El Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación 2010 enviado ayer por el presidente Felipe Calderón al Congreso, propone un recorte de 218 mil millones de pesos en relación con el Presupuesto aprobado para este 2009, lo que representa un 1.7 por ciento del PIB.
La política de gasto para el próximo año contempla una transformación de la Administración Pública Federal que incluye la desaparición de tres secretarías de Estado, la fusión de la Lotería Nacional y Pronósticos Deportivos en un solo organismo y reducciones al gasto programable en casi todas las dependencias restantes.
Esta transformación de la estructura administrativa permitirá un ahorro de hasta seis mil 500 millones de pesos en el 2010, cantidad que podría ascender hasta ocho mil millones de pesos a partir del 2011, cuando concluya la reestructuración.
Además, se contemplan ahorros hasta por 80 mil millones de pesos a través de medidas de contención y mayor eficiencia como la disminución en los gastos de administración y operación y de servicios personales en dependencias y entidades.
Estas medidas incluyen la reducción del 5 por ciento de las estructuras de mandos superiores, reducción del 5 por ciento del presupuesto asociado a estructuras administrativas de dependencias, órganos desconcentrados y dependencias paraestatales, incluidas oficialías mayores y áreas homólogas, lo que persigue evitar duplicidad de funciones y la optimización de esfuerzos.
Además, reducción del 10 por ciento del gasto asociado a representaciones y oficinas del gobierno federal en el extranjero y reducción del 10 por ciento del gasto en estructuras y administración de las delegaciones, oficinas y representaciones de las dependencias del gobierno federal, órganos desconcentrados y entidades paraestatales en los estados.
Dentro del Gasto Programable del Sector Público 2009-2010 se contempla una disminución del 1.4 por ciento del gasto corriente, al pasar de dos mil 432 millones de pesos en 2009 a dos mil 397.9 millones de pesos en 2010.
El Fondo de Estabilización, que en el 2009 fue de 48 millones de pesos, desaparecerá el próximo año, mientras que las participaciones federales a los estado se incrementarán ligeramente en 0.6 por ciento.
El área de la administración pública que sufrirá el mayor recorte en su gasto programable será la Consejería Jurídica de la Presidencia de la República, que recibirá en 2010 el 80 por ciento menos de los recursos que recibió en este 2009.
En seguida se encuentran las tres secretarías de Estado que serán absorbidas por otras dependencias.
La Secretaría de Turismo sufrirá un recorte de 28.4 por ciento; en la Secretaría de la Función Pública el recorte será de 20.3 por ciento y la Secretaría de la Reforma Agraria sufrirá un recorte a su gasto programable de 27.9 por ciento.
La Sagarpa sufrirá un recorte de 18 por ciento; la SCT, de 18.9 por ciento; Secretaría de Economía, 10.7 por ciento; Luz y Fuerza del Centro, 15 por ciento; Secretaría de Gobernación, 14.1 por ciento; Secretaría de Hacienda, 11.3 por ciento; Trabajo y Previsión Social, 12.1 por ciento; Presidencia de la República, 8.3 por ciento.
Algunas dependencias recibirán un incremento en su gasto programable. El ISSSTE será el organismo que mayor aumento reciba, con el 21.5 por ciento, seguido por la Secretaría de Desarrollo Social con el 17.9 por ciento.
Otras dependencias que recibirán incrementos serán el IMSS, con el 2.2 por ciento; Comisión Federal de Electricidad, con el 5.6 por ciento; Pemex con el 5 por ciento y el INEGI con el 9.3 por ciento.
En el documento entregado por el secretario de Hacienda, Agustín Carsterns al Congreso, el presidente Felipe Calderón hace hincapié en la necesidad de impulsar reformas dentro de lo que llama “Agenda para la competitividad”.
Sostiene que en materia laboral es necesario “ajustar el marco jurídico” de modo que genere un mayor dinamismo, impulse una mayor productividad y atienda las necesidades de los grupos más vulnerables.
Destaca también que es necesario impulsar acciones en el sector telecomunicaciones para perseguir el aumento de la inversión y la cobertura, así como los niveles de convergencia tecnológica y de competencia.
El presidente Calderón menciona además que el funcionamiento del sector energía será revisado para incrementar la competitividad del país, garantizar una oferta confiable de insumos y revertir la declinación de la producción petrolera.
Se adoptarán medidas para explorar todo el potencial de la reforma de Pemex y se promoverán medidas que mejoren el gobierno corporativo de las empresas del sector electricidad.
Añade: “Con el fin de promover un mayor nivel de intermediación financiera se desarrollarán nuevos instrumentos como los bonos respaldados en el sector vivienda y se fortalecerá el marco jurídico de las bursatilizaciones”.
El jefe del Ejecutivo advierte: “El crecimiento que ha experimentado la economía mexicana durante los últimos años, aún antes del drástico empeoramiento del entorno internacional, es insuficiente para avanzar aceleradamente hacia la meta de mayores niveles de desarrollo”.
