El Instituto Nacional de Ciencias Penales (INACIPE) no quiere que la reforma judicial lo tome por sorpresa, por lo que construye tres laboratorios para preparar a peritos y agentes del Ministerio Público de la PGR en materia de juicios orales.
Gerardo Laveaga, director del Instituto, explicó que con los laboratorios buscan recrear tres fases de la investigación y el juicio, como la recolección de pruebas, la actividad del agente del MP y la audiencia ante el juez.
En el primer laboratorio se recrea una escena del crimen, en donde los peritos recaban evidencias y tienen que explicar, ante un público, de qué pruebas se trata, cómo las obtuvieron y qué demuestran dentro de un delito.
Otro se asemeja a una agencia del Ministerio Público, en donde el personal ministerial tiene que realizar diligencias, como interrogar a víctimas y delincuentes; sintetizar la información recibida y preparar su exposición oral ante el juez.
El tercero recrea un juzgado en el que, ante un público asistente, se desahogará el juicio con una exposición del fiscal, la oposición de la defensa, la participación de los testigos, de la víctima y del presunto responsable.
De lo que se trata, indicó Laveaga, es de desarrollar la capacidad de síntesis y expresión oral del personal de la PGR, que le permita realizar los nuevos procedimientos judiciales como están planteados en la reforma penal.
"La contradicción es uno de los principios del juicio oral que significa: digo lo que pienso, tú me contestas; luego, te contesto, tú me contestas y el juez decide, así de rápido, punto.
"Los hechos tienen que estar muy claros, porque si alguien llega con cuestiones confusas, el juez puede decir: 'no estoy entendiendo lo que usted dice señor fiscal; el señor, queda libre", ejemplificó.
Los nuevos laboratorios, que se edifican en las instalaciones del Instituto y se prevé que queden listos entre marzo o abril, son parte de una inversión de 9 millones de pesos del INACIPE, en el que además está incluida la construcción de cinco nuevos salones y la ampliación de un laboratorio de servicios periciales ya existente.
La PGR tiene actualmente a 2 mil 799 agentes del Ministerio Público y mil 439 peritos.
La reforma penal, que se aprobó en el Congreso, prevé un periodo de ocho años para aplicar los juicios orales.
Este tiempo, aseguró Laveaga, es suficiente para operar una transformación en los agentes del Ministerio Público y los peritos de la PGR, quienes reciben instrucción en expresión oral, pero no la que se requiere con el nuevo modelo.
"Hoy en día, a todos los agentes del MP les estamos dando expresión oral y argumentación jurídica; estas dos materias, que ahorita son talleres y duran poco tiempo, van a ser mucho más importantes", indicó.
Una materia que deberá impartirse, resaltó, es la de mediación, para instruir a los agentes sobre conciliación, ya que sólo los asuntos importantes llegarán a juicio; al resto, se le tienen que dar salidas alternativas.
Gerardo Laveaga, director del Instituto, explicó que con los laboratorios buscan recrear tres fases de la investigación y el juicio, como la recolección de pruebas, la actividad del agente del MP y la audiencia ante el juez.
En el primer laboratorio se recrea una escena del crimen, en donde los peritos recaban evidencias y tienen que explicar, ante un público, de qué pruebas se trata, cómo las obtuvieron y qué demuestran dentro de un delito.
Otro se asemeja a una agencia del Ministerio Público, en donde el personal ministerial tiene que realizar diligencias, como interrogar a víctimas y delincuentes; sintetizar la información recibida y preparar su exposición oral ante el juez.
El tercero recrea un juzgado en el que, ante un público asistente, se desahogará el juicio con una exposición del fiscal, la oposición de la defensa, la participación de los testigos, de la víctima y del presunto responsable.
De lo que se trata, indicó Laveaga, es de desarrollar la capacidad de síntesis y expresión oral del personal de la PGR, que le permita realizar los nuevos procedimientos judiciales como están planteados en la reforma penal.
"La contradicción es uno de los principios del juicio oral que significa: digo lo que pienso, tú me contestas; luego, te contesto, tú me contestas y el juez decide, así de rápido, punto.
"Los hechos tienen que estar muy claros, porque si alguien llega con cuestiones confusas, el juez puede decir: 'no estoy entendiendo lo que usted dice señor fiscal; el señor, queda libre", ejemplificó.
Los nuevos laboratorios, que se edifican en las instalaciones del Instituto y se prevé que queden listos entre marzo o abril, son parte de una inversión de 9 millones de pesos del INACIPE, en el que además está incluida la construcción de cinco nuevos salones y la ampliación de un laboratorio de servicios periciales ya existente.
La PGR tiene actualmente a 2 mil 799 agentes del Ministerio Público y mil 439 peritos.
La reforma penal, que se aprobó en el Congreso, prevé un periodo de ocho años para aplicar los juicios orales.
Este tiempo, aseguró Laveaga, es suficiente para operar una transformación en los agentes del Ministerio Público y los peritos de la PGR, quienes reciben instrucción en expresión oral, pero no la que se requiere con el nuevo modelo.
"Hoy en día, a todos los agentes del MP les estamos dando expresión oral y argumentación jurídica; estas dos materias, que ahorita son talleres y duran poco tiempo, van a ser mucho más importantes", indicó.
Una materia que deberá impartirse, resaltó, es la de mediación, para instruir a los agentes sobre conciliación, ya que sólo los asuntos importantes llegarán a juicio; al resto, se le tienen que dar salidas alternativas.
Nota de Rolando Herrera, Reforma, 28 de febrero.
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