Ante el despilfarro de los tres Poderes de la Unión en propaganda, expertos del Centro de Estudios Espinosa Yglesias e Integralia proponen que en la reforma electoral que discutirá el Congreso se prohíba la publicidad oficial en todo momento.
"Que se prohíba la publicidad oficial en todo momento, no sólo durante el periodo electoral, con excepción de los programas relativos a salud y seguridad públicas.
"Ello con el fin de estimular un sistema de medios de comunicación (prensa, radio y TV) que viva más de su audiencia y de los anunciantes, que de los presupuestos públicos y de los partidos políticos y las campañas", indican.
El estudio Debilidades y Fortalezas del Sistema Electoral Mexicano, presentado a la Comisión de Gobernación del Senado, señala que en nueve años -de 2002 a 2011- el gasto en propaganda de los tres Poderes se incrementó 485 por ciento.
Precisa que mientras que en 2002 gastaban en conjunto mil 13 millones de pesos, en 2011 ejercieron 5 mil 927 millones.
Subraya que el gasto en comunicación oficial y publicidad del Gobierno federal se elevó 536 por ciento, al pasar de 910 millones en 2001, a 5 mil 795 millones en 2007, año en que se aprobó la reforma electoral.
Establece, además, que presupuesto destinado a publicidad rebasó en 29.2 por ciento el monto aprobado por el Congreso.
Señala en documento que en 2008 el gasto fue 54 por ciento mayor y en 2011 el rubro publicitario del Gobierno federal excedió en 85 por ciento lo aprobado.
Relación con medios
El diagnóstico alerta sobre la corrupción en en el trato de gobiernos con medios de comunicación para asegurar coberturas informativas favorables.
Después de que fue aprobada la reforma electoral de 2007, añade, muchos medios han usado la venta de espacios informativos como una forma de compensar la baja en la venta de spots a los partidos políticos.
"Algunos medios se han convertido en una especie de 'extorsionadores' de las campañas, pues exigen un pago o convenio de publicidad a fin de dar cobertura, o incluso, para no criticar y golpear a los candidatos", establece.
Los analistas del Centro de Estudios Espinosa Yglesias e Integralia consideran que para que el acceso a medios sea eficaz se requieren dos condiciones: que haya más oferentes y que se prohíba la publicidad oficial.
"La venta de cobertura informativa para las campañas es solo una consecuencia de que muchos medios de comunicación se han vuelto dependientes de los presupuestos públicos", indican.
Destacan que entre los principales problemas que enfrenta el sistema electoral mexicano es el creciente costo de las campañas en medios, pues partidos políticos y candidatos requieren cada vez mayor financiamiento que, además, no se reporta a las autoridades encargadas de su fiscalización.
Esto, advierten, tiene como consecuencia la corrupción que se detona por el intercambio entre quienes inyectan dinero a las campañas a cambio de un pago futuro con contratos de obra pública o permisos, además de que los gobiernos locales desvían recursos públicos hacia actividades proselitistas.
Manga ancha
El diagnóstico que el Centro de Estudios Espinosa Yglesias e Integralia entregaron a senadores enlista gastos de publicidad de los Tres Poderes de la Unión. (Cifras en millones de pesos)
Año | Legislativo | Judicial | Ejecutivo | Total |
2000 | $136.56 | $197.91 | $1,933.54 | $2,268.04 |
2003 | $23.54 | $41.00 | $1,998.16 | $2,062.70 |
2006 | $58.00 | $85.66 | $886.74 | $1,030.40 |
2009 | $42.71 | $64.63 | $2,999.88 | $3,107.23 |
2011 | $107.61 | $23.55 | $5,795.63 | $5,926.78 |
Fuente: Debilidades y Fortalezas del Sistema Electoral Mexicano
Mariel Ibarra, Reforma, 28 de junio.
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