Colaboración “sin límite” en inteligencia y tecnología policial, ofrecimiento de Sarkozy

El presidente de Francia, Nicolás Sarkozy, ofreció a México una colaboración que “no tiene límites” para intercambiar información, inteligencia y tecnología policial; incluso anunció la instalación de una empresa de helicópteros en territorio mexicano que surtirá a las fuerzas armadas.

El presidente Felipe Calderón elogió la magnífica tecnología que ha desarrollado Francia en equipo de rastreo y de investigación científica policiaca, por lo que indicó que “juntos vamos a derrotar” al crimen.

Además del caso de Florence Cassez, la seguridad fue el tema central de la primera visita de Estado del visitante francés. De hecho, desde su primer discurso en Palacio Nacional, Sarkozy expresó su apoyo al “valeroso y determinado” combate emprendido en México contra el crimen organizado.

Luego de que ambos sostuvieron un encuentro, el mandatario francés anunció su disposición de ayudar a las distintas corporaciones policiacas mexicanas para que tengan mayor eficacia y juntos enfrenten la “horrorosa epidemia” de secuestros. También dijo que empresas aeronáuticas abrirán una universidad y, concretamente, Eurocopter, una fábrica en México que producirá helicópteros que surtirán a América Latina.

Sin detallar el monto de la inversión en esta planta, Calderón encomió la decisión porque es una muestra de la confianza de la industria francesa en México.

Acompañado por una amplia comitiva, Sarkozy llegó a Palacio Nacional poco después de las 10 de la mañana y tanto él como su esposa, Carla Bruni, hicieron una expresión de sorpresa con el escenario y con la recepción, ya que había cientos de estudiantes agitando banderas. Luego de que su par mexicano evocó la visita del presidente Charles de Gaulle a México, en marzo de 1964, Sarkozy remató su discurso con la frase “Viva México, viva Francia y viva la amistad franco-mexicana”.

Luego de los discursos y de que ambos pasaron revista a las tropas, la más solicitada fue Bruni, ya que los alumnos comenzaron a gritar: “¡Carla, Carla!”, por lo que ella tomó de la mano a su esposo y, acompañados de Calderón y de Margarita Zavala, caminaron a saludar a los niños.

En la conferencia de prensa, Sarkozy señaló que es un “militante” con todo vigor para que México tenga un lugar como miembro permanente en el Consejo de Seguridad de la Organización de Naciones Unidas, y como integrante del Grupo de los Ocho (G-8), lo que se realizará con la ayuda de Italia en la celebración de su próxima sesión.

Más tarde, en reunión con los integrantes del Grupo de Alto Nivel, donde se encuentran empresarios y académicos, dijo que la idea de que no haya miembros permanentes de América Latina y de Africa en el Consejo de Seguridad es “una locura”.

Sarkozy manifestó interés en incrementar la relación económico-comercial entre las dos naciones, luego de abogar por hechos concretos y menos discursos. Agregó que quiere que sea más fácil para México vender sus productos en Francia, y en contrapartida, que más empresas galas puedan venir a territorio mexicano.

A pesar de que el intercambio comercial bilateral creció 120 por ciento en los últimos ocho años, Calderón expuso a su vez que aún están lejos de aprovechar todo el potencial de sus economías. Por ello exhortó a los empresarios franceses a que aprovechen las ventajas comparativas que tiene el país, y que vean en el gobierno un aliado para traer inversión productiva.

Los dos presidentes firmaron una serie de convenios de colaboración en materia de educación para formar especialistas mexicanos en aeronáutica y en salud para que México instale aquí, con el apoyo francés, una fábrica de vacunas contra la influenza.

Por otra parte, el gobierno francés decretó la celebración del año de México en Francia, y en reciprocidad nuestro país celebrará en 2011 el año de Francia en México.

Antes de regresar a su país, Sarkozy elogió que la lucha contra el crimen en México sea con las reglas de la democracia, porque otros países se han debilitado por combatir a los terroristas sin respetar estas normas.

En la cena que Calderón ofreció a la delegación francesa en el salón Tesorería de Palacio Nacional, amenizada por Guadalupe Pineda y el mariachi de la Secretaría de Marina, el presidente francés señaló que a veces las víctimas no entienden este principio, pero las reglas de la democracia son la “mejor arma” contra el crimen.

Hizo ver que, a finales del siglo XX, México reforzó su relación con sus “grandes vecinos”, Estados Unidos y Canadá, e incluso Francia estaba ocupada en una nueva era de construcción de Europa, pero señaló que con esta visita los dos países se unen de nuevo.

Al banquete acudieron priístas como Beatriz Paredes, Rosario Green y Fernando Solana, integrantes del gabinete, además de gobernadores, el empresario Manuel Arango y el presidente del IFAI, Alonso Lujambio.
Claudia Herrera y Georgina Saldierna, La Jornada, 10 de marzo.

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