Los diarios cubanos silenciaron el miércoles la aprobación por el Congreso de Washington de un proyecto de ley que podría beneficiar a más de millón y medio de isleños, según cálculos conservadores, mientras un influyente periódico de Miami aseguró que el presidente Barack Obama “no aplicará” la iniciativa.
“Obama prometió, por escrito, que los cambios de la política hacia Cuba incluidos en el proyecto de ley presupuestaria de 2009 realmente no se implantarán”, dijo ayer el Nuevo Herald en referencia a declaraciones en tal sentido del secretario del Tesoro, Timothy Geithner.
Luego de dar por descontado que Obama firmará la ley presupuestaria por 410 millones de dólares, el diario agregó que Geithner dijo a los senadores demócratas Bill Nelson y Bob Menéndez que, en lo referido a Cuba, “el gobierno interpretaría la nueva ley de manera tan estricta que, de hecho, no tendrá efecto”. Entre especialistas y diplomáticos se estima que el informe del Herald “podría estar dirigido a calmar al sector más radical de la comunidad de Miami, que parece ir perdiendo poder en Washington”.
Según los informes conocidos hasta ahora, el documento aprobado desmonta algunas de las medidas aplicadas por la anterior administración de George W. Bush para endurecer el bloqueo a la isla, a solicitud del exilio cubano radical, y las sitúa, más o menos, en el nivel que tenían durante la administración demócrata de Bill Clinton.
En virtud de lo aprobado, los migrantes cubanos podrán viajar a la isla una vez al año (sólo podían hacerlo una vez cada tres años), estar en el país poco más de los 14 días permitidos hasta ahora y gastar hasta 170 dólares por día, en vez de los 50 autorizados hoy.
En el tema comercial, se suprime el pago por adelantado a empresas de alimentos, establecido por Bush, aunque no hay referencias a que la isla pueda contar con préstamos del sector privado estadunidense para incrementar sus compras.
“Aunque, muy tenues, estas son las primeras medidas adoptadas durante el mandato de Obama que marcan un cambio con la política Bush”, opinaron ayer aquí estudiosos del tema.
Los diarios nacionales Granma y Juventud Rebelde, sin embargo, no dieron el miércoles ninguna información al respecto, aunque el primero sí destacó que “a pesar de las múltiples presiones para que sean revisadas las prácticas comerciales del bloqueo, la agencia estadunidense encargada de hostigar a proveedores de la isla acaba de penalizar con una multa de 20 mil 950 dólares a la compañía Lactalis USA”.
Esa empresa de productos lácteos es la filial estadunidense del gigante francés del mismo nombre, y fue penada por “hacer transferencias financieras electrónicas en las que Cuba o un ciudadano cubano tenía interés”, dijo el periódico.
El presidente Raúl Castro ha dicho estar “dispuesto” a un diálogo “directo y sin condiciones” con Obama, pero todo lo que rodea a esa posibilidad es manejado aquí de manera muy selectiva y centralizada.
Entre las decenas de rumores que corren por la isla desde las destituciones el lunes pasado del vicepresidente Carlos Lage y el canciller Felipe Pérez Roque, se dice que éstos se habrían adentrado en ese terreno con “visiones muy personales” y creando “falsas expectativas” ante interlocutores extranjeros.
“Obama prometió, por escrito, que los cambios de la política hacia Cuba incluidos en el proyecto de ley presupuestaria de 2009 realmente no se implantarán”, dijo ayer el Nuevo Herald en referencia a declaraciones en tal sentido del secretario del Tesoro, Timothy Geithner.
Luego de dar por descontado que Obama firmará la ley presupuestaria por 410 millones de dólares, el diario agregó que Geithner dijo a los senadores demócratas Bill Nelson y Bob Menéndez que, en lo referido a Cuba, “el gobierno interpretaría la nueva ley de manera tan estricta que, de hecho, no tendrá efecto”. Entre especialistas y diplomáticos se estima que el informe del Herald “podría estar dirigido a calmar al sector más radical de la comunidad de Miami, que parece ir perdiendo poder en Washington”.
Según los informes conocidos hasta ahora, el documento aprobado desmonta algunas de las medidas aplicadas por la anterior administración de George W. Bush para endurecer el bloqueo a la isla, a solicitud del exilio cubano radical, y las sitúa, más o menos, en el nivel que tenían durante la administración demócrata de Bill Clinton.
En virtud de lo aprobado, los migrantes cubanos podrán viajar a la isla una vez al año (sólo podían hacerlo una vez cada tres años), estar en el país poco más de los 14 días permitidos hasta ahora y gastar hasta 170 dólares por día, en vez de los 50 autorizados hoy.
En el tema comercial, se suprime el pago por adelantado a empresas de alimentos, establecido por Bush, aunque no hay referencias a que la isla pueda contar con préstamos del sector privado estadunidense para incrementar sus compras.
“Aunque, muy tenues, estas son las primeras medidas adoptadas durante el mandato de Obama que marcan un cambio con la política Bush”, opinaron ayer aquí estudiosos del tema.
Los diarios nacionales Granma y Juventud Rebelde, sin embargo, no dieron el miércoles ninguna información al respecto, aunque el primero sí destacó que “a pesar de las múltiples presiones para que sean revisadas las prácticas comerciales del bloqueo, la agencia estadunidense encargada de hostigar a proveedores de la isla acaba de penalizar con una multa de 20 mil 950 dólares a la compañía Lactalis USA”.
Esa empresa de productos lácteos es la filial estadunidense del gigante francés del mismo nombre, y fue penada por “hacer transferencias financieras electrónicas en las que Cuba o un ciudadano cubano tenía interés”, dijo el periódico.
El presidente Raúl Castro ha dicho estar “dispuesto” a un diálogo “directo y sin condiciones” con Obama, pero todo lo que rodea a esa posibilidad es manejado aquí de manera muy selectiva y centralizada.
Entre las decenas de rumores que corren por la isla desde las destituciones el lunes pasado del vicepresidente Carlos Lage y el canciller Felipe Pérez Roque, se dice que éstos se habrían adentrado en ese terreno con “visiones muy personales” y creando “falsas expectativas” ante interlocutores extranjeros.
Manuel Juan Somoza en La Habana, Milenio, 12 de marzo.
0 Responses to "Silencio en Cuba ante flexibilización de EU"
Publicar un comentario