El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, ofreció a Cuba “todo lo que le hiciera falta” para recuperarse del desastre causado por los huracanes Gustav e Ike, en tanto que el ex mandatario Fidel Castro anunció hoy que más de mil millones de dólares en préstamos o créditos blandos han sido ofrecidos a la isla por gobiernos amigos a los cuales no identificó.
Chávez, Fidel y el mandatario Raúl Castro tenían previsto reunirse el domingo en La Habana en una sesión privada para examinar la asistencia de Caracas, que incluye desde ayuda financiera hasta el envío a la isla de brigadas de constructores, plomeros y carpinteros, así como el ofrecimiento de tierras venezolanas disponibles para producir alimentos.
“Venezuela es, sin dudas, el país que más solidario ha sido con Cuba”, dijo Fidel Castro en un nuevo artículo de prensa, en el que destacó además “una larga lista (de países) que siguió después con acciones de gran importancia como Rusia, Angola, Vietnam, China y otros, grandes y pequeños, con más y menos recursos”.
Venezuela suministra a la isla, con facilidades de pago, casi la mitad del petróleo que consume, cuenta con importantes inversiones en una refinería en la meridional ciudad de Cienfuegos y proyecta modernizar otra en la oriental Santiago de Cuba. En tanto, suman casi 40 mil los médicos, maestros y otros especialistas cubanos que laboran en proyectos sociales que desarrolla Chávez en sectores de bajos ingresos.
Castro reveló que los préstamos por más de mil millones de dólares, de los cinco mil millones que oficialmente se estima cuesta enfrentar los daños de los dos huracanes, son independientes “de donaciones de dinero, alimentos y recursos, que llegan por cualquier vía”.
La prensa local dijo que la pequeña isla de Trinidad y Tobago entregó a los cubanos un millón de dólares en ayuda, mientras la lejana Timor Este le otorgó 250 mil dólares. Son más de 20 los países que han comprometido asistencia, así como casi todas las agencias de la ONU.
El convaleciente ex gobernante dijo, además, que “cualquier producto procedente de Estados Unidos que llegue a nuestro país con fines contrarrevolucionarios debe devolverse o confiscarse”.
Fidel Castro se refirió en particular al Movimiento Democracia y a la Fundación Nacional Cubano-Americana, ambas con sedes en Miami y de conocida militancia anticastrista, que figuran entre las organizaciones estadunidenses a las que Washington concedió licencias para enviar ayuda de manera directa a la isla.
Chávez, Fidel y el mandatario Raúl Castro tenían previsto reunirse el domingo en La Habana en una sesión privada para examinar la asistencia de Caracas, que incluye desde ayuda financiera hasta el envío a la isla de brigadas de constructores, plomeros y carpinteros, así como el ofrecimiento de tierras venezolanas disponibles para producir alimentos.
“Venezuela es, sin dudas, el país que más solidario ha sido con Cuba”, dijo Fidel Castro en un nuevo artículo de prensa, en el que destacó además “una larga lista (de países) que siguió después con acciones de gran importancia como Rusia, Angola, Vietnam, China y otros, grandes y pequeños, con más y menos recursos”.
Venezuela suministra a la isla, con facilidades de pago, casi la mitad del petróleo que consume, cuenta con importantes inversiones en una refinería en la meridional ciudad de Cienfuegos y proyecta modernizar otra en la oriental Santiago de Cuba. En tanto, suman casi 40 mil los médicos, maestros y otros especialistas cubanos que laboran en proyectos sociales que desarrolla Chávez en sectores de bajos ingresos.
Castro reveló que los préstamos por más de mil millones de dólares, de los cinco mil millones que oficialmente se estima cuesta enfrentar los daños de los dos huracanes, son independientes “de donaciones de dinero, alimentos y recursos, que llegan por cualquier vía”.
La prensa local dijo que la pequeña isla de Trinidad y Tobago entregó a los cubanos un millón de dólares en ayuda, mientras la lejana Timor Este le otorgó 250 mil dólares. Son más de 20 los países que han comprometido asistencia, así como casi todas las agencias de la ONU.
El convaleciente ex gobernante dijo, además, que “cualquier producto procedente de Estados Unidos que llegue a nuestro país con fines contrarrevolucionarios debe devolverse o confiscarse”.
Fidel Castro se refirió en particular al Movimiento Democracia y a la Fundación Nacional Cubano-Americana, ambas con sedes en Miami y de conocida militancia anticastrista, que figuran entre las organizaciones estadunidenses a las que Washington concedió licencias para enviar ayuda de manera directa a la isla.
Manuel Juan Somoza en La Habana, Milenio, 22 de septiembre.
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