La agencia de noticias angoleña Angop informó que el contrato se firmó a principios de diciembre entre la división de Exploración y Producción del conglomerado Sonangop –cuya mayoría está en manos del Estado– y la rama comercial del monopolio estatal Cuba Petróleo (Cupet), para compartir la eventual producción de los lotes N22 y N23, ubicados en dirección hacia el occidente de la isla.
Ambos lotes fueron originalmente contratados por la empresa canadiense Sherritt, que en julio de 2008 renunció a operar en las aguas profundas cubanas, pero se mantuvo en la extracción de crudo en tierra firme y aguas someras. Otras ocho compañías extranjeras tienen porciones reservadas, aunque todavía sin explotar, en la ZEE cubana.
El año pasado Cuba redujo su consumo de petróleo y derivados a 142 mil 110 barriles diarios y su producción cayó a 60 mil barriles diarios, mientras las importaciones venezolanas aumentaron a 112 mil barriles diarios, según informes oficiales.
El gobierno cubano espera que en la ZEE se perforen unos siete pozos entre 2011 y 2012. Además de los angoleños, en esa porción del Golfo de México tienen lotes contratados la hispano-argentina Repsol-YPF, ONGC-Videsh de India y la noruega Statoil-Hydro, en alianza tripartita; la brasileña Petrobras, Petrovietnam, Petróleos de Venezuela (Pdvsa) y la malaya Petronas, en unión con el gigante ruso Gazprom.
Repsol abrió un primer pozo en 2004 e informó entonces que halló petróleo de alta calidad, pero lo consideró incosteable. Un obstáculo particular de la industria en Cuba es que, por el bloqueo de Estados Unidos, no se puede emplear una plataforma con más de 10 por ciento de componentes de ese origen.
La empresa hispano-argentina anunció que hará una nueva perforación en 2011, con una plataforma fabricada en China para un proveedor italiano. Pdvsa tenía previsto perforar este fin de año, pero aún se desconoce la fecha. El presidente Hugo Chávez dijo en noviembre pasado que sería “pronto” y usaría plataforma brasileña.
No hay un cálculo firme de las reservas de la ZEE, pero el gobierno cubano ha dicho que espera disponer ahí de unos 20 mil millones de barriles de crudo, mientras el servicio de prospección geológica de Estados Unidos supone algo más de 4 mil millones.
Cupet ha reconocido que sus yacimientos en tierra firme, con extensiones a las aguas someras, pueden estar cerca de su declinación. La empresa local y Sherritt trabajan en una franja del noroeste de la isla. Petrovietnam y la rusa Zarubezhneft contrataron lotes para la exploración en áreas cercanas, pero aún se desconoce si han tenido indicios favorables.
Ambos lotes fueron originalmente contratados por la empresa canadiense Sherritt, que en julio de 2008 renunció a operar en las aguas profundas cubanas, pero se mantuvo en la extracción de crudo en tierra firme y aguas someras. Otras ocho compañías extranjeras tienen porciones reservadas, aunque todavía sin explotar, en la ZEE cubana.
El año pasado Cuba redujo su consumo de petróleo y derivados a 142 mil 110 barriles diarios y su producción cayó a 60 mil barriles diarios, mientras las importaciones venezolanas aumentaron a 112 mil barriles diarios, según informes oficiales.
El gobierno cubano espera que en la ZEE se perforen unos siete pozos entre 2011 y 2012. Además de los angoleños, en esa porción del Golfo de México tienen lotes contratados la hispano-argentina Repsol-YPF, ONGC-Videsh de India y la noruega Statoil-Hydro, en alianza tripartita; la brasileña Petrobras, Petrovietnam, Petróleos de Venezuela (Pdvsa) y la malaya Petronas, en unión con el gigante ruso Gazprom.
Repsol abrió un primer pozo en 2004 e informó entonces que halló petróleo de alta calidad, pero lo consideró incosteable. Un obstáculo particular de la industria en Cuba es que, por el bloqueo de Estados Unidos, no se puede emplear una plataforma con más de 10 por ciento de componentes de ese origen.
La empresa hispano-argentina anunció que hará una nueva perforación en 2011, con una plataforma fabricada en China para un proveedor italiano. Pdvsa tenía previsto perforar este fin de año, pero aún se desconoce la fecha. El presidente Hugo Chávez dijo en noviembre pasado que sería “pronto” y usaría plataforma brasileña.
No hay un cálculo firme de las reservas de la ZEE, pero el gobierno cubano ha dicho que espera disponer ahí de unos 20 mil millones de barriles de crudo, mientras el servicio de prospección geológica de Estados Unidos supone algo más de 4 mil millones.
Cupet ha reconocido que sus yacimientos en tierra firme, con extensiones a las aguas someras, pueden estar cerca de su declinación. La empresa local y Sherritt trabajan en una franja del noroeste de la isla. Petrovietnam y la rusa Zarubezhneft contrataron lotes para la exploración en áreas cercanas, pero aún se desconoce si han tenido indicios favorables.
Gerardo Arreola, La Jornada, 22 de diciembre.
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