Barack Obama realizará una vista oficial a México los días 16 y 17 de abril, confirmaron tanto en la Casa Blanca como en Los Pinos. El presidente estadunidense incluirá entre los temas a tratar con su homólogo mexicano, Felipe Calderón, el de una reforma migratoria, que el político demócrata ofreció concretar “este año”.
En la Ciudad de México, el vocero de la Presidencia, Maximiliano Cortázar, informó que los temas que Obama abordará con Calderón serán competitividad, seguridad, medio ambiente, migración y bienestar social.
El encuentro entre ambos mandatarios, añadió Cortázar, dará continuidad al diálogo que iniciaron en Washington el pasado 12 de enero, cuando Obama aún era presidente electo. Entonces se acordó “impulsar una asociación estratégica” entre México y Estados Unidos, recordó el vocero presidencial.
En Washington se anunció mediante un comunicado la visita de mediados de abril, y se especificó que ambos presidentes tratarán en detalle las “profundas” relaciones bilaterales.
En concreto, indicó la Casa Blanca, se abordará la colaboración en la lucha contra la violencia procedente del narcotráfico y los pasos hacia una reforma migratoria “exhaustiva y efectiva”.
Más tarde, en una reunión con congresistas hispanos, Obama prometió invertir “capital político” en una reforma migratoria, a fin de que ésta se concrete “este año”.
Luego, en un encuentro comunitario en California, el mandatario estadunidense recordó que Estados Unidos es una nación de inmigrantes, pero también subrayó que el país debe tener control sobre sus fronteras.
Añadió que se quiere trabajar con los dirigentes del Congreso y con el gobierno de México para presentar un plan amplio que permita a los inmigrantes que llegaron sin documentos tener vías para adquirir la ciudadanía, a cambio de que paguen una multa y aprendan inglés.
Júbilo de legisladores hispanos
Los representantes hispanos reaccionaron con júbilo ante el anuncio. Luis Gutiérrez, legislador demócrata por Illinois, expuso: “El presidente repitió y reiteró su compromiso de manera clara e inequívoca (de presentar una propuesta de reforma migratoria); tiene toda la intención de hacerlo”.
“El presidente nos señaló que es un hombre de palabra. Creemos que vamos a avanzar este año (en un plan a favor de los indocumentados)”, secundó Nydia Velázquez, representante por Nueva York y jefa del Caucus Hispánico del Congreso, que agrupa a los legisladores de la primera minoría del país.
Obama convocará a un foro público “probablemente en dos meses” para discutir las propuestas sobre cómo legalizar a los indocumentados y cómo refundar el sistema de inmigración, declaró el senador demócrata Bob Menéndez, de Nueva Jersey.
La visita a México del mandatario estadunidense ocurrirá antes de viajar a la quinta Cumbre de las Américas, que se celebrará en Trinidad y Tobago los días 17 y 19 de abril, a la cual asistirá también Calderón.
El encuentro entre los presidentes será el segundo en lo que va del año, pues ya se vieron el 12 de enero en Washington, días antes de que el demócrata asumiera la presidencia.
La visita de Obama a México tendrá lugar después de la de su secretaria de Estado, Hillary Clinton, que viajará a este país entre el 25 y el 26 de marzo.
Las relaciones entre los dos países atraviesan un momento delicado por las fricciones comerciales y por la cooperación bilateral para atajar la violencia del narcotráfico.
- Claves
Antecedentes
• Dos proyectos de reformas migratorias fracasaron en el Congreso de Estados Unidos, en 2006 y 2007, país donde viven unos 12 millones de indocumentados, la mayor parte de ellos (unos ocho millones) mexicanos, pese al cabildeo de George W. Bush, Vicente Fox y Felipe Calderón.
• Como senador, Barack Obama votó en 2007 en favor de la reforma migratoria. Luego convirtió ese tema en uno de sus principales puntos de atracción para la comunidad hispana, cuyo voto (66 por ciento de 10 millones de electores) fue decisivo en noviembre pasado.
