Recibe IFE críticas; pospone sanción

El PRD y PAN refutaron ayer el dictamen de la Unidad de Fiscalización del IFE sobre gastos de campaña, que plantea que sólo Andrés Manuel López Obrador rebasó los topes aprobados para la campaña presidencial de 2012.

Ante la ola de críticas y descalificaciones que recayeron sobre el organismo electoral por la multa de 129 millones que propone aplicar a la coalición Movimiento Progresista, en la sesión del Consejo General 7 de los 9 consejeros -Leonardo Valdés y Marco Antonio Baños votaron en contra- aprobaron posponer la discusión del proyecto hasta el próximo miércoles.

Los representantes del blanquiazul y el sol azteca hicieron mancuerna para reprochar al IFE que no haya aplicado los mismos criterios con el caso Monex, y cuyo dictamen eximió al PRI de una sanción millonaria por triangular financiamiento ilegal a la campaña de Enrique Peña Nieto.

Por rebasar topes de gastos de campaña, la Unidad de Fiscalización propone multar con 129 millones pesos al PRD, el PT y Movimiento Ciudadano; con 54 millones al PRI; al PAN, con 2 millones, y al Panal con 288 mil pesos.

El martes pasado, líderes del PRD se reunieron con los consejeros y acusaron a la Unidad de Fiscalización de tabular mal sus gastos y exigieron revisar el dictamen.

Ayer, al arrancar la sesión, el consejero Alfredo Figueroa propuso posponer la discusión de la multa y tener más tiempo para analizar un expediente.

"Este lapso daría oportunidad de hacer un análisis puntual de todos los informes, de todas las resoluciones e, incluso, de las nuevas condiciones criteriales", planteó.

Rogelio Carbajal, representante panista, aclaró que la izquierda debe ser sancionada si violó las reglas, pero recriminó que los consejeros no aplicaron los mismos criterios para todas las multas, pues la semana pasado exoneraron al PRI por el caso Monex.

"Cuando no se tiene certeza es que hay dudas respecto de criterios; cuando hay dudas no puede haber certeza, y cuando no hay certeza no puede haber legalidad, y cuando no hay legalidad no hay imparcialidad", dijo el panista, quien urgió al IFE a medir a todos con la misma vara.

"Ahora sí son sancionados los gastos no comprobados y se pone sobre la mesa un criterio de prorrateo de recursos de la campaña verdaderamente absurdo, escandaloso. Una decisión que va contribuir a ese desprestigio que circula en el País (en contra del IFE)", dijo por su parte Javier Corral, senador del PAN.

En una primera reacción a las críticas, el consejero Francisco Guerrero dijo que votaba a favor, pero aclaró que eso no implicaba modificar el dictamen.

Y en tono irónico agregó que ya estaban acostumbrados a las descalificaciones.

Los representantes del PRI y PVEM advirtieron que posponer la discusión del dictamen era aceptar la presión de la izquierda y, al ceder, el IFE corre el riesgo de fracasar como autoridad.

"De ninguna manera se le podrá cambiar ni una coma al dictamen entregado. Estamos seguros que actuarán responsablemente, que de ninguna manera se dejarán influenciar por presiones de ningún tipo", exigió el priista José Antonio Hernández.

Pero el consejero Benito Nacif reviró: "No es presión, al contrario, lo que hacemos es quitar la presión de encima y trabajar con el detenimiento que el caso amerita".

'El debido proceso' Leonardo Valdés, presidente del IFE, fijó su postura en la última ronda y se opuso a modificar el sentido del dictamen.

"No encuentro cómo se pueda cuestionar el debido proceso que observó la Unidad de Fiscalización No creo, en consecuencia, que exista ausencia de certeza en el documento", argumentó.

El representante perredista Camerino Márquez recriminó a Valdés por votar en contra, pues su papel, dijo, es cuidar el principio de certeza e imparcialidad.

"Usted, en su intervención, ha considerado que el dictamen no debe tener ningún cambio y que debe ser aprobado. No se debe prejuzgar y descalificar anticipadamente", añadió Márquez.

Érika Hernández y Leslie Gómez, Reforma, 31 de enero.