El general Raúl Castro cumple hoy un año y medio al frente del gobierno cubano, luego de lograr unos cuantos votos más que su hermano Fidel en los comicios del 20 de enero y sin que se sepa cuáles serán sus responsabilidades ejecutivas, cuando en febrero concluya el mando provisional que encabeza por la convalecencia del presidente.
Según el diario Granma, Raúl, quien cumplirá 77 años en junio próximo, logró en las elecciones parlamentarias 99.3% de los votos emitidos en el distrito electoral del oriente cubano por el que se presentó su candidatura a diputado, uno de los más altos registrados en el país.
Fidel obtuvo 98.2%, el vicepresidente Lage, 92.4% y el canciller Felipe Pérez Roque, 93.7 por ciento. Aunque la media de votación por los diputados electos sobrepasó 90%, el titular del Banco Central, Francisco Soberón registró 89.6% y Misael Enamorado, jefe del Partido Comunista en Santiago de Cuba, segunda ciudad en importancia del país, obtuvo una de las votaciones más bajas, 74.7% del total de sufragios emitidos.
Este jueves, además, podría iniciarse el proceso “de consultas” a los diputados electos hace 11 días —entre los que figuran Fidel, Raúl y otros líderes nacionales como Carlos Lage—, con vista a la reelección presidencial de Castro por otro quinquenio, si antes el gobernante de 81 años no declina su nominación.
Según la Comisión de Candidatura Nacional en ese procedimiento se entrevistarán a los 614 diputados electos a fin de conformar las candidaturas para la presidencia y vicepresidencias del Consejo de Estado, que serán sometidas al voto directo y secreto de los parlamentarios el 24 de febrero.
Desde que se inició este procedimiento en 1976, Castro mantiene las jefaturas del Estado y el gobierno, y Raúl es el primer vicepresidente en las dos instancias.
El 31 de julio de 2006, cinco días después que Fidel fuera sorprendido por graves complicaciones intestinales que aún el miércoles lo mantenían en fase de recuperación, el general de cuatro estrellas asumió el mando de la nación y hasta hoy lo ha mantenido, distante de cualquier protagonismo mediático y encendiendo en el país una esperanza de “cambios estructurales”.
De acuerdo con pronunciamientos oficiales, Castro, quien ha sido siempre un defensor del centralismo estatal, habría dado su aprobación a los proyectos de cambio que se manejan para revitalizar, en primera instancia, la baja producción nacional de alimentos. En ese contexto, el miércoles el convaleciente Castro calificó de “antítesis de la ética” el discurso a la nación pronunciado el lunes por el presidente de Estados Unidos, George W. Bush, de quien dijo “prosigue así con su paseo olímpico sobre los problemas de un planeta a sus pies”.
En otro artículo a su firma que reprodujeron todos los medios locales, Castro aseguró que el discurso del lunes “fue el peor de todos (los pronunciados por Bush) por su demagogia, mentiras y ausencia total de ética”.
Según el diario Granma, Raúl, quien cumplirá 77 años en junio próximo, logró en las elecciones parlamentarias 99.3% de los votos emitidos en el distrito electoral del oriente cubano por el que se presentó su candidatura a diputado, uno de los más altos registrados en el país.
Fidel obtuvo 98.2%, el vicepresidente Lage, 92.4% y el canciller Felipe Pérez Roque, 93.7 por ciento. Aunque la media de votación por los diputados electos sobrepasó 90%, el titular del Banco Central, Francisco Soberón registró 89.6% y Misael Enamorado, jefe del Partido Comunista en Santiago de Cuba, segunda ciudad en importancia del país, obtuvo una de las votaciones más bajas, 74.7% del total de sufragios emitidos.
Este jueves, además, podría iniciarse el proceso “de consultas” a los diputados electos hace 11 días —entre los que figuran Fidel, Raúl y otros líderes nacionales como Carlos Lage—, con vista a la reelección presidencial de Castro por otro quinquenio, si antes el gobernante de 81 años no declina su nominación.
Según la Comisión de Candidatura Nacional en ese procedimiento se entrevistarán a los 614 diputados electos a fin de conformar las candidaturas para la presidencia y vicepresidencias del Consejo de Estado, que serán sometidas al voto directo y secreto de los parlamentarios el 24 de febrero.
Desde que se inició este procedimiento en 1976, Castro mantiene las jefaturas del Estado y el gobierno, y Raúl es el primer vicepresidente en las dos instancias.
El 31 de julio de 2006, cinco días después que Fidel fuera sorprendido por graves complicaciones intestinales que aún el miércoles lo mantenían en fase de recuperación, el general de cuatro estrellas asumió el mando de la nación y hasta hoy lo ha mantenido, distante de cualquier protagonismo mediático y encendiendo en el país una esperanza de “cambios estructurales”.
De acuerdo con pronunciamientos oficiales, Castro, quien ha sido siempre un defensor del centralismo estatal, habría dado su aprobación a los proyectos de cambio que se manejan para revitalizar, en primera instancia, la baja producción nacional de alimentos. En ese contexto, el miércoles el convaleciente Castro calificó de “antítesis de la ética” el discurso a la nación pronunciado el lunes por el presidente de Estados Unidos, George W. Bush, de quien dijo “prosigue así con su paseo olímpico sobre los problemas de un planeta a sus pies”.
En otro artículo a su firma que reprodujeron todos los medios locales, Castro aseguró que el discurso del lunes “fue el peor de todos (los pronunciados por Bush) por su demagogia, mentiras y ausencia total de ética”.
Nota de Manuel Juan Somoza desde La Habana, Milenio, 31 de enero.
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