El gobierno del presidente Barack Obama anunció ayer un plan para aumentar el control en la frontera con México que incluye el envío de más agentes federales a esa zona con el objetivo de reforzar la vigilancia.
El plan lo divulgó en la Casa Blanca la secretaria de Seguridad Nacional, Janet Napolitano, en vísperas del viaje que realizará (a partir de hoy) a México la jefa de la diplomacia de EU, Hillary Clinton.
"Al presidente le preocupa el incremento de la violencia, particularmente en Ciudad Juárez y Tijuana, y el impacto que tiene sobre las comunidades a ambos lados de la frontera", señaló la Casa Blanca.
El plan apunta a "interceptar con más eficacia los flujos ilegales de armas y de dinero hacia México, y garantizar que la protección de nuestra frontera resista el flujo de drogas y violencia hacia Estados Unidos".
La descripción de las actividades que llevarán a cabo diferentes agencias del gobierno de Estados Unidos no menciona un aumento del uso de fuerzas militares y señala escuetamente que el Pentágono colaborará con las fuerzas armadas de México "para aumentar el intercambio de información, la interoperabilidad, la instrucción y el equipamiento de las unidades contra narcóticos".
La ex gobernadora de Arizona señaló que el plan persigue apoyar al gobierno de México en su lucha contra el narcotráfico y confió en que la administración de Feñipe Calderón no fracasará en este esfuerzo. "Creo que nuestro papel es ayudar en esta batalla porque de su éxito dependen nuestros intereses de seguridad", dijo en rueda de prensa.
Insistió en que el plan tiene el doble objetivo de ayudar a México a desmantelar a los cárteles de la droga y evitar "un incremento de la violencia en EU", tomando en cuenta que ciudades como Phoenix y Houston han visto un aumento en los secuestros.
Estados Unidos está dispuesto a compartir datos de inteligencia con México, pero, debido a la corrupción, "queremos asegurarnos de que no caen en manos de los cárteles" de la droga, expresó.
Por ello, apuntó, la Iniciativa Mérida incluye un proceso de revisión de antecedentes de los agentes policiales en México.
Sobre la posible militarización de la frontera, Napolitano comentó que el jueves se reunirá con el gobernador de Texas, Rick Perry, para analizar la cantidad, el lugar y las tareas que tendrían los miembros de la Guardia Nacional en la vigilancia de esa zona.
Pero la decisión de enviar a la Guardia Nacional a la frontera con México dependerá de las consultas posteriores con el Pentágono y la Casa Blanca, precisó Napolitano.
Interrogada sobre la construcción del muro en la frontera, dijo que continuarán los tramos ya iniciados, pero reconoció que esa "no es la mejor forma de gastar nuestros dólares para evitar que entren las drogas a EU" o para arrestar y procesar a los contrabandistas.
Conforme al programa anunciado, el Departamento de Seguridad Nacional desarrolla un plan que incluye el aumento al doble de los Equipos de Tarea de protección fronteriza que, según explicó el comunicado, incorporan agentes policiales y de inteligencia de ambos países.
Este departamento aumentará al triple el número de analistas de inteligencia en la frontera, incrementará al doble los equipos de represión de criminales extranjeros y multiplicará por cuatro el número de oficinas de enlace que colaboran con las agencias policiales mexicanas.
Principales medidas del programa estadunidense
- Reforzamiento de vigilancia fronteriza
- Duplica de 95 a 190 los llamados Equipos de Reforzamiento de la Seguridad Fronteriza (BEST, en inglés), que incorpora agentes locales, estatales, federales y de inteligencia de ambos países. Esta medida tiene un costo de 5.7 millones de dólares.
- Triplica el número de agentes de inteligencia en el lado suroeste de la frontera, a un costo de 3.3 millones de dólares.
- Incrementa en 50 por ciento, de 24 a 36, el número de agentes de la Oficina de Inmigración y Aduanas (ICE) en México, en particular en Ciudad Juárez y Hermosillo, a un costo de 650 mil dólares.
