Para los viejos panistas de Guerrero la declinación de su candidato a la gubernatura a favor del aspirante perredista Ángel Aguirre Rivero en la elección del 30 de enero pasado fue promovida por María Luisa Calderón, hermana del Presidente de la República, y estuvo a punto de hacer que el PAN perdiera su registro como partido político en esa entidad.
“El voto duro, los fieles panistas, salvaron al blanquiazul para no perder su registró en esa contienda a gobernador”, coincidió la vieja guardia del PAN al considerar que el ex alcalde de Taxco, Marcos Efrén Parra Gómez, contaba con la simpatía de la mayoría de los militantes de ese partido.
“La decisión de declinar, casi en el último día, imposibilitó a la estructura del partido a orientar el sentido de los votos y ocasionó que en la contienda electoral se registrará muchos sufragios nulos”, admitió el coordinador de campaña del PAN, Enrique Castro Soto.
A pesar de las severas críticas que el ex alcalde de Taxco había vertido en contra del candidato de la alianza Guerrero nos Une (PRD-PT-Convergencia) en la recta final de su etapa proselitista, a sólo dos días de que concluyera la campaña política, Parra Gómez sorprendió a sus seguidores al anunciar la declinación de su candidatura a favor de Aguirre Rivero.
Según los panistas guerrerenses, la hermana del presidente Felipe Calderón Hinojosa influyó para que el Comité Ejecutivo Nacional (CEN) de Acción Nacional convenciera a Parra Gómez de que declinara a favor del ex priísta, quien se adjudicó el triunfo con 55.3% de la votación, seguido del candidato de la coalición Tiempos mejores para Guerrero (PRI-PVEM-Panal) con 42.7% de los sufragios.
Confusión de simpatizantes
Parra Gómez había previsto a su favor unos 150 mil votos como candidato del PAN, pero al abandonar la contienda desconcertó a sus simpatizantes, que no votaron o anularon su voto, por lo que el panismo acumuló 16 mil 272 sufragios, 1.34% del total, apenas suficientes para mantener su registro como partido en Guerrero. “El PAN logró esos votos por la confusión, por el desconocimiento y por la mala información de cómo votar cuando se decidió de última hora la estrategia de declinar”, insistió Castro Soto.
Sin embargo, con esa votación, AN superó los 11 mil 437 votos —0.9% del total— que acumuló su candidata al gobierno del estado en 2005, Porfiria Sandoval Arroyo.
Para el presidente nacional de la Confederación Mexicana de Productos Agrícolas, Erbey Arredondo, ex candidato a la alcaldía de San Marcos, la declinación influyó mucho en los resultados, aunque el “voto azul” fue fiel.
“En el PAN había mucha simpatía por Marcos Efrén Parra Gómez y la declinación nos tomó de sorpresa, pero cuando la dirigencia dijo que el PAN no iba a ganar, decidió declinar para cerrar el paso a nuestros adversarios. Lo que hicimos es apoyar”, añadió Erbey Arredondo.
“Eso (la declinación) provocó que muchos, como yo, nos abstuviéramos de salir a emitir nuestro voto”, declaró el panista y empresario Max Tejeda, quien disputó y perdió la gubernatura de la entidad ante Rubén Figueroa Alcocer, en 1993.
Las críticas
Parra Gómez centró parte de su discurso de campaña en criticar las propuestas de campaña del aspirante priísta Manuel Añorve Baños y del perredista Aguirre Guerrero, a quienes comparó con dos conocidos refrescos de soda por considerarlos dañinos. “Los dos son un riesgo de salud humana”, comentó.
También criticó algunas de las promesas de campaña de Ángel Aguirre como de entregar de forma gratuita uniformes y útiles escolares.
Tampoco estuvo de acuerdo con la promesa de Manuel Añorve Baños, el abanderado por el PRI, de regalar fertilizantes a los campesinos. “Es un absurdo andar tirando dinero”, señaló.
El panista Parra Gómez dice que no se arrepiente de su decisión, porque con ello el PAN logró incluir sus propuestas de campaña en el programa de gobierno del perredista ganador. “Lo malo hubiera sido que hubiera declinado y que hubiéramos perdido” con Aguirre.
