Los partidos de oposición en la Cámara de Diputados encararon al secretario de Hacienda, Agustín Carstens, para asegurarle que no aprobarán nuevos impuestos ni recortes en salud, educación y participaciones a estados y municipios, dentro del paquete económico para el año próximo.
Con diversos matices, PRI, PRD, PT, Convergencia y Nueva Alianza reprobaron la propuesta tributaria presentada por el gobierno federal por considerarla “regresiva y dañina”.
Durante la comparecencia de más de cinco horas del funcionario, el diputado priista Jesús Alberto Cano se refirió a la aplicación de un impuesto de 2% al consumo general para combatir la pobreza. “Funciona como IVA, grava como IVA y lastima como IVA, es un albazo impositivo”, expresó.
“El gobierno no sabe crear fuentes de trabajo, pero sí crear impuestos”, agregó.
En su intervención, el legislador perredista Vidal Llerenas criticó a la Secretaría de Hacienda y al gobierno federal porque sólo están en espera de la recuperación económica de Estados Unidos.
En sus participaciones, los partidos del Trabajo y Convergencia condenaron el dispendio en la alta burocracia y la existencia de 26 multimillonarios mexicanos entre los más ricos del planeta.
Nueva Alianza también rechazó el aumento de impuestos, por ser contrario a la reactivación del empleo.
En defensa del polémico gravamen de 2%, Carstens se refirió a que encuestas recientes indican que “una inmensa mayoría de los mexicanos está dispuesta a pagar una contribución adicional que se destine a combatir la pobreza, sobre todo si los recursos obtenidos se ejercen con toda transparencia”.
Negó que los impuestos planteados sean regresivos, ya que afectarán más a la población de mayores ingresos.
Como una medida para que gobiernos locales obtengan más recursos, llamó a estados y municipios a alentar el pago del predial. “El potencial recaudatorio del impuesto predial es muy alto y no se explota”, dijo.
Con diversos matices, PRI, PRD, PT, Convergencia y Nueva Alianza reprobaron la propuesta tributaria presentada por el gobierno federal por considerarla “regresiva y dañina”.
Durante la comparecencia de más de cinco horas del funcionario, el diputado priista Jesús Alberto Cano se refirió a la aplicación de un impuesto de 2% al consumo general para combatir la pobreza. “Funciona como IVA, grava como IVA y lastima como IVA, es un albazo impositivo”, expresó.
“El gobierno no sabe crear fuentes de trabajo, pero sí crear impuestos”, agregó.
En su intervención, el legislador perredista Vidal Llerenas criticó a la Secretaría de Hacienda y al gobierno federal porque sólo están en espera de la recuperación económica de Estados Unidos.
En sus participaciones, los partidos del Trabajo y Convergencia condenaron el dispendio en la alta burocracia y la existencia de 26 multimillonarios mexicanos entre los más ricos del planeta.
Nueva Alianza también rechazó el aumento de impuestos, por ser contrario a la reactivación del empleo.
En defensa del polémico gravamen de 2%, Carstens se refirió a que encuestas recientes indican que “una inmensa mayoría de los mexicanos está dispuesta a pagar una contribución adicional que se destine a combatir la pobreza, sobre todo si los recursos obtenidos se ejercen con toda transparencia”.
Negó que los impuestos planteados sean regresivos, ya que afectarán más a la población de mayores ingresos.
Como una medida para que gobiernos locales obtengan más recursos, llamó a estados y municipios a alentar el pago del predial. “El potencial recaudatorio del impuesto predial es muy alto y no se explota”, dijo.
Andrea Merlos, José Manuel Arteaga y Juan Arvizu, El Universal, 16 de septiembre.
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