Recriminan abusos a indocumentados

REYNOSA.- Con reclamos y críticas en altavoz, madres de centroamericanos desaparecidos en su paso por México hacia Estados Unidos llegaron a Reynosa para demandar a las autoridades su apoyo para localizar a sus familiares.

Las mujeres nicaragüenses, hondureñas, guatemaltecas y salvadoreñas llegaron en dos autobuses a la Casa del Migrante de Reynosa a las 16:45 horas escoltadas por la Policía Federal y Estatal Preventiva.

Fueron recibidas por representantes de la Iglesica católica, personal del Instituto Estatal de Migrantes, funcionarios municipales y representantes de organizaciones de derechos humanos.

La primer acción de las mujeres fue pegar en las paredes de la Casa del Migrante fotografías de sus seres queridos desaparecidos.

Luego de escuchar un fervorín, las mujeres realizaron una marcha a la que se unieron ciudadanos y funcionarios.

Las mujeres centroamericanas encabezadas por Martha Sánchez, coordinadora del Movimiento del Migrante Mesoamericano, caminaron casi 2 kilómetros por la avenida Luis Echeverría.

Por el altoparlante, el sacerdote advirtió que los centroamericanos son vejados, extorsionados o asesinados en su paso por territorio mexicano, al grado de que llaman a México el Cementerio Migrantes.

Sánchez reveló que en suelo mexicano hay entre 70 mil y 120 mil centroamericanos desaparecidos.

Alva Cázares, cónsul de Guatemala en McAllen, dijo que de enero a la fecha ha documentado 10 mil guatemaltecos repatriados, y estimo incalculable la cifra de desaparecidos.

En tanto, una activista del movimiento intervenía para criticar la política hipócrita de Estados Unidos de no permitir el libre tránsito ni regular la mano de obra que llega, por convenirles tener bajos sueldos y explotar al migrante.

Desde la Casa del Migrante hasta la Cruz del Migrante, monumento a los migrantes muertos en el Río Bravo, los casi 200 marchistas llegaron a los bajos del puente internacional Reynosa Hidalgo, donde colocaron una ofrenda floral y elevaron una plegaria. De pronto empezó a soplar fuerte el aire, el cielo se oscureció y la Marcha de la Esperanza se disolvió, las mujeres se fueron a pernoctar a la Casa del Migrante para partir este viernes a Monterrey y Saltillo.

Miguel Domínguez corresponsal, Reforma, 19 de enero.