“El voto duro, los fieles panistas, salvaron al blanquiazul para no perder su registró en esa contienda a gobernador”, coincidió la vieja guardia del PAN al considerar que el ex alcalde de Taxco, Marcos Efrén Parra Gómez, contaba con la simpatía de la mayoría de los militantes de ese partido.
“La decisión de declinar, casi en el último día, imposibilitó a la estructura del partido a orientar el sentido de los votos y ocasionó que en la contienda electoral se registrará muchos sufragios nulos”, admitió el coordinador de campaña del PAN, Enrique Castro Soto.
A pesar de las severas críticas que el ex alcalde de Taxco había vertido en contra del candidato de la alianza Guerrero nos Une (PRD-PT-Convergencia) en la recta final de su etapa proselitista, a sólo dos días de que concluyera la campaña política, Parra Gómez sorprendió a sus seguidores al anunciar la declinación de su candidatura a favor de Aguirre Rivero.
Según los panistas guerrerenses, la hermana del presidente Felipe Calderón Hinojosa influyó para que el Comité Ejecutivo Nacional (CEN) de Acción Nacional convenciera a Parra Gómez de que declinara a favor del ex priísta, quien se adjudicó el triunfo con 55.3% de la votación, seguido del candidato de la coalición Tiempos mejores para Guerrero (PRI-PVEM-Panal) con 42.7% de los sufragios.
Confusión de simpatizantes
Parra Gómez había previsto a su favor unos 150 mil votos como candidato del PAN, pero al abandonar la contienda desconcertó a sus simpatizantes, que no votaron o anularon su voto, por lo que el panismo acumuló 16 mil 272 sufragios, 1.34% del total, apenas suficientes para mantener su registro como partido en Guerrero. “El PAN logró esos votos por la confusión, por el desconocimiento y por la mala información de cómo votar cuando se decidió de última hora la estrategia de declinar”, insistió Castro Soto.
Sin embargo, con esa votación, AN superó los 11 mil 437 votos —0.9% del total— que acumuló su candidata al gobierno del estado en 2005, Porfiria Sandoval Arroyo.
Para el presidente nacional de la Confederación Mexicana de Productos Agrícolas, Erbey Arredondo, ex candidato a la alcaldía de San Marcos, la declinación influyó mucho en los resultados, aunque el “voto azul” fue fiel.
“En el PAN había mucha simpatía por Marcos Efrén Parra Gómez y la declinación nos tomó de sorpresa, pero cuando la dirigencia dijo que el PAN no iba a ganar, decidió declinar para cerrar el paso a nuestros adversarios. Lo que hicimos es apoyar”, añadió Erbey Arredondo.
“Eso (la declinación) provocó que muchos, como yo, nos abstuviéramos de salir a emitir nuestro voto”, declaró el panista y empresario Max Tejeda, quien disputó y perdió la gubernatura de la entidad ante Rubén Figueroa Alcocer, en 1993.
Las críticas
Parra Gómez centró parte de su discurso de campaña en criticar las propuestas de campaña del aspirante priísta Manuel Añorve Baños y del perredista Aguirre Guerrero, a quienes comparó con dos conocidos refrescos de soda por considerarlos dañinos. “Los dos son un riesgo de salud humana”, comentó.
También criticó algunas de las promesas de campaña de Ángel Aguirre como de entregar de forma gratuita uniformes y útiles escolares.
Tampoco estuvo de acuerdo con la promesa de Manuel Añorve Baños, el abanderado por el PRI, de regalar fertilizantes a los campesinos. “Es un absurdo andar tirando dinero”, señaló.
El panista Parra Gómez dice que no se arrepiente de su decisión, porque con ello el PAN logró incluir sus propuestas de campaña en el programa de gobierno del perredista ganador. “Lo malo hubiera sido que hubiera declinado y que hubiéramos perdido” con Aguirre.
Adriana Covarrubias corresponsal, El Universal, 6 de febrero.
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