• Durante su campaña ofreció plantear el tema en sus 100 primeros días de gobierno, lo cual cumple en el límite del plazo.
Más agentes y recursos de EU para la frontera
••• El gobierno de Estados Unidos se alista para enviar agentes federales a su zona suroeste, fronteriza con México, para que apoyen en la lucha contra los cárteles mexicanos de las drogas, en tanto las autoridades analizan tomar fondos de un programa de aplicación de las leyes de inmigración para usarlos también en el combate contra el narcotráfico.
El despliegue de agentes forma parte de las primeras decisiones del presidente Barack Obama por elevar las medidas federales de seguridad en el lado estadunidense de la frontera común.
En paralelo, las autoridades de inmigración están analizando la posibilidad de pedir al Congreso su aprobación para destinar decenas de millones de dólares, pensados originalmente para aplicar las leyes de inmigración en lugares de trabajo, a los esfuerzos antidrogas a lo largo de la frontera suroeste, según una persona familiarizada con las negociaciones que habló bajo condición de no ser identificada porque las autoridades no han hecho la solicitud todavía al Congreso.
Tal demanda podría toparse con una resistencia dura de los legisladores, que prefieren que ese dinero se gaste en investigar a aquellos patrones que contratan a sabiendas inmigrantes indocumentados.
El vocero del Departamento de Seguridad Interna, Sean Smith, negó que se planee hacer tal solicitud y agregó que nunca fue puesta bajo consideración.
Un funcionario, que habló a condición de mantenerse en el anonimato, dijo que autoridades del Departamento de Seguridad Interna han estado analizando desde la semana pasada distintas maneras de responder a la creciente violencia a lo largo de la frontera con México. La idea de cambiar el dinero, de la aplicación de las leyes de inmigración en sitios de trabajo a la lucha antidrogas, salió de esas conversaciones.
Otro funcionario familiarizado con los planes dijo que el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas estará enviando a más de 90 agentes a la zona fronteriza. La autoridad pidió el anonimato porque el plan no se ha anunciado todavía.
Separadamente, la Oficina Federal de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos está contratando a 37 agentes que se dediquen a la lucha contra el tráfico de armas que operan a lo largo de la frontera. (Washington • AP)
En la Ciudad de México, el vocero de la Presidencia, Maximiliano Cortázar, informó que los temas que Obama abordará con Calderón serán competitividad, seguridad, medio ambiente, migración y bienestar social.
El encuentro entre ambos mandatarios, añadió Cortázar, dará continuidad al diálogo que iniciaron en Washington el pasado 12 de enero, cuando Obama aún era presidente electo. Entonces se acordó “impulsar una asociación estratégica” entre México y Estados Unidos, recordó el vocero presidencial.
En Washington se anunció mediante un comunicado la visita de mediados de abril, y se especificó que ambos presidentes tratarán en detalle las “profundas” relaciones bilaterales.
En concreto, indicó la Casa Blanca, se abordará la colaboración en la lucha contra la violencia procedente del narcotráfico y los pasos hacia una reforma migratoria “exhaustiva y efectiva”.
Más tarde, en una reunión con congresistas hispanos, Obama prometió invertir “capital político” en una reforma migratoria, a fin de que ésta se concrete “este año”.
Luego, en un encuentro comunitario en California, el mandatario estadunidense recordó que Estados Unidos es una nación de inmigrantes, pero también subrayó que el país debe tener control sobre sus fronteras.
Añadió que se quiere trabajar con los dirigentes del Congreso y con el gobierno de México para presentar un plan amplio que permita a los inmigrantes que llegaron sin documentos tener vías para adquirir la ciudadanía, a cambio de que paguen una multa y aprendan inglés.
Júbilo de legisladores hispanos
Los representantes hispanos reaccionaron con júbilo ante el anuncio. Luis Gutiérrez, legislador demócrata por Illinois, expuso: “El presidente repitió y reiteró su compromiso de manera clara e inequívoca (de presentar una propuesta de reforma migratoria); tiene toda la intención de hacerlo”.
