Para contar con “un aval político” y evitar suspicacias de negociaciones con el PAN y el PRI “en lo oscurito”, el coordinador del PRD en el Senado, Carlos Navarrete, oficializó la presentación del estado mayor de intelectuales y académicos, con quienes se tomarán todas las decisiones para dictaminar la reforma petrolera.
Con la ausencia de los líderes del PRD y de Convergencia, el diputado Javier González Garza y el senador Dante Delgado, se anunció que se reunirán dos veces por semana con al menos 10 de los integrantes que participaron en la redacción de la iniciativa que presentó el FAP.
Para Graco Ramírez, senador del PRD, la constitución del grupo es para tener un aval político y evitar que el final se acuse de negociaciones en lo oscurito.
Rolando Cordera dijo estar dispuesto al diálogo y a la deliberación del tema, pero pidió “no caer en ningún garlito del tipo o se reforma Pemex o no mejora”; posteriormente, en entrevista consideró a título personal que las movilizaciones son legítimas y útiles si son pacíficas y legales.
En el salón Vitrales del Senado, Cordera refirió que se trata de trabajar de manera convergente sobre algo inmediato, porque “lo urgente es fortalecer a la entidad paraestatal y al mismo tiempo abrir el camino para una reforma que respete los principios constitucionales tal y como están planteados hoy”.
En la serie de debates que organizó el Senado, Cordera propuso, como ocurre en otras partes del mundo, que el Ejecutivo retirara su propuesta de reforma con el fin de ampliar el debate y tener un documento consensuado.
“El país tiene que estudiar muy a fondo el tema de su seguridad y el tema de su seguridad material, que depende del petróleo”, expuso.
El cómite asesor del FAP está integrado por Mario di Costanzo y Claudia Sheinbaum, cercanos a López Obrador; además, Ifigenia Martínez, Alberto Montoya, Jorge Eduardo Navarrete, Víctor Rodríguez y Carlos Tello.
Con la ausencia de los líderes del PRD y de Convergencia, el diputado Javier González Garza y el senador Dante Delgado, se anunció que se reunirán dos veces por semana con al menos 10 de los integrantes que participaron en la redacción de la iniciativa que presentó el FAP.
Para Graco Ramírez, senador del PRD, la constitución del grupo es para tener un aval político y evitar que el final se acuse de negociaciones en lo oscurito.
Rolando Cordera dijo estar dispuesto al diálogo y a la deliberación del tema, pero pidió “no caer en ningún garlito del tipo o se reforma Pemex o no mejora”; posteriormente, en entrevista consideró a título personal que las movilizaciones son legítimas y útiles si son pacíficas y legales.
En el salón Vitrales del Senado, Cordera refirió que se trata de trabajar de manera convergente sobre algo inmediato, porque “lo urgente es fortalecer a la entidad paraestatal y al mismo tiempo abrir el camino para una reforma que respete los principios constitucionales tal y como están planteados hoy”.
En la serie de debates que organizó el Senado, Cordera propuso, como ocurre en otras partes del mundo, que el Ejecutivo retirara su propuesta de reforma con el fin de ampliar el debate y tener un documento consensuado.
“El país tiene que estudiar muy a fondo el tema de su seguridad y el tema de su seguridad material, que depende del petróleo”, expuso.
El cómite asesor del FAP está integrado por Mario di Costanzo y Claudia Sheinbaum, cercanos a López Obrador; además, Ifigenia Martínez, Alberto Montoya, Jorge Eduardo Navarrete, Víctor Rodríguez y Carlos Tello.
Elba Mónica Bravo, Milenio, 24 de septiembre.
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