El país perderá 500 mil empleos formales en el primer semestre de este año como consecuencia de la crisis económica, aseguró Mónica Flores Barragán, directora general de Manpower para México, Centroamérica y República Dominicana.
“La expectativas menos optimistas desde 2002, se han visto en los primeros dos primeros trimestres de este año”, afirmó.
Durante la presentación de la Encuesta de Expectativas del Empleo Manpower, la directiva comentó que la tendencia neta del empleo en México es de -5 por ciento, lo que significa una disminución de 6 puntos porcentuales en comparación con el trimestre anterior y una reducción anual de 26 puntos.
En febrero de este año, la UNAM pronosticó que durante todo 2009 se registraría una pérdida de 325 mil empleos.
Según el sondeo, los empleadores de los siete sectores reportan expectativas de contracción negativas para el segundo trimestre del año; en minería y extracción estarán las más pesimistas con -10 por ciento.
Los rubros de la construcción, manufactura, servicios, comunicaciones y transportes obtendrán una tendencia de -8 por ciento, mientras Comercio de -4 por ciento.
Uno de los sectores con mayor oportunidad, dijo, es el de agricultura y pesca, el cual espera sólo un descenso de sólo 3 por ciento.
Flores Barragán aseguró que el repunte en la generación de empleos se verá hasta finales de 2010 y principios de 2011.
Explicó que sólo 13 por ciento de las empresas espera hacer contrataciones en el segundo trimestre (abril y junio), mientras que 19 por ciento despedirá personal y 69 por ciento no modificará su plantilla laboral.
La directiva agregó que el segmento de la población más afectado será el de los jóvenes, con una tasa de desempleo de 7.8 por ciento.
Detalló que la principal causa es la poca disposición a ajustes salariales y la falta de experiencia.
“Los que sufrirán por conseguir empleo serán los egresados de escuelas de derecho, comunicación, psicología, administración y contabilidad”, dijo.
La encuesta de Manpower detalla que los empleadores de la zona noroeste del país, que incluye Baja California, Baja California Sur, Sinaloa y Sonora, presentan la expectativa negativa más alta, con -12 por ciento.
Le siguen la zona occidente, con -8 por ciento; las regiones Centro y Noreste, con -7 por ciento; la parte Norte del país, con -6 por ciento, y Valle, con -4 por ciento.
La parte más optimista será la Sureste, que abarca Campeche, Chiapas, Guerrero, Oaxaca, Quintana Roo, Tabasco, Yucatán y Sur de Veracruz.
“La pérdida de empleo se verá en todos los niveles, obviamente por el volumen el personal operativo en la industria maquiladora será el más afectado”, destacó.
Alertan sobre paros técnicos
Sobre los paros técnicos como alternativa para mantener el empleo, Mónica Flores Barragán comentó que aplicar esta figura es mucho mejor que perder puestos de trabajo.
De acuerdo con la directiva, México habría perdido 60 mil puesto de trabajo en el sector manufacturero de no haberse aplicado la propuesta anticíclica del gobierno federal.
“Los paros técnicos han existido desde siempre, lo importante es que se hagan de común acuerdo con el empleador y, en su caso, con las organizaciones sindicales”, detalló.
En ese sentido Jorge Sales, socio fundador del Bufete Sales Boyoli, dijo que la figura de los paros técnicos es cuestionable desde la perspectiva legal, pues se trata de algunas medidas “que desde el punto de vista de justicia y supervivencia económica pueden funcionar, pero la legalidad es cuestionable”,
Reconoció que los paros no serán impugnables pues el trabajador prefiere mantener su empleo, pero alertó que habrá patrones que pondrán como pretexto la crisis económica para abusar de los recursos legales que hay para despedir trabajadores o incluso haya quienes se valgan de simulaciones jurídicas.
Por ello, señaló que en estos momentos de incertidumbre es primordial para el empresario buscar negociaciones con los trabajadores para los pagos parciales de la liquidación, convenios judiciales ante las autoridades laborales.
Además resaltó que es importante evaluar el costo-beneficio de una terminación laboral, “en ocasiones es más costoso despedir, recontratar y capacitar al personal que el pago de las mismas liquidaciones”.
Ante estas circunstancias, Sales Boyoli indicó que es importante acogerse a beneficios a través de acuerdos colectivos para modificar jornadas de trabajo o reducir salarios, “debe haber conciliaciones en ambas partes y evitar litigios largos y costosos”.
