En el combate al crimen organizado, las autoridades deben apoyar e impulsar a las víctimas de la violencia para que se conviertan en generadores de conciencia en sus comunidades, propuso ayer el sacerdote italiano Luigi Ciotti, fundador de la asociación Libera.
La asociación, creada en 1995, coordina actualmente a mil 200 agrupaciones civiles italianas encaminadas a contrarrestar la operación de las mafias.
Ciotti explicó que las víctimas deben asumir un rol protagónico en las acciones contra el narcotráfico y la delincuencia organizada en el País, a través de pláticas sobre legalidad en lugares públicos.
"(Hay que) dar dignidad y protagonismo, participación a las víctimas, a los inocentes de estas agresiones por parte del crimen organizado, que ellos se vuelvan protagonistas de esta reacción en los territorios, escuelas, universidades y que no se encierren en su dolor, que generen una conciencia", dijo.
En Italia, comentó, lograron que el primer día de primavera sean suspendidas las labores para recordar a las víctimas de la mafia.
La violencia que vive actualmente México por el crimen organizado, que el año pasado dejó más de 5 mil 200 ejecuciones, es una situación ya padecida por los italianos a causa de las mafias, señaló el sacerdote, de visita en el País para participar en las Jornadas de Reflexión sobre Seguridad y Violencia.
"Esta violencia, secuestros, los muertos, me recuerda mucho la historia que vivimos en Italia, la lucha para el control del territorio para el comercio de estupefacientes, o para otras cosas ilegales que las mafias administraron en los últimos años", manifestó.
Aseguró que en su país la confiscación de bienes y recursos económicos a criminales ha sido positiva, pues ese patrimonio ilegal se reasigna para labores productivas que benefician a la sociedad.
"Hoy en Italia a través de estas cooperativas muchos jóvenes encontraron trabajo y se han construido supermercados y comercios donde el aceite, la pasta y diversos productos comercializados vienen de bienes confiscados", explicó.
En entrevista con REFORMA previo a su plática dentro de las Jornadas, organizadas por la Comisión Episcopal para la Pastoral Social (CEPS), el sacerdote italiano criticó que en el mundo se hable de lucha contra el narcotráfico cuando el consumo de drogas va en aumento.
Indicó que ve una reacción fuerte por parte del Gobierno mexicano y una gran respuesta de la sociedad civil para contrarrestar al narcotráfico.
No obstante, advirtió que se requiere un trabajo a nivel mundial, en el que cada gobierno empiece por atacar la corrupción.
Es importante el sistema de procuración e impartición de justicia, pero los políticos tienen que asumir su responsabilidad en el combate al crimen, aseveró.
"Hay intereses, movimientos en juego, todos hablan de lucha contra la droga pero es el único mercado que crece, entonces se necesita una decisión política mundial para unirse y decir 'basta', hay demasiada ambigüedad, demasiada corrupción", señaló, mediante un traductor.
El sacerdote resaltó la importancia de que la Iglesia católica mexicana convoque a foros de discusión sobre la violencia e inseguridad, problemas que preocupan a El Vaticano.
Recordó que el Papa Benedicto XVI ha llamado a los gobiernos de los países latinoamericanos a incrementar las acciones contra los funcionarios corruptos y el crimen.
"Hay una responsabilidad política, hay una respuesta de las fuerzas del orden, pero también un empeño de los ciudadanos y la fuerza social, aquí es muy bello que la Iglesia mexicana quiere proponer una fuente seria para decidir cuál es la contribución que nos toca a nosotros", indicó.
Ciotti compartió panel con los expertos en temas de seguridad, Samuel González, ex titular de la Unidad Especializada contra la Delincuencia Organizada (UEDO), ahora SIEDO, y Edgardo Buscaglia.
A la intervención del sacerdote fundador de Libera, en las instalaciones de Casa Lago, asistió el Embajador de Italia en México, Felice Scauso.
La asociación, creada en 1995, coordina actualmente a mil 200 agrupaciones civiles italianas encaminadas a contrarrestar la operación de las mafias.
Ciotti explicó que las víctimas deben asumir un rol protagónico en las acciones contra el narcotráfico y la delincuencia organizada en el País, a través de pláticas sobre legalidad en lugares públicos.
"(Hay que) dar dignidad y protagonismo, participación a las víctimas, a los inocentes de estas agresiones por parte del crimen organizado, que ellos se vuelvan protagonistas de esta reacción en los territorios, escuelas, universidades y que no se encierren en su dolor, que generen una conciencia", dijo.
En Italia, comentó, lograron que el primer día de primavera sean suspendidas las labores para recordar a las víctimas de la mafia.
La violencia que vive actualmente México por el crimen organizado, que el año pasado dejó más de 5 mil 200 ejecuciones, es una situación ya padecida por los italianos a causa de las mafias, señaló el sacerdote, de visita en el País para participar en las Jornadas de Reflexión sobre Seguridad y Violencia.
"Esta violencia, secuestros, los muertos, me recuerda mucho la historia que vivimos en Italia, la lucha para el control del territorio para el comercio de estupefacientes, o para otras cosas ilegales que las mafias administraron en los últimos años", manifestó.
Aseguró que en su país la confiscación de bienes y recursos económicos a criminales ha sido positiva, pues ese patrimonio ilegal se reasigna para labores productivas que benefician a la sociedad.
"Hoy en Italia a través de estas cooperativas muchos jóvenes encontraron trabajo y se han construido supermercados y comercios donde el aceite, la pasta y diversos productos comercializados vienen de bienes confiscados", explicó.
En entrevista con REFORMA previo a su plática dentro de las Jornadas, organizadas por la Comisión Episcopal para la Pastoral Social (CEPS), el sacerdote italiano criticó que en el mundo se hable de lucha contra el narcotráfico cuando el consumo de drogas va en aumento.
Indicó que ve una reacción fuerte por parte del Gobierno mexicano y una gran respuesta de la sociedad civil para contrarrestar al narcotráfico.
No obstante, advirtió que se requiere un trabajo a nivel mundial, en el que cada gobierno empiece por atacar la corrupción.
Es importante el sistema de procuración e impartición de justicia, pero los políticos tienen que asumir su responsabilidad en el combate al crimen, aseveró.
"Hay intereses, movimientos en juego, todos hablan de lucha contra la droga pero es el único mercado que crece, entonces se necesita una decisión política mundial para unirse y decir 'basta', hay demasiada ambigüedad, demasiada corrupción", señaló, mediante un traductor.
El sacerdote resaltó la importancia de que la Iglesia católica mexicana convoque a foros de discusión sobre la violencia e inseguridad, problemas que preocupan a El Vaticano.
Recordó que el Papa Benedicto XVI ha llamado a los gobiernos de los países latinoamericanos a incrementar las acciones contra los funcionarios corruptos y el crimen.
"Hay una responsabilidad política, hay una respuesta de las fuerzas del orden, pero también un empeño de los ciudadanos y la fuerza social, aquí es muy bello que la Iglesia mexicana quiere proponer una fuente seria para decidir cuál es la contribución que nos toca a nosotros", indicó.
Ciotti compartió panel con los expertos en temas de seguridad, Samuel González, ex titular de la Unidad Especializada contra la Delincuencia Organizada (UEDO), ahora SIEDO, y Edgardo Buscaglia.
A la intervención del sacerdote fundador de Libera, en las instalaciones de Casa Lago, asistió el Embajador de Italia en México, Felice Scauso.
Luis Brito, Reforma, 3 de febrero.
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