La venta directa de dólares que realizó el Banco de México (Banxico) para controlar la volatilidad del tipo de cambio durante la semana pasada, permite inferir que fue producto de una especulación, afirmó el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP).
En su publicación semanal, el CEESP sostuvo que "el hecho es que la volatilidad siguió por varios días sin una causa razonable, lo cual permite inferir que fue producto de especulación".
A mediados de la semana pasada la paridad cambiaria registró presiones importantes que llevaron al dólar a cotizarse cerca de los 15 pesos; esto propició que Banxico interviniera con la venta directa de dólares al mercado, con el objetivo de reducir la volatilidad cambiaria, mecanismo que ya tenía algunos años que no se utilizaba, detalló.
"Aunque esta medida fue buena, el hecho de que no se informara el monto ni el tipo de cambio al cual se realizaron las operaciones, generaron cierto malestar", aseguró.
El CEESP refirió que según Banxico, ello se llevó a cabo para evitar la especulación, toda vez que algunos participantes aprovechan la información para obtener ganancias a costa del mercado.
Al final, la intervención de las autoridades monetarias contribuyó a reducir la volatilidad del mercado, toda vez que al cierre de la semana el tipo de cambio se acercó más a la línea de los 14 pesos por dólar.
El organismo afirmó que la intervención del banco central podría inhibir las presiones que llegara a tener el tipo de cambio durante los próximos meses, como resultado de la baja de los flujos en exportación de mercancías, de inversión extranjera, de remesas familiares e ingresos por turismo.
Sin embargo, advierte, dada la situación que se avecina y la volatilidad a la que estará expuesto el tipo de cambio, cabe la posibilidad de que las reservas internacionales disminuyan de manera importante a lo largo del año. Pese a ello, también existe la posibilidad de que vuelvan a aumentar hacia finales del ejercicio, debido a una recuperación de la actividad económica.
"La confianza de los participantes será un elemento clave para evitar mayores desequilibrios en los mercados, además de que podría contribuir igualmente al mejor cumplimiento de los programas anticíclicos anunciados", finalizó.
Por su parte, Actinver, afirmó que el Banco de México deberá continuar en apoyo al peso ante la gran aversión al riesgo, ya que "una paridad elevada puede afectar las expectativas inflacionarias para este año". La Casa de Bolsa revisó su estimación de la paridad cambiaria a 14.80 pesos por dólar para el cierre de 2009, desde 11.1 que preveía en octubre del año pasado, esto en un contexto de menores ingresos petroleros y una disminución en la inversión extranjera directa.
En su publicación semanal, el CEESP sostuvo que "el hecho es que la volatilidad siguió por varios días sin una causa razonable, lo cual permite inferir que fue producto de especulación".
A mediados de la semana pasada la paridad cambiaria registró presiones importantes que llevaron al dólar a cotizarse cerca de los 15 pesos; esto propició que Banxico interviniera con la venta directa de dólares al mercado, con el objetivo de reducir la volatilidad cambiaria, mecanismo que ya tenía algunos años que no se utilizaba, detalló.
"Aunque esta medida fue buena, el hecho de que no se informara el monto ni el tipo de cambio al cual se realizaron las operaciones, generaron cierto malestar", aseguró.
El CEESP refirió que según Banxico, ello se llevó a cabo para evitar la especulación, toda vez que algunos participantes aprovechan la información para obtener ganancias a costa del mercado.
Al final, la intervención de las autoridades monetarias contribuyó a reducir la volatilidad del mercado, toda vez que al cierre de la semana el tipo de cambio se acercó más a la línea de los 14 pesos por dólar.
El organismo afirmó que la intervención del banco central podría inhibir las presiones que llegara a tener el tipo de cambio durante los próximos meses, como resultado de la baja de los flujos en exportación de mercancías, de inversión extranjera, de remesas familiares e ingresos por turismo.
Sin embargo, advierte, dada la situación que se avecina y la volatilidad a la que estará expuesto el tipo de cambio, cabe la posibilidad de que las reservas internacionales disminuyan de manera importante a lo largo del año. Pese a ello, también existe la posibilidad de que vuelvan a aumentar hacia finales del ejercicio, debido a una recuperación de la actividad económica.
"La confianza de los participantes será un elemento clave para evitar mayores desequilibrios en los mercados, además de que podría contribuir igualmente al mejor cumplimiento de los programas anticíclicos anunciados", finalizó.
Por su parte, Actinver, afirmó que el Banco de México deberá continuar en apoyo al peso ante la gran aversión al riesgo, ya que "una paridad elevada puede afectar las expectativas inflacionarias para este año". La Casa de Bolsa revisó su estimación de la paridad cambiaria a 14.80 pesos por dólar para el cierre de 2009, desde 11.1 que preveía en octubre del año pasado, esto en un contexto de menores ingresos petroleros y una disminución en la inversión extranjera directa.
Margarita Jasso, Crónica, 9 de febrero.
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