El ex secretario de Estado de Estados Unidos Collin Powell reconoció que México y Estados Unidos deben alcanzar un acuerdo en materia migratoria, debido a que los indocumentados mexicanos con su trabajo “hacen una importante contribución a la economía de Estados Unidos, aportan y enriquecen a nuestro país”, destacó.
Durante su intervención en el Sexto Encuentro Anual Nacional de Becarias y Becarios Telmex, el ex funcionario durante la administración del entonces presidente George Bush también destacó que en materia de seguridad aquel país está pagando muy altos los costos por seguridad, a raíz de los atentados terroristas del 11 de septiembre 2001.
“Reforzamos las medidas de seguridad”, dijo; sin embargo, el ingreso a aquel país hizo más lentos los procesos. “Todo es más lento, lo sé, pero estamos tratando de corregir las cosas en términos de año y medio de los nuevos procedimientos”, señaló.
y, aunque estamos mucho más seguros hoy en día, estamos empezando a comunicarle al resto del mundo que nosotros ya no somos un lugar en donde damos la bienvenida a la gente”.
Sobre todo, añadió, a un musulmán o un árabe, con los sistemas de seguridad, “le estamos dando la idea de que no queremos a la gente, y si queremos que vengan (a Estados Unidos) no podemos transmitir esa sensación”.
Estados Unidos, dijo, “y yo soy muestra viva de ello, es un país de inmigrantes“.
En materia de drogas, señaló que se lucha contra ese flagelo buscando convencer a la gente de Estados Unidos de que las drogas dañan su salud, en tanto que, respecto a nuestro país, dijo: “Debemos apoyar con todo lo que esté a nuestro alcance para ayudar a México, a las fuerzas militares, a las policías, a las procuradurías, con los recursos que tengamos de inteligencia, para abatir ese problema que está causando tantos problemas en México”.
Ante 10 mil jóvenes becados, Powell reveló que después de haber ocupado un cargo tan importante en el gobierno del presidente Bush ahora es inversionista en empresas de tecnologías de la información y telefonía celular, porque, explicó, “estoy muy preocupado porque los jóvenes que no tienen la oportunidad puedan concluir sus estudios”, por lo que se dedica a recaudar fondos para ayudar a jóvenes universitarios a concluir sus estudios.
En este sentido, recomendó a los jóvenes becarios de Fundación Telmex que “nunca dejen de buscar lo que quieren y lo que les guste hacer, porque uno nunca sabe dónde va a acabar”, y recordó que él fue un niño crecido en el Bronx “y nunca me imaginé que un día sería considerado uno de los hombres más importantes de Estados Unidos”, dijo.
Durante su intervención en el Sexto Encuentro Anual Nacional de Becarias y Becarios Telmex, el ex funcionario durante la administración del entonces presidente George Bush también destacó que en materia de seguridad aquel país está pagando muy altos los costos por seguridad, a raíz de los atentados terroristas del 11 de septiembre 2001.
“Reforzamos las medidas de seguridad”, dijo; sin embargo, el ingreso a aquel país hizo más lentos los procesos. “Todo es más lento, lo sé, pero estamos tratando de corregir las cosas en términos de año y medio de los nuevos procedimientos”, señaló.
y, aunque estamos mucho más seguros hoy en día, estamos empezando a comunicarle al resto del mundo que nosotros ya no somos un lugar en donde damos la bienvenida a la gente”.
Sobre todo, añadió, a un musulmán o un árabe, con los sistemas de seguridad, “le estamos dando la idea de que no queremos a la gente, y si queremos que vengan (a Estados Unidos) no podemos transmitir esa sensación”.
Estados Unidos, dijo, “y yo soy muestra viva de ello, es un país de inmigrantes“.
En materia de drogas, señaló que se lucha contra ese flagelo buscando convencer a la gente de Estados Unidos de que las drogas dañan su salud, en tanto que, respecto a nuestro país, dijo: “Debemos apoyar con todo lo que esté a nuestro alcance para ayudar a México, a las fuerzas militares, a las policías, a las procuradurías, con los recursos que tengamos de inteligencia, para abatir ese problema que está causando tantos problemas en México”.
Ante 10 mil jóvenes becados, Powell reveló que después de haber ocupado un cargo tan importante en el gobierno del presidente Bush ahora es inversionista en empresas de tecnologías de la información y telefonía celular, porque, explicó, “estoy muy preocupado porque los jóvenes que no tienen la oportunidad puedan concluir sus estudios”, por lo que se dedica a recaudar fondos para ayudar a jóvenes universitarios a concluir sus estudios.
En este sentido, recomendó a los jóvenes becarios de Fundación Telmex que “nunca dejen de buscar lo que quieren y lo que les guste hacer, porque uno nunca sabe dónde va a acabar”, y recordó que él fue un niño crecido en el Bronx “y nunca me imaginé que un día sería considerado uno de los hombres más importantes de Estados Unidos”, dijo.
Cecilia Higuera, Crónica, 10 de septiembre.
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