En 2007 el número de mexicanos deportados de Estados Unidos fue de 513 mil 14 hombres y mujeres, quienes fueron aprehendidos no sólo en sus lugares de trabajo, en las calles, carreteras y domicilios, sino también en redadas cada vez más frecuentes de las autoridades migratorias en los aeropuertos.
Estas detenciones, de las que la cancillería mexicana no reporta su número, se ejecutan contra los indocumentados que con boleto en mano y a punto de abandonar EU están indefensos, sin protección consular, y son víctimas no sólo de la pérdida de su libertad, sino del fruto de su trabajo, ya que son obligados a entregar pertenencias y equipaje, que nunca recuperan.
Este fenómeno no es investigado ni atendido por los consulados mexicanos en EU, pero algunas organizaciones no gubernamentales se han preocupado por el asunto, al detectar en las terminales aéreas estadunidenses un número indeterminado de maletas, propiedad de los indocumentados mexicanos. Se desconoce cuál es su destino y su valor.
La atención consular a los paisanos ilegales que pasan por la amarga experiencia de la deportación, no es recíproca a las millonarias remesas que envían cada año a sus familias en México, ya que representan la segunda entrada de divisas al país. Tan sólo en 2007, el monto superó los 23 mil millones de dólares.
Un caso frecuente se da en el aeropuerto de Phoenix, Arizona. El equipaje de los detenidos y próximos a ser deportados se acumulan en pilas que no son reclamadas por nadie y representan tan sólo una parte mínima del complejo problema migratorio, según Elías Bermúdez, presidente de Migrantes sin Fronteras, aunque hay personas deportadas que mantienen la intención de regresar a EU sólo para rescatar sus pertenencias.
La Agencia de Inmigración y Aduanas de Estados Unidos dio a conocer que durante 2007 fueron deportados 276 mil 912 inmigrantes a sus países de origen, cantidad que duplica a la de 2006.
Organizaciones civiles estadunidenses y mexicanas han denunciado esta práctica que cometen las autoridades estadunidenses, pero esto no ha ayudado a cuantificar el valor que contienen esos equipajes y que no son devueltos a sus propietarios, aun cuando éstos llevan su dirección.
Cada día son deportadas de 400 a 600 personas; tan sólo en 2007, 200 mil fueron enviados a Tijuana, según Víctor Clark, presidente del Centro Binacional de Derechos Humanos; sin embargo, la Oficina Nacional de Migración estadunidense indica que en el mismo periodo fueron detenidas 880 mil personas que tenían la intención de ingresar a su país por la frontera con México.
Se espera que en 2008 esta cifra sea superada debido al proceso de recesión en Estados Unidos,
De acuerdo con el catedrático de la Universidad de San Diego, en diciembre pasado se enteró de las acciones que policías estadunidenses realizaban en los aeropuertos
—Se dan arrestos de gente que tenía boletos comprados y esperaba abordar el avión para salir del país y era detenida y sus cosas se perdían, debido a que los algunos indocumentados no consideran un derecho el reclamo de sus artículos.
Clark indicó desconocer el monto financiero, “no sabemos cuántos recursos económicos se están quedando abandonados, pues no es cuantificable ni la cantidad y ni el valor de las pertenencias que se han quedado en esa condición en Estados Unidos, pero es una queja que frecuentemente dicen”.
—Eso es algo que comúnmente comentan los deportados en la frontera, porque no se les da la oportunidad de disponer de sus pertenencias, las redadas son muy agresivas, no se permite recoger nada, ni siquiera a los hijos, si en ese momento hay que ir por ellos a la escuela, indicó en entrevista telefónica.
Por su parte, el presidente de Migrantes sin Fronteras afirmó que en el aeropuerto de Phoenix esta práctica es constante, pues, según él, “en ocasiones la gente ya estaba por abordar con su boleto en mano, y fue detenido y sus cosas se perdían”.
Asimismo, indicó que ha realizado recorridos en este aeropuerto y aun con la presencia, casi diaria, de representantes del consulado mexicano en ese lugar, “hay agentes que aunque ven que la gente ya va de salida, la abordan y la detienen.
