México sigue siendo uno de los países más peligrosos para ejercer el periodismo debido a la ineficacia de las autoridades para perseguir detener y enjuiciar a los agresores de los periodistas, lo que ha provocado que los reporteros, especialmente los que cubren temas relacionados con el narcotráfico, sean vulnerables a cualquier tipo de ataque y que los medios de comunicación recurran a la autocensura.
Esto lo revela el reporte anual del Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ, por sus siglas en ingles), en el que se hace notar que la impunidad en México siguió siendo la norma, pues aunque la administración del presidente Felipe Calderón prometiera proteger a los periodistas que trabajan bajo la amenaza de violencia, los defectos en el sistema judicial dejaron a los medios de comunicación expuestos a ataques abiertos.
Se subraya además que a nivel jurídico ni la ley firmada por el mandatario que elimina del Código Penal los delitos de calumnia, difamación e injuria, ofrece completa protección a los periodistas en cuanto a demandas de difamación criminal.
En el informe, que será presentado hoy, se recuerda como en Michoacán, donde la administración de Calderón Hinojosa desplegó a los miles de tropas para combatir la violencia producto del narcotráfico en 2007, al menos 20 periodistas fueron levantados (secuestrados) y amenazados por cuadrillas criminales o policías.
“Las autoridades mexicanas fallaron otra vez en perseguir enérgicamente a los autores de violencia contra periodistas, dejando a reporteros vulnerables a ataques y a los medios de comunicación recurrir a la autocensura. México es uno de los países más peligrosos para la prensa, la investigación de CPJ muestra que en los pasados 15 años, 13 periodistas han sido asesinados por la relación directa con su trabajo y otros 14 muertos en circunstancias confusas. En 2007 tres periodistas y tres trabajadores de medios de comunicación fueron asesinados, así como tres reporteros desaparecidos”, señala el texto.
Se alerta de los altos niveles de violencia que se viven en el país originados por la batalla que desde 2004 se ha dado entre los cárteles de las drogas del Golfo y de Sinaloa, organizaciones agresivas sobre todo en los estados del norte, pero que para 2007 se había extendido a casi cada estado del país.
El CPJ recuerda que en ese mismo año las noticias daban cuenta de al menos 2 mil muertos en los 10 primeros meses del año como consecuencia de la violencia relacionada con la droga. “Al extenderse la violencia en México, periodistas que cubren el tema del narcotráfico y crimen organizado cada vez más fueron blancos (de agresiones)”.
En el reporte de México, se señala que el peligro se extendió a los estados de Michoacán y Guerrero, Veracruz y Quintana Roo.
“La hostilidad y el miedo tenían un efecto inquietante sobre los medios de comunicación, montones de reporteros y muchos noticieros recurrieron a la autocensura”
Esto lo revela el reporte anual del Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ, por sus siglas en ingles), en el que se hace notar que la impunidad en México siguió siendo la norma, pues aunque la administración del presidente Felipe Calderón prometiera proteger a los periodistas que trabajan bajo la amenaza de violencia, los defectos en el sistema judicial dejaron a los medios de comunicación expuestos a ataques abiertos.
Se subraya además que a nivel jurídico ni la ley firmada por el mandatario que elimina del Código Penal los delitos de calumnia, difamación e injuria, ofrece completa protección a los periodistas en cuanto a demandas de difamación criminal.
En el informe, que será presentado hoy, se recuerda como en Michoacán, donde la administración de Calderón Hinojosa desplegó a los miles de tropas para combatir la violencia producto del narcotráfico en 2007, al menos 20 periodistas fueron levantados (secuestrados) y amenazados por cuadrillas criminales o policías.
“Las autoridades mexicanas fallaron otra vez en perseguir enérgicamente a los autores de violencia contra periodistas, dejando a reporteros vulnerables a ataques y a los medios de comunicación recurrir a la autocensura. México es uno de los países más peligrosos para la prensa, la investigación de CPJ muestra que en los pasados 15 años, 13 periodistas han sido asesinados por la relación directa con su trabajo y otros 14 muertos en circunstancias confusas. En 2007 tres periodistas y tres trabajadores de medios de comunicación fueron asesinados, así como tres reporteros desaparecidos”, señala el texto.
Se alerta de los altos niveles de violencia que se viven en el país originados por la batalla que desde 2004 se ha dado entre los cárteles de las drogas del Golfo y de Sinaloa, organizaciones agresivas sobre todo en los estados del norte, pero que para 2007 se había extendido a casi cada estado del país.
El CPJ recuerda que en ese mismo año las noticias daban cuenta de al menos 2 mil muertos en los 10 primeros meses del año como consecuencia de la violencia relacionada con la droga. “Al extenderse la violencia en México, periodistas que cubren el tema del narcotráfico y crimen organizado cada vez más fueron blancos (de agresiones)”.
En el reporte de México, se señala que el peligro se extendió a los estados de Michoacán y Guerrero, Veracruz y Quintana Roo.
“La hostilidad y el miedo tenían un efecto inquietante sobre los medios de comunicación, montones de reporteros y muchos noticieros recurrieron a la autocensura”
Nota de Natalia Gómez Quintero, El Universal, 4 de febrero.
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