En la izquierda, unos niegan privatizar Pemex y otros quieren su modernización

En la lucha en defensa del petróleo hay dos frentes en la izquierda: uno lo encabeza Andrés Manuel López Obrador con el Movimiento Regeneración Nacional (Morena), que se niega a cualquier reforma legislativa que dé pretexto a la privatización y, por otro, el PRD que busca modificaciones para modernizar a Pemex, pero sin tocar el artículo 27 constitucional.
Hasta ahora no ha habido contacto entre ambos equipos para unificarse, aunque algunos perredistas, como el secretario general del partido, Alejandro Sánchez Camacho, se han pronunciado por integrar un gran frente nacional, lo que implicaría sumar al PT, al Movimiento Ciudadano, a Morena y a las organizaciones sociales.
En entrevista, Martí Batres, presidente nacional de Morena, aseguró que están definiendo una estrategia de lucha, “no sabemos cómo se dé el proceso”, pero será junto con el pueblo.
Aseguró que no están porque se presente alguna iniciativa legislativa o negociación que sea “la compuerta para la privatización. Nos parece que hay que mantener la cercanía con la gente”.
Dijo que aún afinan su estrategia, que incluye movilizaciones, reparto de propaganda, realización de foros, volanteos, aunque la tarea principal es informar de la intención del gobierno de Enrique Peña Nieto de entregar el petróleo al capital privado, sobre todo después de las declaraciones que hizo al Financial Times en su reciente visita a Londres, de que la reforma energética será trascendental y se realizarán “los cambios constitucionales necesarios para dar certeza a los inversionistas privados”.
Batres sostuvo que Morena está en la idea de generar la más amplia coincidencia con todos los mexicanos en la defensa del petróleo.
Silvano Garay, integrante de la dirección del PT, dijo que están listos para sumarse a la lucha de Morena.
En tanto, los principales liderazgos del PRD (Cuauhtémoc Cárdenas, Marcelo Ebrard, Jesús Zambrano, presidente del partido, y el jefe de Gobierno del Distrito Federal, Miguel Ángel Mancera –aunque no es militante–) rechazan cualquier reforma constitucional, particularmente al artículo 27, que abra paso a la privatización de los hidrocarburos.

Alma Muñoz, La Jornada, 30 de junio.