Calderón, por una reforma energética que contenga todos los puntos de vista

El presidente Felipe Calderón se pronunció por una reforma energética incluyente, en la que estén contenidos todos los puntos de vista que, de diferentes partes, se han dado a conocer desde que presentó su iniciativa en torno a una transformación del sector petrolero.
Indicó que en México “podríamos ir más rápido en una reforma que fortalezca a Pemex; necesitamos una reforma que integre precisamente a los mexicanos en el propósito que todos compartimos: gobierno, ciudadanos, trabajadores, de fortalecer a Pemex y encontrar los caminos que le permitan producir más y mejor petróleo, gas, gasolinas, petroquímicos y refinados”.
Al poner en marcha el Programa de Calidad del Aire para Vivir Mejor en el municipio de Salamanca, Guanajuato, el mandatario federal defendió su propuesta y apuntó hacia la dependencia que tiene nuestro país del exterior en materia de gasolina y petrolíferos.
“Esto no puede seguir así. Si verdaderamente queremos soberanía energética, necesitamos cambiar esta realidad, necesitamos no depender del exterior y volver a ser nuevamente autosuficientes en la producción de gasolina y otros petrolíferos, esa es la verdadera soberanía energética”, subrayó.
Ante los titulares de Energía, Pemex, Semarnat y autoridades de Guanajuato, el mandatario señaló: “La reforma que propuse al Congreso busca revertir la dependencia energética del exterior, ya que actualmente se importan 4 de cada 10 litros de gasolina que se consumen en el país”.
En el evento celebrado en el gimnasio “Lázaro Cárdenas” del Club Social del Sindicato Petrolero, en el que estaba contemplado como orador el Premio Nobel Mario Molina y quien no estuvo presente, el mandatario federal insistió en que la aprobación de la reforma permitiría atender necesidades prioritarias, como es la reconfiguraciòn de las refinerías.
Entre ellas, mencionó a la refinería “Antonio M. Amor”, situada en Salamanca, a la cual una reconfiguración —dijo— le podría ayudar a elevar su rentabilidad y reducir su impacto ambiental negativo.
De contar con los recursos que se requieren, no sólo se procedería a un programa de reconfiguración de refinerías, sino que se podrían construir nuevas refinerías en el Pacífico, en el Golfo o en el centro de la República, con tecnología de punta.
Desde la perspectiva presidencial, ello ayudaría a que Pemex pueda competir con las grandes industrias petroleras mundiales con plena estabilidad laboral y respeto absoluto a los derechos de los trabajadores y con mayores oportunidades de empleo para los mexicanos en este sector.
Luego de este comentario, trabajadores del sindicato petrolero, cuyo líder Carlos Romero Deschamps estuvo presente, arreciaron porras y vítores que fueron secundados por los trabajadores de CFE que acudieron al evento.
Con más y mejores refinerías, dijo el presidente Calderón, se estaría en condiciones de producir en México combustibles de mayor calidad y se terminaría con una buena parte de la contaminación que produce la emisión vehicular.
Ejemplificó: “se producirían combustibles que en lugar de emitir 500 partículas contaminantes por millón, se redujera a 30 partículas por millón, con lo que se daría un golpe categórico y definitivo a la contaminación”.
En el evento se firmaron convenios entre la federación y el gobierno estatal y los municipales de Salamanca y León para revertir la contaminación que proviene de la refinería de Pemex y la termoeléctrica.
Tras la firma, el presidente Calderón dijo que tanto Pemex como la Comisión Federal de Electricidad se comprometieron a reducir las emisiones de dióxido de azufre a cuando menos la mitad y de un 30 por ciento emisiones de partículas menores de 10 micrómetros hasta resolver el problema.

Cecilia Téllez Cortés en Salamanca, José Contreras y Moisés Sánchez Limón, Crónica, 18 de julio.