- Inspección del 100 por ciento de los cargamentos ferroviarios con destino a México con equipos "no intrusivos" de alta tecnología.
- Fortalece el uso de alta tecnología en los puertos de entrada, incluyendo unidades móviles de rayos X. También prevé la instalación de equipos para la lectura de placas de automóviles en 52 de los 100 carriles de salida, por un costo de 13 millones de dólares.
- Envío de otros 100 agentes de la Patrulla Fronteriza al lado suroeste de la frontera y de 12 nuevos equipos caninos para detectar armas y cargamentos de dinero en efectivo.
- Envío de un centenar de agentes de la Oficina para el Control del Alcohol, Tabaco y Armas de Fuego (ATF) al suroeste de EU en los próximos 45 días, así como de otros 17 de la Agencia Antidrogas estadunidense (DEA) en la zona.
- La creación de otros cuatro Equipos de Reforzamiento Móvil (METs, por sus siglas en inglés) para combatir el tráfico de metanfetaminas tanto en la frontera como en el interior de Estados Unidos.
- La creación del Grupo de Inteligencia para el Suroeste (SWIG, por sus siglas en inglés), un centro de información sobre todas las actividades de la Oficina Federal de Investigaciones (FBI) que involucran a México.
- La continuidad de "Armas Cruzadas", un esfuerzo bilateral para combatir el contrabando de armas de alta potencia de EU a México.
-Combate a la financiación
- "Operación Firewall", un esfuerzo del Departamento de Seguridad Nacional contra las bandas involucradas en el contrabando de grandes sumas de dinero en efectivo.
- Reforzamiento de las actividades del Departamento del Tesoro de EU para combatir el lavado de dinero y ayudar a México con los análisis e investigaciones financieras.
- Combate al consumo
- El gobierno ha comprometido cerca de cinco mil millones de dólares para iniciativas contra el uso de estupefacientes en EU.
- Un mayor respaldo a los programas de prevención y tratamiento de la drogadicción.
- El desembolso de 63.9 millones de dólares, dentro del año fiscal en curso, para reforzar los servicios sociales para los drogadictos.
El plan lo divulgó en la Casa Blanca la secretaria de Seguridad Nacional, Janet Napolitano, en vísperas del viaje que realizará (a partir de hoy) a México la jefa de la diplomacia de EU, Hillary Clinton.
"Al presidente le preocupa el incremento de la violencia, particularmente en Ciudad Juárez y Tijuana, y el impacto que tiene sobre las comunidades a ambos lados de la frontera", señaló la Casa Blanca.
El plan apunta a "interceptar con más eficacia los flujos ilegales de armas y de dinero hacia México, y garantizar que la protección de nuestra frontera resista el flujo de drogas y violencia hacia Estados Unidos".
La descripción de las actividades que llevarán a cabo diferentes agencias del gobierno de Estados Unidos no menciona un aumento del uso de fuerzas militares y señala escuetamente que el Pentágono colaborará con las fuerzas armadas de México "para aumentar el intercambio de información, la interoperabilidad, la instrucción y el equipamiento de las unidades contra narcóticos".
La ex gobernadora de Arizona señaló que el plan persigue apoyar al gobierno de México en su lucha contra el narcotráfico y confió en que la administración de Feñipe Calderón no fracasará en este esfuerzo. "Creo que nuestro papel es ayudar en esta batalla porque de su éxito dependen nuestros intereses de seguridad", dijo en rueda de prensa.
Insistió en que el plan tiene el doble objetivo de ayudar a México a desmantelar a los cárteles de la droga y evitar "un incremento de la violencia en EU", tomando en cuenta que ciudades como Phoenix y Houston han visto un aumento en los secuestros.
Estados Unidos está dispuesto a compartir datos de inteligencia con México, pero, debido a la corrupción, "queremos asegurarnos de que no caen en manos de los cárteles" de la droga, expresó.
Por ello, apuntó, la Iniciativa Mérida incluye un proceso de revisión de antecedentes de los agentes policiales en México.
