Raúl Castro cumple 100 días como presidente cubano

Raúl Castro cumplió ayer 77 años de edad y los primeros 100 días de un mandato presidencial que pretende “garantizar la continuidad del socialismo” cubano, y terminará formalmente cuando él haya ingresado al reducido grupo de octogenarios que dicen la última palabra en el planeta. O al menos esa parece ser la hoja de ruta del general de cuatro estrellas, quien asumió el mando del país en julio de 2006 de manera temporal por la mala salud de su hermano Fidel y desde el 24 de febrero preside el Estado y el gobierno.

Desde su llegada al poder, Raúl anunció “cambios estructurales” para sacar a la economía del hueco en que se encuentra, prometió elevar el nivel de vida de los isleños, propuso a Washington un diálogo de iguales y rodeó su gestión con un manto de silencio.

Bajo su liderazgo la producción de alimentos pasó a ser asunto de “seguridad nacional”; Santiago de Cuba, segunda ciudad en importancia, comenzó a recibir millonarias inversiones para eliminar la falta de agua potable que la afecta desde hace medio siglo; se decretó un alza de 20 por ciento en las pensiones y la seguridad social; se eliminaron prohibiciones hirientes, como la que impedía el libre alojamiento de los cubanos en los hoteles del país; y se reanimó el transporte por ómnibus y ferrocarril.

El congreso del Partido Comunista, cuya realización se mantenía en suspenso desde 1997 y es la instancia que fijará el rumbo del país en los próximos cinco años, fue convocado para “fines de 2009”, y a diferencia de su hermano Fidel, que personificó todo el poder, una jefatura colegiada parece imperar hoy en la nación.

Manuel Juan Somoza en La Habana, Milenio, 4 de junio.