MIAMI (Agencias).— El Mono Jojoy, jefe militar de las FARC, podría encontrarse moribundo en un campamento clandestino de la selva colombiana, como consecuencia de una diabetes crónica mal tratada, informó ayer el periódico El Nuevo Herald.
Jorge Briceño Suárez, conocido como el Mono Jojoy, jefe militar de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), “agoniza incomunicado en su campamento de las selvas del sur de Colombia”, según fuentes judiciales consultadas por el rotativo, que indicaron que los permanentes operativos del Ejército colombiano impiden que le llegue la insulina que necesita, “y eso lo está matando”.
De acuerdo con información recogida por el diario, “desde hace dos años” el estado de salud de Jojoy es grave y se ha deteriorado, y en estos momentos se encuentra en una fase “terminal”.
“Está en los puros huesos (...) No tiene comida ni remedios y su gente debe cargarlo cuando tienen que cambiarlo de campamento”, apuntaron las fuentes al periódico. Como responsable militar de las FARC, Briceño forma parte del secretariado de esta guerrilla.
El diario asegura que el Mono Jojoy cuenta con un plan de seguridad de dos anillos al que sólo pertenecen veteranos combatientes de su mayor confianza y “muchas mujeres”. Briceño, prosiguió el periódico, guarda en secreto las coordenadas de los lugares donde se esconde “abundante armamento y millones de dólares y de pesos colombianos en efectivo”, producto en su mayor parte del narcotráfico.
Jorge Briceño Suárez, conocido como el Mono Jojoy, jefe militar de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), “agoniza incomunicado en su campamento de las selvas del sur de Colombia”, según fuentes judiciales consultadas por el rotativo, que indicaron que los permanentes operativos del Ejército colombiano impiden que le llegue la insulina que necesita, “y eso lo está matando”.
De acuerdo con información recogida por el diario, “desde hace dos años” el estado de salud de Jojoy es grave y se ha deteriorado, y en estos momentos se encuentra en una fase “terminal”.
“Está en los puros huesos (...) No tiene comida ni remedios y su gente debe cargarlo cuando tienen que cambiarlo de campamento”, apuntaron las fuentes al periódico. Como responsable militar de las FARC, Briceño forma parte del secretariado de esta guerrilla.
El diario asegura que el Mono Jojoy cuenta con un plan de seguridad de dos anillos al que sólo pertenecen veteranos combatientes de su mayor confianza y “muchas mujeres”. Briceño, prosiguió el periódico, guarda en secreto las coordenadas de los lugares donde se esconde “abundante armamento y millones de dólares y de pesos colombianos en efectivo”, producto en su mayor parte del narcotráfico.
El Universal, 21 de febrero.
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