Sobre la posible militarización de la frontera, Napolitano comentó que el jueves se reunirá con el gobernador de Texas, Rick Perry, para analizar la cantidad, el lugar y las tareas que tendrían los miembros de la Guardia Nacional en la vigilancia de esa zona.
Pero la decisión de enviar a la Guardia Nacional a la frontera con México dependerá de las consultas posteriores con el Pentágono y la Casa Blanca, precisó Napolitano.
Interrogada sobre la construcción del muro en la frontera, dijo que continuarán los tramos ya iniciados, pero reconoció que esa "no es la mejor forma de gastar nuestros dólares para evitar que entren las drogas a EU" o para arrestar y procesar a los contrabandistas.
Conforme al programa anunciado, el Departamento de Seguridad Nacional desarrolla un plan que incluye el aumento al doble de los Equipos de Tarea de protección fronteriza que, según explicó el comunicado, incorporan agentes policiales y de inteligencia de ambos países.
Este departamento aumentará al triple el número de analistas de inteligencia en la frontera, incrementará al doble los equipos de represión de criminales extranjeros y multiplicará por cuatro el número de oficinas de enlace que colaboran con las agencias policiales mexicanas.
Principales medidas del programa estadunidense
- Reforzamiento de vigilancia fronteriza
- Duplica de 95 a 190 los llamados Equipos de Reforzamiento de la Seguridad Fronteriza (BEST, en inglés), que incorpora agentes locales, estatales, federales y de inteligencia de ambos países. Esta medida tiene un costo de 5.7 millones de dólares.
- Triplica el número de agentes de inteligencia en el lado suroeste de la frontera, a un costo de 3.3 millones de dólares.
- Incrementa en 50 por ciento, de 24 a 36, el número de agentes de la Oficina de Inmigración y Aduanas (ICE) en México, en particular en Ciudad Juárez y Hermosillo, a un costo de 650 mil dólares.
- Inspección del 100 por ciento de los cargamentos ferroviarios con destino a México con equipos "no intrusivos" de alta tecnología.
- Fortalece el uso de alta tecnología en los puertos de entrada, incluyendo unidades móviles de rayos X. También prevé la instalación de equipos para la lectura de placas de automóviles en 52 de los 100 carriles de salida, por un costo de 13 millones de dólares.
- Envío de otros 100 agentes de la Patrulla Fronteriza al lado suroeste de la frontera y de 12 nuevos equipos caninos para detectar armas y cargamentos de dinero en efectivo.
- Envío de un centenar de agentes de la Oficina para el Control del Alcohol, Tabaco y Armas de Fuego (ATF) al suroeste de EU en los próximos 45 días, así como de otros 17 de la Agencia Antidrogas estadunidense (DEA) en la zona.
- La creación de otros cuatro Equipos de Reforzamiento Móvil (METs, por sus siglas en inglés) para combatir el tráfico de metanfetaminas tanto en la frontera como en el interior de Estados Unidos.
- La creación del Grupo de Inteligencia para el Suroeste (SWIG, por sus siglas en inglés), un centro de información sobre todas las actividades de la Oficina Federal de Investigaciones (FBI) que involucran a México.
- La continuidad de "Armas Cruzadas", un esfuerzo bilateral para combatir el contrabando de armas de alta potencia de EU a México.
-Combate a la financiación
- "Operación Firewall", un esfuerzo del Departamento de Seguridad Nacional contra las bandas involucradas en el contrabando de grandes sumas de dinero en efectivo.
- Reforzamiento de las actividades del Departamento del Tesoro de EU para combatir el lavado de dinero y ayudar a México con los análisis e investigaciones financieras.
- Combate al consumo
- El gobierno ha comprometido cerca de cinco mil millones de dólares para iniciativas contra el uso de estupefacientes en EU.
- Un mayor respaldo a los programas de prevención y tratamiento de la drogadicción.
- El desembolso de 63.9 millones de dólares, dentro del año fiscal en curso, para reforzar los servicios sociales para los drogadictos.
EFE en Washington, Crónica, 25 de marzo.
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