La lucha contra el hampa no es sólo mía: Calderón

Al firmar el decreto de la reforma penal y de seguridad pública, el presidente Felipe Calderón afirmó que la lucha contra la delincuencia no es sólo del gobierno federal. El éxito de las modificaciones a la Constitución dependerá del compromiso de los gobiernos locales y los poderes Judicial y Legislativo para reorganizar las instituciones de procuración y administración de justicia, aseguró.

Sostuvo que ahora comienza la tarea de depurar los cuerpos policiacos y reiteró que su gobierno pretende “cerrar espacios a la impunidad, la tolerancia y la complicidad con el delito”.

Aseguró también que “no habrá seguridad garantizada mientras se asuma que esta lucha es tarea de un solo orden de gobierno, sea el federal o cualquier otro.

Este desafío “es responsabilidad de todas las autoridades, de todos los órdenes de gobierno y es un esfuerzo que requiere colaboración de la ciudadanía”.

Esta “no es una lucha del gobierno federal; es una lucha de toda la sociedad, del Estado mexicano integrado por los mexicanos y sus autoridades, porque lo que está en juego no es la libertad, la seguridad o la integridad de los gobernantes, sino, sobre todo, la seguridad de los gobernados”.

El decreto de la reforma se firmó ayer en Palacio Nacional. En la ceremonia estuvieron presentes el presidente de la Corte, Guillermo Ortiz Mayagoitia; el procurador general de la República, Eduardo Medina Mora, los secretarios de Gobernación, Juan Camilo Mouriño, y de Seguridad Pública, Genaro García Luna, además de diputados y senadores.

Preocupación de los mexicanos

El mandatario recordó que la seguridad pública es la primera preocupación de los ciudadanos y la primera responsabilidad del Estado. Expresó que ahora las autoridades tendrán mejores herramientas para golpear las estructuras operativas y económicas del crimen organizado, pues el marco legal incluye ahora figuras como arraigo, extinción del dominio de bienes producto de ilícitos y centros especiales de reclusión preventiva.

Con esta reforma “toda persona es inocente hasta que se demuestre su culpabilidad”, señaló Calderón, y añadió que de esta forma se podrá terminar con las historias de personas encarceladas por no poder pagar un abogado.

Lineamientos

La reforma en materia de justicia penal prevé las figuras de juicio oral e impide los cateos sin orden judicial.

Regula los requisitos para arraigar a un inculpado y establece el concepto de flagrancia, así como el término de delincuencia organizada y su tratamiento procesal.

También precisa que un juez no puede autorizar la intervención de comunicaciones entre particulares cuando se trate de materias electoral, fiscal, mercantil, civil, laboral o administrativa. Tampoco pueden presentarse como pruebas las conversaciones entre detenido y defensor.
Lorena López, Milenio, 18 de junio.

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