Gobierno de ese país y a su nuevo Procurador, Eric Holder, por el operativo con el que las autoridades detuvieron a unas 750 personas vinculadas con el Cártel de Sinaloa, aunque hizo notar que la Procuraduría General de la República también intervino.
"De manera tal que qué bueno que Estados Unidos empiece a tomar más en serio este problema", planteó, aunque insistió en que la Unión Americana tiene que "controlar otro aspecto": el tráfico de armas hacia México.
Para Calderón, con todo, Estados Unidos "tiene todavía mucho por hacer: nosotros estamos trabajando por reducir la oferta de drogas, pero si ellos no trabajan por reducir la demanda, simple y sencillamente no podremos resolver a fondo este asunto".
El Presidente Barack Obama, consideró, tiene muy clara la visión de que el fenómeno "no es un problema de México, sino que es común, y tenemos que trabajar en común para resolverlo".
A Calderón se le preguntó si su antecesor en el cargo, el Presidente Vicente Fox, había sido "omiso" en el combate al crimen, como lo planteó hace dos días el Secretario de Gobernación.
"No quiero yo juzgarlo ni a él ni a su equipo, lo respeto y aprecio; simplemente describo lo que encontré: un problema muy, muy serio.
"Haga de cuenta que yo llegué a la Presidencia y -permítaseme la metáfora- y como si fuera un médico al que le dice el paciente: 'oiga, me duele mucho el abdomen'. Y sabíamos que dolía mucho el abdomen", planteó.
"Sabíamos de extorsiones, de presiones, secuestros, levantamientos... los primeros decapitados aparecieron en 2005.
"Dolía el abdomen, y al abrir, lo que se pensaba que era un apendicitis, la verdad es que era un cáncer que había invadido una buena parte. Y lo que hay que hacer es extirpar, irradiar y atacar con todo".
El Presidente dijo que es "imposible" que el Ejército se mantenga permanentemente en las calles, amén de que "no sería lo deseable".
Lo deseable, agregó, es que las policías municipales y estatales, reforzadas con elementos federales, cumplan su tarea de cuidar a los ciudadanos.
"Lo que no es posible es que pensemos que el Ejército pueda patrullar todas las calles de México, o que si hay 200 gentes bloqueando una vialidad tenga que venir un avión antimotines de la Ciudad de México a removerlos, y más cuando sabemos que se trata de gente (en alusión a los 'tapados' de Monterrey) manipulada por el crimen organizado".
Respecto de la eventualidad de suspender las garantías individuales, Calderón dijo que, a pesar de que es una figura constitucional, "por ahora" no puede considerarla.
En la entrevista, identificó a Ciudad Juárez como el punto más violento de México.
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