NUEVO LAREDO, Tamps.— El Instituto Nacional de Migración (INM) firmará en octubre nuevos convenios de repatriación con Estados Unidos, con la finalidad de mejorar las condiciones de los deportados y de evitar que entre ellos se filtren delincuentes, mencionó el delegado regional de ese organismo, Aurelio Alamán Bueno.
La firma se logró gracias a la intervención de la embajada de México en Washington y del Departamento de Seguridad Interna de ese país, señaló el funcionario del INM.
Serán dos los convenios que se firmarán entre funcionarios mexicanos y estadounidenses en las ciudades fronterizas de Laredo y Brownsville, en Texas, y consistirán en un acuerdo de conformidad de las autoridades de ese país de avisar al INM antes de llevar a cabo una repatriación.
“Se cambiarán alguno sitios que ya eran comunes para la repatriación y nos avisarán previamente a las repatriaciones, para que podamos regular la cantidad de mexicanos que nos envían por cada evento”, explicó Alamán.
Dicho acuerdo permitirá a los funcionarios del INM conocer con mayor precisión la cantidad de mexicanos deportados por las diferentes fronteras de Tamaulipas, ya que antes se hacían sin el pleno conocimiento de las autoridades mexicanas, y en las deportaciones se filtraban peligrosos delincuentes, e incluso algunos miembros de las pandillas Mara Salvatrucha.
Una vez que se formalicen los acuerdos, las autoridades migratorias de México sabrán con precisión la hora de cada deportación, la cantidad de mexicanos que integren el grupo, además de conocer cuántos menores de edad serán repatriados, para que sean enviados al Sistema DIF para su custodia.
“Las autoridades norteamericanas se comprometieron a proporcionarnos la información de los mexicanos que sean delincuentes, por lo que pasaremos la información a las autoridades correspondientes”, explicó.
El funcionario agregó que con esta nueva modalidad en la repatriación de mexicanos por Tamaulipas, “pondremos nuestro mejor esfuerzo para realizar nuestro trabajo y trataremos de hacer las cosas lo mejor que sea posible”, aunque reconoció que persistirán dificultades para distinguir nacionalidades entre mexicanos y centroamericanos.
Cada día son repatriados por Nuevo Laredo entre 180 y 200 mexicanos en tres horarios diferentes, por lo que se presume que una vez que se firme el convenio, la cantidad de deportados podría aumentar de manera importante, ya que la mayoría es deportada por las noches.
Se espera que para fin de año la cantidad de mexicanos repatriados sea cercana a lo 50 mil, mientras que por Nuevo Laredo la cifra podría ser de 28 mil.
La firma se logró gracias a la intervención de la embajada de México en Washington y del Departamento de Seguridad Interna de ese país, señaló el funcionario del INM.
Serán dos los convenios que se firmarán entre funcionarios mexicanos y estadounidenses en las ciudades fronterizas de Laredo y Brownsville, en Texas, y consistirán en un acuerdo de conformidad de las autoridades de ese país de avisar al INM antes de llevar a cabo una repatriación.
“Se cambiarán alguno sitios que ya eran comunes para la repatriación y nos avisarán previamente a las repatriaciones, para que podamos regular la cantidad de mexicanos que nos envían por cada evento”, explicó Alamán.
Dicho acuerdo permitirá a los funcionarios del INM conocer con mayor precisión la cantidad de mexicanos deportados por las diferentes fronteras de Tamaulipas, ya que antes se hacían sin el pleno conocimiento de las autoridades mexicanas, y en las deportaciones se filtraban peligrosos delincuentes, e incluso algunos miembros de las pandillas Mara Salvatrucha.
Una vez que se formalicen los acuerdos, las autoridades migratorias de México sabrán con precisión la hora de cada deportación, la cantidad de mexicanos que integren el grupo, además de conocer cuántos menores de edad serán repatriados, para que sean enviados al Sistema DIF para su custodia.
“Las autoridades norteamericanas se comprometieron a proporcionarnos la información de los mexicanos que sean delincuentes, por lo que pasaremos la información a las autoridades correspondientes”, explicó.
El funcionario agregó que con esta nueva modalidad en la repatriación de mexicanos por Tamaulipas, “pondremos nuestro mejor esfuerzo para realizar nuestro trabajo y trataremos de hacer las cosas lo mejor que sea posible”, aunque reconoció que persistirán dificultades para distinguir nacionalidades entre mexicanos y centroamericanos.
Cada día son repatriados por Nuevo Laredo entre 180 y 200 mexicanos en tres horarios diferentes, por lo que se presume que una vez que se firme el convenio, la cantidad de deportados podría aumentar de manera importante, ya que la mayoría es deportada por las noches.
Se espera que para fin de año la cantidad de mexicanos repatriados sea cercana a lo 50 mil, mientras que por Nuevo Laredo la cifra podría ser de 28 mil.
Gastón Monge, corresponsal, El Universal, 23 de septiembre.
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