CARACAS.- El Gobierno del Presidente Hugo Chávez ha debilitado las instituciones democráticas y las garantías de los derechos humanos en Venezuela en un intento por contener a la Oposición, aseguró ayer Human Rights Watch (HRW) durante la presentación de un informe en la capital del país sudamericano.
En el texto, la organización defensora de los derechos humanos presenta un negativo balance de los casi 10 años de mandato de Chávez y analiza su impacto en el Poder Judicial, los medios de comunicación y las organizaciones sindicales.
"Hace 10 años, Chávez promovió una nueva Constitución que podría haber mejorado notablemente la situación de los derechos humanos en Venezuela", dijo José Miguel Vivanco, director para las Américas de HRW, quien presentó el informe.
"(Pero) su Gobierno, desde entonces, ha actuado en sentido contrario, sacrificando garantías fundamentales en función de sus intereses políticos", denunció.
Según el texto, Chávez desperdició una oportunidad única de renovar el desacreditado sistema político venezolano en 1999, tras la aprobación de la nueva Constitución.
El organismo destaca que la violación más grave del estado de derecho en Venezuela durante la última década fue el golpe de Estado contra el propio Chávez, en 2002.
"Lamentablemente, el Gobierno lo ha explotado desde entonces para justificar políticas que han degradado la democracia", afirmó Vivanco.
El informe "Una Década del Gobierno de Chávez: Intolerancia Política y Oportunidades Perdidas para el Progreso de los Derechos Humanos" denuncia, además, que la Administración chavista carece de un control judicial creíble.
Según la organización, desde 2002, Chávez acaparó el Tribunal Supremo de Justicia y, al controlar a los jueces, ha aplicado políticas que limitan las libertades civiles.
Además, HRW afirma que se ha fortalecido la capacidad del Estado de disminuir la libertad de expresión en los medios de comunicación.
En el texto, la organización defensora de los derechos humanos presenta un negativo balance de los casi 10 años de mandato de Chávez y analiza su impacto en el Poder Judicial, los medios de comunicación y las organizaciones sindicales.
"Hace 10 años, Chávez promovió una nueva Constitución que podría haber mejorado notablemente la situación de los derechos humanos en Venezuela", dijo José Miguel Vivanco, director para las Américas de HRW, quien presentó el informe.
"(Pero) su Gobierno, desde entonces, ha actuado en sentido contrario, sacrificando garantías fundamentales en función de sus intereses políticos", denunció.
Según el texto, Chávez desperdició una oportunidad única de renovar el desacreditado sistema político venezolano en 1999, tras la aprobación de la nueva Constitución.
El organismo destaca que la violación más grave del estado de derecho en Venezuela durante la última década fue el golpe de Estado contra el propio Chávez, en 2002.
"Lamentablemente, el Gobierno lo ha explotado desde entonces para justificar políticas que han degradado la democracia", afirmó Vivanco.
El informe "Una Década del Gobierno de Chávez: Intolerancia Política y Oportunidades Perdidas para el Progreso de los Derechos Humanos" denuncia, además, que la Administración chavista carece de un control judicial creíble.
Según la organización, desde 2002, Chávez acaparó el Tribunal Supremo de Justicia y, al controlar a los jueces, ha aplicado políticas que limitan las libertades civiles.
Además, HRW afirma que se ha fortalecido la capacidad del Estado de disminuir la libertad de expresión en los medios de comunicación.
Reforma, 19 de septiembre.
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