El presidente Felipe Calderón reconoció que Estados Unidos muestra voluntad de “hacer su parte” para combatir la violencia y el crimen que se vive en las ciudades fronterizas, y aunque afirmó que deben trabajar juntos, esto no implicará operativos conjuntos militares o de elementos de la fuerza pública.
Dijo que el presidente Barack Obama y su gobierno quieren cooperar, y después de que el mandatario estadunidense habló de que en la frontera la situación está “fuera de control”, Calderón sostuvo que su homólogo sólo “ha manifestado una preocupación por la amenaza que estos grupos criminales representan para las comunidades de ambos países”, pero insistió en que es momento de construir de manera conjunta una meta común.
Se negó a comentar sobre la comparación con Elliot Ness y sostuvo que más que buscar culpables o confrontar posiciones, aprecia que Obama reitere la intención de su gobierno “para hacer su parte; vemos una voluntad clara y creo que eso nos va a permitir avanzar, incluso, más rápido en estos resultados”.
Durante el mensaje conjunto que ofreció con el primer ministro de Reino Unido, Gordon Brown, el mandatario mexicano destacó que además de frenar el consumo de drogas, en Estados Unidos debe reducirse la venta de armas ya que, afirmó, es muy clara la correlación entre el incremento de la violencia y el poder del crimen organizado con el hecho de que desde 2004 se permite en ese país comercializar rifles de asalto.
“Hay suficiente tarea por hacer si cada quien hace su parte, en el territorio que le corresponde y, eso sí, conjuntar esfuerzos para compartir información, por ejemplo, que nos permita derivar en inteligencia para combatir el crimen organizado como lo estamos haciendo”, afirmó el jefe del Ejecutivo.
Una vez más admitió que en México “tenemos un problema muy serio” de violencia, especialmente en las ciudades fronterizas con Estados Unidos, “pero también es cierto que estamos haciéndole frente al problema con firmeza y con determinación, con una firmeza y determinación que no tiene precedentes en el país”.
Combate con firmeza
En Londres, el Presidente aseguró que la violencia y el crimen organizado “no es un problema sólo de México” y tiene que ver con que detrás de su frontera se encuentra el mercado de drogas más grande del mundo.
Destacó que el presidente Obama y él saben que “más que buscar culpables o confrontar posiciones” deben resolver juntos el problema y que el propio mandatario estadunidense ha admitido que hay que frenar el consumo de drogas en Estados Unidos y la provisión de recursos al crimen.
“El gobierno mexicano seguirá combatiendo con firmeza y determinación a las organizaciones criminales internacionales. Para ello será útil la colaboración de todos, especialmente de quienes estamos enfrentando el problema: México y Estados Unidos”, dijo.
Dijo que el presidente Barack Obama y su gobierno quieren cooperar, y después de que el mandatario estadunidense habló de que en la frontera la situación está “fuera de control”, Calderón sostuvo que su homólogo sólo “ha manifestado una preocupación por la amenaza que estos grupos criminales representan para las comunidades de ambos países”, pero insistió en que es momento de construir de manera conjunta una meta común.
Se negó a comentar sobre la comparación con Elliot Ness y sostuvo que más que buscar culpables o confrontar posiciones, aprecia que Obama reitere la intención de su gobierno “para hacer su parte; vemos una voluntad clara y creo que eso nos va a permitir avanzar, incluso, más rápido en estos resultados”.
Durante el mensaje conjunto que ofreció con el primer ministro de Reino Unido, Gordon Brown, el mandatario mexicano destacó que además de frenar el consumo de drogas, en Estados Unidos debe reducirse la venta de armas ya que, afirmó, es muy clara la correlación entre el incremento de la violencia y el poder del crimen organizado con el hecho de que desde 2004 se permite en ese país comercializar rifles de asalto.
“Hay suficiente tarea por hacer si cada quien hace su parte, en el territorio que le corresponde y, eso sí, conjuntar esfuerzos para compartir información, por ejemplo, que nos permita derivar en inteligencia para combatir el crimen organizado como lo estamos haciendo”, afirmó el jefe del Ejecutivo.
Una vez más admitió que en México “tenemos un problema muy serio” de violencia, especialmente en las ciudades fronterizas con Estados Unidos, “pero también es cierto que estamos haciéndole frente al problema con firmeza y con determinación, con una firmeza y determinación que no tiene precedentes en el país”.
Combate con firmeza
En Londres, el Presidente aseguró que la violencia y el crimen organizado “no es un problema sólo de México” y tiene que ver con que detrás de su frontera se encuentra el mercado de drogas más grande del mundo.
Destacó que el presidente Obama y él saben que “más que buscar culpables o confrontar posiciones” deben resolver juntos el problema y que el propio mandatario estadunidense ha admitido que hay que frenar el consumo de drogas en Estados Unidos y la provisión de recursos al crimen.
“El gobierno mexicano seguirá combatiendo con firmeza y determinación a las organizaciones criminales internacionales. Para ello será útil la colaboración de todos, especialmente de quienes estamos enfrentando el problema: México y Estados Unidos”, dijo.
Lorena López enviada, Milenio, 31 de marzo.
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