El PRD demandó al gobierno de Cuba hacer todo lo necesario por atender las demandas de los disidentes al régimen que se encuentran en huelga de hambre, como Guillermo Fariñas.
Jesús Ortega aseguró que “no es un problema político, sino incluso debe verse como un problema humano. Aún sean delincuentes, debe de procurarse que nadie pierda la vida en una situación de esa naturaleza”, en referencia a la huelga de hambre del disidente cubano.
“En este momento la salud de los disidentes que iniciaron la huelga de hambre está en peligro, ya uno falleció y por eso es hora de que el gobierno mexicano fije una postura firme al respecto”.
En entrevista, luego de la decisión del Senado mexicano de analizar en comisiones un punto de acuerdo para condenar la situación que priva en materia de derechos humanos en Cuba, a propósito de la huelga de hambre de Fariñas, el líder perredista sostuvo que “no puede hacerse un análisis unilateral y superficial, tiene que verse de manera integral y bajo el mismo planteamiento entonces pedirle al gobierno de Estados Unidos que termine con el bloqueo” a la isla.
En este punto, el perredista sostuvo que en la medida en que el gobierno estadunidense termine con el bloqueo a Cuba, “habrá mejores condiciones para apertura política, pero si desde el gobierno de Estados Unidos se sigue con este bloqueo y se siguen obstaculizando acciones y actos en contra del gobierno de Cuba, porque van a polarizar aún más la situación.
Opinó que la postura que debe mantener el gobierno mexicano debe ser por un lado la atención a la situación imperante con la disidencia cubana, pero también de condena por el bloqueo del gobierno de Estados Unidos.
“El bloqueo debe cesar y en los dos sentidos debe hacerse el planteamiento”, dijo el líder perredista tras reconocer que al seno de la izquierda mexicana, ha sido un tema controvertido.
Calderón, sin autoridad moral
En tanto, el Movimiento Mexicano de Solidaridad con Cuba consideró en un manifiesto que Felipe Calderón, “con su larga trayectoria de espantosas violaciones de derechos humanos”, carece de autoridad moral para erigirse en jueces en el tema de los disidentes Orlando Zapata, recientemente fallecido, y Guillermo Fariñas, quien se encuentra en huelga de hambre en demanda de reformas políticas, y usarlo como pretexto para intervenir en los asuntos internos de la nación caribeña.
“En Cuba se respeta el deseo del individuo de recurrir a vías de protesta como la huelga de hambre. No obstante, el gobierno de Cuba ha manifestado que no aceptará chantajes de ninguna clase”, precisa el documento.
El jueves pasado se divulgó una carta del embajador de Cuba en México, Manuel Aguilera, en donde se advirtió de los posibles daños a la relación bilateral en caso de que el Senado apruebe una condena por la muerte del disidente Orlando Zapata.
En la misiva, fechada el 3 de marzo y dirigida al senador del partido oficialista Acción Nacional, Rubén Camarillo, el diplomático consideró “improcedente” someter a la aprobación de la cámara alta un punto de acuerdo en el que además de condenar la muerte de Zapata se exhorte al Ejecutivo a pedir a Cuba abrirse al diálogo con los disidentes y liberar a los presos de conciencia.
México. Liliana Padilla, Milenio, 21 de marzo.
Jesús Ortega aseguró que “no es un problema político, sino incluso debe verse como un problema humano. Aún sean delincuentes, debe de procurarse que nadie pierda la vida en una situación de esa naturaleza”, en referencia a la huelga de hambre del disidente cubano.
“En este momento la salud de los disidentes que iniciaron la huelga de hambre está en peligro, ya uno falleció y por eso es hora de que el gobierno mexicano fije una postura firme al respecto”.
En entrevista, luego de la decisión del Senado mexicano de analizar en comisiones un punto de acuerdo para condenar la situación que priva en materia de derechos humanos en Cuba, a propósito de la huelga de hambre de Fariñas, el líder perredista sostuvo que “no puede hacerse un análisis unilateral y superficial, tiene que verse de manera integral y bajo el mismo planteamiento entonces pedirle al gobierno de Estados Unidos que termine con el bloqueo” a la isla.
En este punto, el perredista sostuvo que en la medida en que el gobierno estadunidense termine con el bloqueo a Cuba, “habrá mejores condiciones para apertura política, pero si desde el gobierno de Estados Unidos se sigue con este bloqueo y se siguen obstaculizando acciones y actos en contra del gobierno de Cuba, porque van a polarizar aún más la situación.
Opinó que la postura que debe mantener el gobierno mexicano debe ser por un lado la atención a la situación imperante con la disidencia cubana, pero también de condena por el bloqueo del gobierno de Estados Unidos.
“El bloqueo debe cesar y en los dos sentidos debe hacerse el planteamiento”, dijo el líder perredista tras reconocer que al seno de la izquierda mexicana, ha sido un tema controvertido.
Calderón, sin autoridad moral
En tanto, el Movimiento Mexicano de Solidaridad con Cuba consideró en un manifiesto que Felipe Calderón, “con su larga trayectoria de espantosas violaciones de derechos humanos”, carece de autoridad moral para erigirse en jueces en el tema de los disidentes Orlando Zapata, recientemente fallecido, y Guillermo Fariñas, quien se encuentra en huelga de hambre en demanda de reformas políticas, y usarlo como pretexto para intervenir en los asuntos internos de la nación caribeña.
“En Cuba se respeta el deseo del individuo de recurrir a vías de protesta como la huelga de hambre. No obstante, el gobierno de Cuba ha manifestado que no aceptará chantajes de ninguna clase”, precisa el documento.
El jueves pasado se divulgó una carta del embajador de Cuba en México, Manuel Aguilera, en donde se advirtió de los posibles daños a la relación bilateral en caso de que el Senado apruebe una condena por la muerte del disidente Orlando Zapata.
En la misiva, fechada el 3 de marzo y dirigida al senador del partido oficialista Acción Nacional, Rubén Camarillo, el diplomático consideró “improcedente” someter a la aprobación de la cámara alta un punto de acuerdo en el que además de condenar la muerte de Zapata se exhorte al Ejecutivo a pedir a Cuba abrirse al diálogo con los disidentes y liberar a los presos de conciencia.
México. Liliana Padilla, Milenio, 21 de marzo.
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