“Usualmente se da con personas que vienen de otro estado, aterrizan en Phoenix y de aquí se trasladan a su país de
origen y se pierden sus equipajes”.
En este sentido, indicó que ha visto “mucho equipaje que no han reclamado y me imagino que es de personas detenidas, pero yo he tenido la oportunidad de hablar con algunos agentes y les pregunto que por qué los detienen, pues deben fijarse en los que ingresan al país, no en los que van de salida”.
Sin embargo, estas prácticas también forman parte de un descuido de los migrantes, pues cuando van a viajar fuera de Estados Unidos “se les olvida que al hacer escala deben documentarse en el aeropuerto, y no lo hacen y por eso los detectan como indocumentados”.
Del lado mexicano los problemas para los migrantes no terminan, pues al ingresar a territorio nacional “los indocumentados a quienes hemos entrevistado nos han contado que al cruzar la frontera con Tijuana, luego del proceso de deportación, llegan con lo que traían puesto a la hora de la detención”.
El relator para los Derechos Humanos de la ONU, Jorge Bustamante, dijo que la cancillería no ha realizado acciones efectivas para salvaguardar el respeto de los derechos humanos de los migrantes, quienes constituyen la segunda fuente de ingresos del país, y menos en el sentido de reclamar las pertenencias de los que son deportados.
Para el funcionario de la ONU, al aumentar las deportaciones se agudizan las violaciones a los derechos humanos, pues no se les permite hacer llamadas telefónicas, las detenciones se dan en las calles y domicilios donde abandonan sus pertenencias.
Indicó que las agresiones xenofóbicas se incrementarán, pero también se verá en el lado mexicano, porque su policía continúa abusando de los migrantes.
Datos clave
En 2007, 880 mil personas fueron detenidas al cruzar ilegalmente la frontera de México y EU, número que decreció respecto a 2006, que fue de 1.1 millones de personas.
En el mismo año, el gobierno de EU construyó 284 kilómetros de cercas a lo largo de los tres mil 200 kilómetros de frontera norte y tiene por objeto levantar 670 millas más en 2008.
A finales de 2007, legislaturas locales de EU han propuesto más de mil 560 medidas relacionadas con la migración. De ellas, más de 240 se han convertido en ley en 46 estados.
Estas detenciones, de las que la cancillería mexicana no reporta su número, se ejecutan contra los indocumentados que con boleto en mano y a punto de abandonar EU están indefensos, sin protección consular, y son víctimas no sólo de la pérdida de su libertad, sino del fruto de su trabajo, ya que son obligados a entregar pertenencias y equipaje, que nunca recuperan.
Este fenómeno no es investigado ni atendido por los consulados mexicanos en EU, pero algunas organizaciones no gubernamentales se han preocupado por el asunto, al detectar en las terminales aéreas estadunidenses un número indeterminado de maletas, propiedad de los indocumentados mexicanos. Se desconoce cuál es su destino y su valor.
La atención consular a los paisanos ilegales que pasan por la amarga experiencia de la deportación, no es recíproca a las millonarias remesas que envían cada año a sus familias en México, ya que representan la segunda entrada de divisas al país. Tan sólo en 2007, el monto superó los 23 mil millones de dólares.
Un caso frecuente se da en el aeropuerto de Phoenix, Arizona. El equipaje de los detenidos y próximos a ser deportados se acumulan en pilas que no son reclamadas por nadie y representan tan sólo una parte mínima del complejo problema migratorio, según Elías Bermúdez, presidente de Migrantes sin Fronteras, aunque hay personas deportadas que mantienen la intención de regresar a EU sólo para rescatar sus pertenencias.
La Agencia de Inmigración y Aduanas de Estados Unidos dio a conocer que durante 2007 fueron deportados 276 mil 912 inmigrantes a sus países de origen, cantidad que duplica a la de 2006.
Organizaciones civiles estadunidenses y mexicanas han denunciado esta práctica que cometen las autoridades estadunidenses, pero esto no ha ayudado a cuantificar el valor que contienen esos equipajes y que no son devueltos a sus propietarios, aun cuando éstos llevan su dirección.