La política de gasto para el próximo año contempla una transformación de la Administración Pública Federal que incluye la desaparición de tres secretarías de Estado, la fusión de la Lotería Nacional y Pronósticos Deportivos en un solo organismo y reducciones al gasto programable en casi todas las dependencias restantes.
Esta transformación de la estructura administrativa permitirá un ahorro de hasta seis mil 500 millones de pesos en el 2010, cantidad que podría ascender hasta ocho mil millones de pesos a partir del 2011, cuando concluya la reestructuración.
Además, se contemplan ahorros hasta por 80 mil millones de pesos a través de medidas de contención y mayor eficiencia como la disminución en los gastos de administración y operación y de servicios personales en dependencias y entidades.
Estas medidas incluyen la reducción del 5 por ciento de las estructuras de mandos superiores, reducción del 5 por ciento del presupuesto asociado a estructuras administrativas de dependencias, órganos desconcentrados y dependencias paraestatales, incluidas oficialías mayores y áreas homólogas, lo que persigue evitar duplicidad de funciones y la optimización de esfuerzos.
Además, reducción del 10 por ciento del gasto asociado a representaciones y oficinas del gobierno federal en el extranjero y reducción del 10 por ciento del gasto en estructuras y administración de las delegaciones, oficinas y representaciones de las dependencias del gobierno federal, órganos desconcentrados y entidades paraestatales en los estados.
Dentro del Gasto Programable del Sector Público 2009-2010 se contempla una disminución del 1.4 por ciento del gasto corriente, al pasar de dos mil 432 millones de pesos en 2009 a dos mil 397.9 millones de pesos en 2010.
El Fondo de Estabilización, que en el 2009 fue de 48 millones de pesos, desaparecerá el próximo año, mientras que las participaciones federales a los estado se incrementarán ligeramente en 0.6 por ciento.
El área de la administración pública que sufrirá el mayor recorte en su gasto programable será la Consejería Jurídica de la Presidencia de la República, que recibirá en 2010 el 80 por ciento menos de los recursos que recibió en este 2009.
En seguida se encuentran las tres secretarías de Estado que serán absorbidas por otras dependencias.
La Secretaría de Turismo sufrirá un recorte de 28.4 por ciento; en la Secretaría de la Función Pública el recorte será de 20.3 por ciento y la Secretaría de la Reforma Agraria sufrirá un recorte a su gasto programable de 27.9 por ciento.
La Sagarpa sufrirá un recorte de 18 por ciento; la SCT, de 18.9 por ciento; Secretaría de Economía, 10.7 por ciento; Luz y Fuerza del Centro, 15 por ciento; Secretaría de Gobernación, 14.1 por ciento; Secretaría de Hacienda, 11.3 por ciento; Trabajo y Previsión Social, 12.1 por ciento; Presidencia de la República, 8.3 por ciento.
Algunas dependencias recibirán un incremento en su gasto programable. El ISSSTE será el organismo que mayor aumento reciba, con el 21.5 por ciento, seguido por la Secretaría de Desarrollo Social con el 17.9 por ciento.
Otras dependencias que recibirán incrementos serán el IMSS, con el 2.2 por ciento; Comisión Federal de Electricidad, con el 5.6 por ciento; Pemex con el 5 por ciento y el INEGI con el 9.3 por ciento.
En el documento entregado por el secretario de Hacienda, Agustín Carsterns al Congreso, el presidente Felipe Calderón hace hincapié en la necesidad de impulsar reformas dentro de lo que llama “Agenda para la competitividad”.
Sostiene que en materia laboral es necesario “ajustar el marco jurídico” de modo que genere un mayor dinamismo, impulse una mayor productividad y atienda las necesidades de los grupos más vulnerables.
Destaca también que es necesario impulsar acciones en el sector telecomunicaciones para perseguir el aumento de la inversión y la cobertura, así como los niveles de convergencia tecnológica y de competencia.
El presidente Calderón menciona además que el funcionamiento del sector energía será revisado para incrementar la competitividad del país, garantizar una oferta confiable de insumos y revertir la declinación de la producción petrolera.
Se adoptarán medidas para explorar todo el potencial de la reforma de Pemex y se promoverán medidas que mejoren el gobierno corporativo de las empresas del sector electricidad.
Añade: “Con el fin de promover un mayor nivel de intermediación financiera se desarrollarán nuevos instrumentos como los bonos respaldados en el sector vivienda y se fortalecerá el marco jurídico de las bursatilizaciones”.
El jefe del Ejecutivo advierte: “El crecimiento que ha experimentado la economía mexicana durante los últimos años, aún antes del drástico empeoramiento del entorno internacional, es insuficiente para avanzar aceleradamente hacia la meta de mayores niveles de desarrollo”.
José Contreras, Crónica, 9 de septiembre.
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