A escasas horas de que venza el plazo estatutario para el registro de precandidatos del PRI al Senado por el principio de mayoría relativa, la disputa por estas posiciones en buena parte de las entidades del país está al rojo vivo debido a la cantidad de interesados en las postulaciones y los intereses políticos que gravitan para influir en las mismas.
De hecho, hay quienes aseguran en el partido que este sábado habrásorpresas muy desagradables
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Ante esta situación, la dirigencia del PRI citó para este viernes a otra sesión de la Comisión Política Permanente, a partir de la una de la tarde, con un orden del día que sólo menciona que serán tratados asuntos relacionados al proceso electoral federal 2011-2012
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En la búsqueda de influir en las designaciones de quienes obtendrán el registro –y que por haberse decidido el método de convención de delegados, quienes lo obtengan de inmediato serían los elegidos– participan desde el precandidato presidencial Enrique Peña Nieto hasta gobernadores, ex mandatarios, dirigentes políticos y legisladores.
De ahí la urgencia de la dirigencia nacional priísta por definir las candidaturas en las entidades donde habrá cambio de Ejecutivo local este año, pues por lo general a los interesados que no obtienen la postulación se les ha ofrecido, a cambio, ser candidatos al Senado.
Ejemplos de esto estarían, por ejemplo, en Yucatán y Jalisco; en Tabasco, donde se introdujo ese elemento de negociación en la compleja disputa, resuelta ayer en la madrugada, así como en Morelos, donde al cierre de esta edición seguía sin anunciarse una definición.
También se encuentra pendiente la decisión de a quién llevará el PRI como candidato para el gobierno de Guanajuato.
A ese panorama se suma la rebelión que mantienen los militantes del PRI en estados como Sinaloa y Quintana Roo, así como en el Distrito Federal por los términos pactados para establecer la coalición electoral con el Panal y el PVEM, situación que no se descarta sería una de las que Pedro Joaquín Coldwell podría llevar este día a la sesión de la Comisión Política Permanente, si bien por estatutos la dirigencia partidista tiene facultades para modificar los términos originales de las alianzas electorales.
Otro factor está en el interés de algunos ex gobernadores por la postulación, quienes han hecho sentir, para esos fines, su todavía importante fuerza política al servicio del candidato presidencial Enrique Peña Nieto, como ocurrió hace apenas unos días en Durango con Ismael Hernández Deras.
Rosa Elvira Vargas, La Jornada, 20 de enero.
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