El presidente Felipe Calderón aseguró que su gobierno está decidido a “poner punto final” al crimen organizado, que se instaló en México “al amparo de un largo tiempo de impunidad e incluso de complicidad”.
El narcotráfico, apuntó el mandatario, “asecha a través de la violencia o la esclavitud de las adicciones a las familias mexicanas”.
Por ello, “en este desafío la República y su gobierno han tomado la determinación de poner punto final a esas acciones criminales, hacerles frente y fortalecer la autoridad del Estado, particularmente en aquellas entidades más asoladas por la acción de la criminalidad”, aseguró.
Al encabezar en el Zócalo de la Ciudad de México la conmemoración del Día de la Bandera, Calderón afirmó en un tono enérgico —y a veces golpeando con el puño el atril— que ésta es la ocasión propicia para reflexionar qué país queremos para el futuro “y sobre todo, qué nos toca hacer y qué estamos dispuestos a hacer” para alcanzarlo.
Hizo un llamado a la unidad, a conservar la capacidad de acuerdo, entendimiento y cooperación frente al crimen y la adversidad económica que representan una “amenaza” a la prosperidad y al nivel de vida de los mexicanos.
Después de izar la Bandera monumental, el Presidente dijo que la enseña nacional debe cubrir “el espíritu de los soldados, policías y marinos que luchan por los mexicanos, pero también a sus gobernantes”.
La Bandera, dijo el presidente, también debe aglutinar a los mexicanos para enfrentar la adversidad económica “derivada de una situación financiera internacional sin precedentes en la historia moderna, una situación que representa una amenaza a la prosperidad y al nivel de vida de los mexicanos”.
Y parafraseando a Andrés Henestrosa, el Presidente dijo que la Bandera “nos alienta a que cuando algunos retrocedan o acepten como irremediable el avance de los poderosos, a otros, muchos más, nos aliente a tomar como nuestra la defensa de la tierra y de la historia”.
A la ceremonia acudió en representación de Marcelo Ebrard, jefe de gobierno capitalino, su secretario de Seguridad Pública y hombre cercano, Manuel Mondragón, así como el ministro presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Guillermo Ortiz Mayagoitia y los presidentes del Senado y la Cámara de Diputados, Gustavo Madero y César Duarte, respectivamente.
También acompañó al Presidente casi todo su gabinete legal, excepto el procurador general de la República.
- Claves
Los operativos
• Como parte de su estrategia para enfrentar al crimen organizado, el presidente Felipe Calderón puso en marcha el 2 de julio de 2007 el programa Limpiemos México.
• En esa estrategia se contempló por primera vez operativos conjuntos entre fuerzas policiacas y efectivos militares en distintos estados del país, como Nuevo León y Chihuahua.
• Pese a ello, las ejecuciones de los cárteles han ido en aumento e incluso en días recientes los narcos han financiado protestas callejeras. Ante éstas, Calderón dijo que son cobardes quienes usan a niños contra el Ejército.
El narcotráfico, apuntó el mandatario, “asecha a través de la violencia o la esclavitud de las adicciones a las familias mexicanas”.
Por ello, “en este desafío la República y su gobierno han tomado la determinación de poner punto final a esas acciones criminales, hacerles frente y fortalecer la autoridad del Estado, particularmente en aquellas entidades más asoladas por la acción de la criminalidad”, aseguró.
Al encabezar en el Zócalo de la Ciudad de México la conmemoración del Día de la Bandera, Calderón afirmó en un tono enérgico —y a veces golpeando con el puño el atril— que ésta es la ocasión propicia para reflexionar qué país queremos para el futuro “y sobre todo, qué nos toca hacer y qué estamos dispuestos a hacer” para alcanzarlo.
Hizo un llamado a la unidad, a conservar la capacidad de acuerdo, entendimiento y cooperación frente al crimen y la adversidad económica que representan una “amenaza” a la prosperidad y al nivel de vida de los mexicanos.
Después de izar la Bandera monumental, el Presidente dijo que la enseña nacional debe cubrir “el espíritu de los soldados, policías y marinos que luchan por los mexicanos, pero también a sus gobernantes”.
La Bandera, dijo el presidente, también debe aglutinar a los mexicanos para enfrentar la adversidad económica “derivada de una situación financiera internacional sin precedentes en la historia moderna, una situación que representa una amenaza a la prosperidad y al nivel de vida de los mexicanos”.
Y parafraseando a Andrés Henestrosa, el Presidente dijo que la Bandera “nos alienta a que cuando algunos retrocedan o acepten como irremediable el avance de los poderosos, a otros, muchos más, nos aliente a tomar como nuestra la defensa de la tierra y de la historia”.
A la ceremonia acudió en representación de Marcelo Ebrard, jefe de gobierno capitalino, su secretario de Seguridad Pública y hombre cercano, Manuel Mondragón, así como el ministro presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Guillermo Ortiz Mayagoitia y los presidentes del Senado y la Cámara de Diputados, Gustavo Madero y César Duarte, respectivamente.
También acompañó al Presidente casi todo su gabinete legal, excepto el procurador general de la República.
- Claves
Los operativos
• Como parte de su estrategia para enfrentar al crimen organizado, el presidente Felipe Calderón puso en marcha el 2 de julio de 2007 el programa Limpiemos México.
• En esa estrategia se contempló por primera vez operativos conjuntos entre fuerzas policiacas y efectivos militares en distintos estados del país, como Nuevo León y Chihuahua.
• Pese a ello, las ejecuciones de los cárteles han ido en aumento e incluso en días recientes los narcos han financiado protestas callejeras. Ante éstas, Calderón dijo que son cobardes quienes usan a niños contra el Ejército.
Lorena López, Milenio, 25 de febrero.
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