BOGOTÁ.- Varios equipos utilizados en la interceptación de llamadas realizada por el servicio de inteligencia colombiano a políticos, periodistas y jueces fueron entregados por Estados Unidos y Gran Bretaña al país su- damericano, en apoyo a la lucha contra el narcotráfico.
El Embajador estadounidense en Bogotá, William Browfield, reconoció que su país proporcionó parte de los equipos usados por el Departamento Administrativo de Seguridad (DAS) para realizar escuchas ilegales.
"No tengo ningún problema en admitir eso, tengo orgullo de eso, porque, humildemente, gracias a esa colaboración Estados Unidos y Colombia son países mejores", señaló.
El sábado, la revista Semana denunció que el DAS está fuera de control porque graba ilegalmente a magistrados, periodistas, políticos de Oposición y altos funcionarios de Gobierno y ha filtrado información a narcos, paramilitares y guerrilleros.
El escándalo de escuchas ilegales había cobrado hasta ayer el cargo a tres altos funcionarios del DAS, incluido el subdirector de contrainteligencia del organismo, Jorge Alberto Lagos.
"Es un hecho muy grave, porque en los últimos años todos los directores nombrados por el Presidente han sido incapaces de asegurar el control civil sobre las unidades de inteligencia", aseguró a REFORMA el internacionalista Juan Carlos Flórez.
El experto recordó que el DAS es un órgano de inteligencia adscrito directamente a la presidencia.
Flórez percibe como un peligro y una semilla para el autoritarismo que un organismo de seguridad del Estado se pueda convertir en Policía política.
El experto en seguridad Alfredo Rangel matizó el impacto del escándalo sobre la asistencia externa al recordar que la Presidencia también fue víctima de las escuchas ilegales, que no responderían a una política institucional.
"Mal harían otros Gobiernos en castigarlo por estos hechos. La responsabilidad de esos actos ilícitos es individual y no corresponde a una política institucional", atajó Rangel.
Durante una visita a Washington, el Ministro de Defensa colombiano, Juan Manuel Santos, planteó ayer cerrar el DAS.
"Mi recomendación al Presidente es que haga una cirugía profunda, de pronto el paciente ya está demasiado enfermo, démosle cristiana sepultura y creamos una entidad nueva que ayude más al país", dijo Santos.
El Embajador estadounidense en Bogotá, William Browfield, reconoció que su país proporcionó parte de los equipos usados por el Departamento Administrativo de Seguridad (DAS) para realizar escuchas ilegales.
"No tengo ningún problema en admitir eso, tengo orgullo de eso, porque, humildemente, gracias a esa colaboración Estados Unidos y Colombia son países mejores", señaló.
El sábado, la revista Semana denunció que el DAS está fuera de control porque graba ilegalmente a magistrados, periodistas, políticos de Oposición y altos funcionarios de Gobierno y ha filtrado información a narcos, paramilitares y guerrilleros.
El escándalo de escuchas ilegales había cobrado hasta ayer el cargo a tres altos funcionarios del DAS, incluido el subdirector de contrainteligencia del organismo, Jorge Alberto Lagos.
"Es un hecho muy grave, porque en los últimos años todos los directores nombrados por el Presidente han sido incapaces de asegurar el control civil sobre las unidades de inteligencia", aseguró a REFORMA el internacionalista Juan Carlos Flórez.
El experto recordó que el DAS es un órgano de inteligencia adscrito directamente a la presidencia.
Flórez percibe como un peligro y una semilla para el autoritarismo que un organismo de seguridad del Estado se pueda convertir en Policía política.
El experto en seguridad Alfredo Rangel matizó el impacto del escándalo sobre la asistencia externa al recordar que la Presidencia también fue víctima de las escuchas ilegales, que no responderían a una política institucional.
"Mal harían otros Gobiernos en castigarlo por estos hechos. La responsabilidad de esos actos ilícitos es individual y no corresponde a una política institucional", atajó Rangel.
Durante una visita a Washington, el Ministro de Defensa colombiano, Juan Manuel Santos, planteó ayer cerrar el DAS.
"Mi recomendación al Presidente es que haga una cirugía profunda, de pronto el paciente ya está demasiado enfermo, démosle cristiana sepultura y creamos una entidad nueva que ayude más al país", dijo Santos.
Octavio Pineda corresponsal, Reforma, 25 de febrero.
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