Señalan opacidad en su labor

Bajo el argumento de seguridad nacional, el Instituto Nacional de Migración (INM) evita a toda costa el escrutinio público de prácticas irregulares.

El diagnóstico del INM "Hacia un Sistema de Rendición de Cuentas en pro de los Derechos de las Personas Migrantes en México", exhibe que el organismo imposibilita el acceso a la información y niega datos a los ciudadanos argumentando que se podría en riesgo la integridad de los servidores públicos, lo cual es falso.

La política de no transparencia, puntualiza el informe, elaborado por el Instituto para la Seguridad y la Democracia (Insyde), ha llevado al INM a emitir comunicados sólo cuando hay hechos contundentes, tales como los rescates de migrantes o depuraciones de personal; sin embargo, reserva la mayor cantidad de información.

De igual manera, los funcionarios públicos no tienen autorización para dar entrevistas y el organismo impide el acceso a estaciones migratorias, reconocidas por ser lugares donde se violan frecuentemente los derechos humanos.

"Su inclusión al Sistema de Seguridad Nacional es utilizado como criterio de opacidad que parece esconder las deficiencias en el desempeño institucional más que información que pueda poner en peligro la seguridad del Estado mexicano.

"Si el INM privilegia la falta de mecanismos que regulen el criterio de máxima publicidad generaría confianza en su desempeño y probablemente lo legitimaría, o bien, permitiría la crítica y el análisis en aras de su mejoramiento y fortalecimiento en las áreas que son deficientes", remarca el diagnóstico.

Uno de los descubrimientos de los investigadores que participaron en el documento es el de un manual nombrado "Curso de Capacitación en Materia de Transparencia" cuyo objetivo es instruir a servidores públicos encargados de dar cauce a las solicitudes vía la Ley de Transparencia, en reservar la mayor cantidad de peticiones ciudadanas.

Henia Prado, Reforma, 30 de agosto.