“La expectativas menos optimistas desde 2002, se han visto en los primeros dos primeros trimestres de este año”, afirmó.
Durante la presentación de la Encuesta de Expectativas del Empleo Manpower, la directiva comentó que la tendencia neta del empleo en México es de -5 por ciento, lo que significa una disminución de 6 puntos porcentuales en comparación con el trimestre anterior y una reducción anual de 26 puntos.
En febrero de este año, la UNAM pronosticó que durante todo 2009 se registraría una pérdida de 325 mil empleos.
Según el sondeo, los empleadores de los siete sectores reportan expectativas de contracción negativas para el segundo trimestre del año; en minería y extracción estarán las más pesimistas con -10 por ciento.
Los rubros de la construcción, manufactura, servicios, comunicaciones y transportes obtendrán una tendencia de -8 por ciento, mientras Comercio de -4 por ciento.
Uno de los sectores con mayor oportunidad, dijo, es el de agricultura y pesca, el cual espera sólo un descenso de sólo 3 por ciento.
Flores Barragán aseguró que el repunte en la generación de empleos se verá hasta finales de 2010 y principios de 2011.
Explicó que sólo 13 por ciento de las empresas espera hacer contrataciones en el segundo trimestre (abril y junio), mientras que 19 por ciento despedirá personal y 69 por ciento no modificará su plantilla laboral.
La directiva agregó que el segmento de la población más afectado será el de los jóvenes, con una tasa de desempleo de 7.8 por ciento.
Detalló que la principal causa es la poca disposición a ajustes salariales y la falta de experiencia.
“Los que sufrirán por conseguir empleo serán los egresados de escuelas de derecho, comunicación, psicología, administración y contabilidad”, dijo.
La encuesta de Manpower detalla que los empleadores de la zona noroeste del país, que incluye Baja California, Baja California Sur, Sinaloa y Sonora, presentan la expectativa negativa más alta, con -12 por ciento.
Le siguen la zona occidente, con -8 por ciento; las regiones Centro y Noreste, con -7 por ciento; la parte Norte del país, con -6 por ciento, y Valle, con -4 por ciento.
La parte más optimista será la Sureste, que abarca Campeche, Chiapas, Guerrero, Oaxaca, Quintana Roo, Tabasco, Yucatán y Sur de Veracruz.
“La pérdida de empleo se verá en todos los niveles, obviamente por el volumen el personal operativo en la industria maquiladora será el más afectado”, destacó.
Alertan sobre paros técnicos
Sobre los paros técnicos como alternativa para mantener el empleo, Mónica Flores Barragán comentó que aplicar esta figura es mucho mejor que perder puestos de trabajo.
De acuerdo con la directiva, México habría perdido 60 mil puesto de trabajo en el sector manufacturero de no haberse aplicado la propuesta anticíclica del gobierno federal.
“Los paros técnicos han existido desde siempre, lo importante es que se hagan de común acuerdo con el empleador y, en su caso, con las organizaciones sindicales”, detalló.
En ese sentido Jorge Sales, socio fundador del Bufete Sales Boyoli, dijo que la figura de los paros técnicos es cuestionable desde la perspectiva legal, pues se trata de algunas medidas “que desde el punto de vista de justicia y supervivencia económica pueden funcionar, pero la legalidad es cuestionable”,
Reconoció que los paros no serán impugnables pues el trabajador prefiere mantener su empleo, pero alertó que habrá patrones que pondrán como pretexto la crisis económica para abusar de los recursos legales que hay para despedir trabajadores o incluso haya quienes se valgan de simulaciones jurídicas.
Por ello, señaló que en estos momentos de incertidumbre es primordial para el empresario buscar negociaciones con los trabajadores para los pagos parciales de la liquidación, convenios judiciales ante las autoridades laborales.
Además resaltó que es importante evaluar el costo-beneficio de una terminación laboral, “en ocasiones es más costoso despedir, recontratar y capacitar al personal que el pago de las mismas liquidaciones”.
Ante estas circunstancias, Sales Boyoli indicó que es importante acogerse a beneficios a través de acuerdos colectivos para modificar jornadas de trabajo o reducir salarios, “debe haber conciliaciones en ambas partes y evitar litigios largos y costosos”.
Oscar Granados y Alberto Verdusco, Milenio, 11 de marzo.
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