Cada día son deportadas de 400 a 600 personas; tan sólo en 2007, 200 mil fueron enviados a Tijuana, según Víctor Clark, presidente del Centro Binacional de Derechos Humanos; sin embargo, la Oficina Nacional de Migración estadunidense indica que en el mismo periodo fueron detenidas 880 mil personas que tenían la intención de ingresar a su país por la frontera con México.
Se espera que en 2008 esta cifra sea superada debido al proceso de recesión en Estados Unidos,
De acuerdo con el catedrático de la Universidad de San Diego, en diciembre pasado se enteró de las acciones que policías estadunidenses realizaban en los aeropuertos
—Se dan arrestos de gente que tenía boletos comprados y esperaba abordar el avión para salir del país y era detenida y sus cosas se perdían, debido a que los algunos indocumentados no consideran un derecho el reclamo de sus artículos.
Clark indicó desconocer el monto financiero, “no sabemos cuántos recursos económicos se están quedando abandonados, pues no es cuantificable ni la cantidad y ni el valor de las pertenencias que se han quedado en esa condición en Estados Unidos, pero es una queja que frecuentemente dicen”.
—Eso es algo que comúnmente comentan los deportados en la frontera, porque no se les da la oportunidad de disponer de sus pertenencias, las redadas son muy agresivas, no se permite recoger nada, ni siquiera a los hijos, si en ese momento hay que ir por ellos a la escuela, indicó en entrevista telefónica.
Por su parte, el presidente de Migrantes sin Fronteras afirmó que en el aeropuerto de Phoenix esta práctica es constante, pues, según él, “en ocasiones la gente ya estaba por abordar con su boleto en mano, y fue detenido y sus cosas se perdían”.
Asimismo, indicó que ha realizado recorridos en este aeropuerto y aun con la presencia, casi diaria, de representantes del consulado mexicano en ese lugar, “hay agentes que aunque ven que la gente ya va de salida, la abordan y la detienen.
“Usualmente se da con personas que vienen de otro estado, aterrizan en Phoenix y de aquí se trasladan a su país de
origen y se pierden sus equipajes”.
En este sentido, indicó que ha visto “mucho equipaje que no han reclamado y me imagino que es de personas detenidas, pero yo he tenido la oportunidad de hablar con algunos agentes y les pregunto que por qué los detienen, pues deben fijarse en los que ingresan al país, no en los que van de salida”.
Sin embargo, estas prácticas también forman parte de un descuido de los migrantes, pues cuando van a viajar fuera de Estados Unidos “se les olvida que al hacer escala deben documentarse en el aeropuerto, y no lo hacen y por eso los detectan como indocumentados”.
Del lado mexicano los problemas para los migrantes no terminan, pues al ingresar a territorio nacional “los indocumentados a quienes hemos entrevistado nos han contado que al cruzar la frontera con Tijuana, luego del proceso de deportación, llegan con lo que traían puesto a la hora de la detención”.
El relator para los Derechos Humanos de la ONU, Jorge Bustamante, dijo que la cancillería no ha realizado acciones efectivas para salvaguardar el respeto de los derechos humanos de los migrantes, quienes constituyen la segunda fuente de ingresos del país, y menos en el sentido de reclamar las pertenencias de los que son deportados.
Para el funcionario de la ONU, al aumentar las deportaciones se agudizan las violaciones a los derechos humanos, pues no se les permite hacer llamadas telefónicas, las detenciones se dan en las calles y domicilios donde abandonan sus pertenencias.
Indicó que las agresiones xenofóbicas se incrementarán, pero también se verá en el lado mexicano, porque su policía continúa abusando de los migrantes.
Datos clave
En 2007, 880 mil personas fueron detenidas al cruzar ilegalmente la frontera de México y EU, número que decreció respecto a 2006, que fue de 1.1 millones de personas.
En el mismo año, el gobierno de EU construyó 284 kilómetros de cercas a lo largo de los tres mil 200 kilómetros de frontera norte y tiene por objeto levantar 670 millas más en 2008.
A finales de 2007, legislaturas locales de EU han propuesto más de mil 560 medidas relacionadas con la migración. De ellas, más de 240 se han convertido en ley en 46 estados.
Nota de Jesús Sánchez, Milenio, 11 de febrero.
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