Ejército enfrentará al narco en Guatemala

SAN JOSÉ.— El Ejército de Guatemala, que sigue atado a un viejo lastre de desprestigio, represión y atrocidades cometidas durante el conflicto bélico contra las guerrillas comunistas guatemaltecas, retornó paulatinamente a las calles tras casi 12 años de haberse replegado a sus cuarteles y planea duplicar su número de soldados.
Pero ahora el pretexto de la cúpula castrense guatemalteca no es enfrentar a guerrilleros, aniquilar poblaciones indígenas o ejecutar un nuevo golpe de Estado, sino combatir a los cárteles mexicanos que controlan el tráfico de drogas de Colombia a México y Estados Unidos, vía Centroamérica.

“Estamos en total desacuerdo con el retorno de los soldados a las calles y con el aumento de soldados”, dijo Hellen Mack, activista guatemalteca de derechos humanos y presidenta de la Fundación Myrna Mack (no estatal), de Guatemala. “En ninguna parte del acuerdo de paz suscrito en 1996 y que puso fin a 30 años de conflicto armado, dice que los militares deben retornar a las calles a luchar contra el narcotráfico, crimen organizado o delincuencia común”, declaró Mack ayer a EL UNIVERSAL.

“Los guatemaltecos estamos arrodillados por la delincuencia y la impunidad, pero no se necesitan más soldados, lo que se requiere son más policías”, añadió.

Pero el presidente guatemalteco Álvaro Colom alegó que reforzar al ejército busca fortalecer “la vigilancia” en fronteras y “corredores del país donde opera el crimen organizado”, y “alcanzar la seguridad del ciudadano” con más control territorial.

Sacudida por una incontrolable inseguridad, Guatemala se convirtió en base, puente y bodega de operaciones de los cárteles del narcotráfico mexicano, aunque los más activos son el de Sinaloa y el del Golfo, según fuentes policiales.

Colom explicó que el Ejército pasará, de 15 mil 500 en la actualidad, a poco más de 31 mil elementos en 2009. Un primer aumento será de 9 mil 500 elementos, y en un segundo paso se llegará a poco más de 31 mil. El coronel Jorge Ortega, portavoz militar, argumentó que el pacto de paz establece la cifra en 31 mil.

El Ejército de Guatemala llegó a disponer de 45 mil 500 soldados en 1996, cuando acabó la guerra iniciada en 1960, y el pacto de paz estableció una reducción de 33%, por lo que la cifra actual equivale a 66%, en un país con 13.5 millones de habitantes.

En un país gobernado de 1954 a 1986 por un régimen militar instalado con apoyo de la CIA, el poder castrense revive una época de represión que dejó más de 200 mil muertos en distintos bandos. En febrero, la Presidencia de Guatemala reveló que la petición de aumentar el número de efectivos del Ejército fue hecha por las Fuerzas Armadas de EU.

José Meléndez, corresponsal, El Universal, 3 de septiembre.


1 comentarios:

Mario Grajeda responded on 3 de septiembre de 2008, 14:24 #

Es lamentable que aun en nuestra época exista Gente que crea que la mejor solución a nuestros problemas de seguridad sea aumentar el numero de Soldados en las calles, mientras que el verdadero origen de este conflicto se encuentra en nuestra propia sociedad, en las familias, en los hogares, en la mentalidad y caracter que inculcamos a nuestras futuras generaciones. Se debe cambiar la mentalidad y reinstalar en nuestra vida cotidiana la ética y la moral.