“El presidente nos señaló que es un hombre de palabra. Creemos que vamos a avanzar este año (en un plan a favor de los indocumentados)”, secundó Nydia Velázquez, representante por Nueva York y jefa del Caucus Hispánico del Congreso, que agrupa a los legisladores de la primera minoría del país.
Obama convocará a un foro público “probablemente en dos meses” para discutir las propuestas sobre cómo legalizar a los indocumentados y cómo refundar el sistema de inmigración, declaró el senador demócrata Bob Menéndez, de Nueva Jersey.
La visita a México del mandatario estadunidense ocurrirá antes de viajar a la quinta Cumbre de las Américas, que se celebrará en Trinidad y Tobago los días 17 y 19 de abril, a la cual asistirá también Calderón.
El encuentro entre los presidentes será el segundo en lo que va del año, pues ya se vieron el 12 de enero en Washington, días antes de que el demócrata asumiera la presidencia.
La visita de Obama a México tendrá lugar después de la de su secretaria de Estado, Hillary Clinton, que viajará a este país entre el 25 y el 26 de marzo.
Las relaciones entre los dos países atraviesan un momento delicado por las fricciones comerciales y por la cooperación bilateral para atajar la violencia del narcotráfico.
- Claves
Antecedentes
• Dos proyectos de reformas migratorias fracasaron en el Congreso de Estados Unidos, en 2006 y 2007, país donde viven unos 12 millones de indocumentados, la mayor parte de ellos (unos ocho millones) mexicanos, pese al cabildeo de George W. Bush, Vicente Fox y Felipe Calderón.
• Como senador, Barack Obama votó en 2007 en favor de la reforma migratoria. Luego convirtió ese tema en uno de sus principales puntos de atracción para la comunidad hispana, cuyo voto (66 por ciento de 10 millones de electores) fue decisivo en noviembre pasado.
• Durante su campaña ofreció plantear el tema en sus 100 primeros días de gobierno, lo cual cumple en el límite del plazo.
Más agentes y recursos de EU para la frontera
••• El gobierno de Estados Unidos se alista para enviar agentes federales a su zona suroeste, fronteriza con México, para que apoyen en la lucha contra los cárteles mexicanos de las drogas, en tanto las autoridades analizan tomar fondos de un programa de aplicación de las leyes de inmigración para usarlos también en el combate contra el narcotráfico.
El despliegue de agentes forma parte de las primeras decisiones del presidente Barack Obama por elevar las medidas federales de seguridad en el lado estadunidense de la frontera común.
En paralelo, las autoridades de inmigración están analizando la posibilidad de pedir al Congreso su aprobación para destinar decenas de millones de dólares, pensados originalmente para aplicar las leyes de inmigración en lugares de trabajo, a los esfuerzos antidrogas a lo largo de la frontera suroeste, según una persona familiarizada con las negociaciones que habló bajo condición de no ser identificada porque las autoridades no han hecho la solicitud todavía al Congreso.
Tal demanda podría toparse con una resistencia dura de los legisladores, que prefieren que ese dinero se gaste en investigar a aquellos patrones que contratan a sabiendas inmigrantes indocumentados.
El vocero del Departamento de Seguridad Interna, Sean Smith, negó que se planee hacer tal solicitud y agregó que nunca fue puesta bajo consideración.
Un funcionario, que habló a condición de mantenerse en el anonimato, dijo que autoridades del Departamento de Seguridad Interna han estado analizando desde la semana pasada distintas maneras de responder a la creciente violencia a lo largo de la frontera con México. La idea de cambiar el dinero, de la aplicación de las leyes de inmigración en sitios de trabajo a la lucha antidrogas, salió de esas conversaciones.
Otro funcionario familiarizado con los planes dijo que el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas estará enviando a más de 90 agentes a la zona fronteriza. La autoridad pidió el anonimato porque el plan no se ha anunciado todavía.
Separadamente, la Oficina Federal de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos está contratando a 37 agentes que se dediquen a la lucha contra el tráfico de armas que operan a lo largo de la frontera. (Washington • AP)
Lorena López y corresponsales, Milenio, 19 de marzo.
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