El PRD tiene listo su proyecto de reforma energética, con un paquete de 10 iniciativas que, entre otros puntos, plantea la reunificación de Pemex en una sola empresa y la eliminación del superávit primario que despoja a la paraestatal de 10 por ciento de sus ingresos, así como la modificación de las fórmulas para calcular el precio del crudo y distribuir los excedentes petroleros.
La propuesta establece también la reducción de cinco a sólo dos representantes del sindicato petrolero en el consejo de administración de Pemex, además de mantener seis consejeros del Ejecutivo Federal e incorporar a cuatro especialistas propuestos por el Presidente de la República, pero que serían ratificados por el Congreso de la Unión. Prevé también el reconocimiento de la autonomía presupuestaria a la empresa petrolera, para que ésta pueda proponer su proyecto anual de gasto, así como la desaparición del Fondo de Estabilización Petrolera, para reorientar más recursos hacia la inversión en infraestructura.
Dicho proyecto se discutirá el fin de semana en la reunión plenaria de los diputados perredistas y en el Consejo Nacional del PRD, con la intención de consensuarlo con todas las corrientes internas.
El legislador David Mendoza puntualizó, sin embargo, que su bancada acatará las decisiones mayoritarias de los órganos directivos del partido, donde la corriente Nueva Izquierda mantiene la hegemonía.
“Nos tenemos qué ceñir a las mayorías y si la mayoría del grupo parlamentario decide el fin de semana que sí vamos a presentar la iniciativa, que sí vamos a entrar a la dictaminación y a la negociación, eso es lo que el grupo parlamentario tendrá qué hacer, pero si alguien no lo hace, será a título personal”, dijo, en respuesta a la advertencia de la corriente Izquierda Unida sobre una división del partido.
El documento que los diputados federales y el Consejo Nacional del PRD votarán el fin de semana considera una nueva Ley Orgánica de Pemex, así como reformas y adiciones a las leyes Federal de Presupuesto, de Derechos, de Planeación, Orgánica de la Administración Pública, de Adquisiciones, de Obras Públicas y Reglamentaria del Artículo 27 Constitucional.
Según el diputado Mendoza, “esta no es una propuesta privatizadora, no es una propuesta que pretenda privatizar los recursos del petróleo, y por ello no creemos que haya alguien que se oponga a esto desde la izquierda”.
El proyecto sería presentado la semana entrante ante la Comisión Permanente del Congreso de la Unión, si los órganos de dirección perredistas confirman su aval, agregó el legislador de Nueva Izquierda.
La propuesta establece también la reducción de cinco a sólo dos representantes del sindicato petrolero en el consejo de administración de Pemex, además de mantener seis consejeros del Ejecutivo Federal e incorporar a cuatro especialistas propuestos por el Presidente de la República, pero que serían ratificados por el Congreso de la Unión. Prevé también el reconocimiento de la autonomía presupuestaria a la empresa petrolera, para que ésta pueda proponer su proyecto anual de gasto, así como la desaparición del Fondo de Estabilización Petrolera, para reorientar más recursos hacia la inversión en infraestructura.
Dicho proyecto se discutirá el fin de semana en la reunión plenaria de los diputados perredistas y en el Consejo Nacional del PRD, con la intención de consensuarlo con todas las corrientes internas.
El legislador David Mendoza puntualizó, sin embargo, que su bancada acatará las decisiones mayoritarias de los órganos directivos del partido, donde la corriente Nueva Izquierda mantiene la hegemonía.
“Nos tenemos qué ceñir a las mayorías y si la mayoría del grupo parlamentario decide el fin de semana que sí vamos a presentar la iniciativa, que sí vamos a entrar a la dictaminación y a la negociación, eso es lo que el grupo parlamentario tendrá qué hacer, pero si alguien no lo hace, será a título personal”, dijo, en respuesta a la advertencia de la corriente Izquierda Unida sobre una división del partido.
El documento que los diputados federales y el Consejo Nacional del PRD votarán el fin de semana considera una nueva Ley Orgánica de Pemex, así como reformas y adiciones a las leyes Federal de Presupuesto, de Derechos, de Planeación, Orgánica de la Administración Pública, de Adquisiciones, de Obras Públicas y Reglamentaria del Artículo 27 Constitucional.
Según el diputado Mendoza, “esta no es una propuesta privatizadora, no es una propuesta que pretenda privatizar los recursos del petróleo, y por ello no creemos que haya alguien que se oponga a esto desde la izquierda”.
El proyecto sería presentado la semana entrante ante la Comisión Permanente del Congreso de la Unión, si los órganos de dirección perredistas confirman su aval, agregó el legislador de Nueva Izquierda.
Fernando Damián, Milenio, 12 de agosto.
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