El secretario de Organización del PRI, Arnoldo Ochoa, consideró que las alianzas son figuras derrotables, siempre y cuando el partido se mantenga unido y la oposición no logre cooptar a sus cuadros más importantes.
Advirtió que después de las elecciones de Baja California Sur, en las que duplicaron sus votos al pasar de 40 mil votos en la última elección federal y 80 mil en la del pasado 6 de febrero, se demostró que el partido puede ganar con candidatos propios y sin tener que traicionar sus principios, con alianzas sólo con los partidos cuya ideología coincide con la del tricolor.
“La virtud que tuvo el PRI es que conservó a sus cuadros; a la gente que estuvo incluso en los tiempos más difíciles fue a la que se consideró en las planillas y por la que se hizo el trabajo. Ésa es la diferencia que podemos marcar con respecto a los otros partidos”, explicó.
Distinguió entre contubernios y alianzas, pues unos buscan el poder por el poder, mientras en el caso del PRI sólo se han acercado con los partidos con los que tiene una ideología similar.
Ochoa destacó que pese a todo han podido vencer a las coaliciones que en más de tres estados, siempre y cuando los cuadros priistas se mantengan dentro de las filas del partido.
Recordó que en el caso de Durango, Veracruz e Hidalgo el gobierno se mantuvo, porque los cuadros siempre fueron del PRI y éste se mantuvo en la misma línea.
Sin embargo, contrastó, en Guerrero y Sinaloa, la división nos dejó debilitados para pelear por la gubernatura.
Incluso, consideró que en términos generales los balances electorales entre los tres partidos resultan benéficos para el PRI. “En Baja CaliforniaSur pasamos de una sola diputación local a la posibilidad de tener seis espacios en el Congreso local, dos municipios, (obtuvimos) el triunfo de las votaciones para gobernador en los municipios más grandes”, explicó.
Por ello, aseguró que centrarán suss esfuerzos en mantener la unidad y la inclusión de todas las fuerzas en los proyectos.
México • Miriam Castillo, Milenio, 10 de febrero.
Advirtió que después de las elecciones de Baja California Sur, en las que duplicaron sus votos al pasar de 40 mil votos en la última elección federal y 80 mil en la del pasado 6 de febrero, se demostró que el partido puede ganar con candidatos propios y sin tener que traicionar sus principios, con alianzas sólo con los partidos cuya ideología coincide con la del tricolor.
“La virtud que tuvo el PRI es que conservó a sus cuadros; a la gente que estuvo incluso en los tiempos más difíciles fue a la que se consideró en las planillas y por la que se hizo el trabajo. Ésa es la diferencia que podemos marcar con respecto a los otros partidos”, explicó.
Distinguió entre contubernios y alianzas, pues unos buscan el poder por el poder, mientras en el caso del PRI sólo se han acercado con los partidos con los que tiene una ideología similar.
Ochoa destacó que pese a todo han podido vencer a las coaliciones que en más de tres estados, siempre y cuando los cuadros priistas se mantengan dentro de las filas del partido.
Recordó que en el caso de Durango, Veracruz e Hidalgo el gobierno se mantuvo, porque los cuadros siempre fueron del PRI y éste se mantuvo en la misma línea.
Sin embargo, contrastó, en Guerrero y Sinaloa, la división nos dejó debilitados para pelear por la gubernatura.
Incluso, consideró que en términos generales los balances electorales entre los tres partidos resultan benéficos para el PRI. “En Baja CaliforniaSur pasamos de una sola diputación local a la posibilidad de tener seis espacios en el Congreso local, dos municipios, (obtuvimos) el triunfo de las votaciones para gobernador en los municipios más grandes”, explicó.
Por ello, aseguró que centrarán suss esfuerzos en mantener la unidad y la inclusión de todas las fuerzas en los proyectos.
México • Miriam Castillo, Milenio, 10 de febrero.
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