BOGOTÁ (EFE).— El presidente de Colombia, Álvaro Uribe, descartó ayer la posibilidad de diálogo de paz con las FARC y anunció “firmeza contra los terroristas”, en alusión a los últimos ataques y planes de esa guerrilla descubiertos esta semana.
Uribe se refirió en un acto del oficialista Partido Social de Unidad Nacional, también conocido como Partido de la U, a los atentados atribuidos a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), entre ellos la muerte de cinco militares el viernes al estallar minas personales en Antioquia y un atentado fallido contra el ministro de Defensa, Juan Manuel Santos, desvelado el jueves.
Señaló que “esta semana ha sido particularmente difícil. El cobarde terrorismo no enfrenta a nuestros soldados y policías, sino que planta minas antipersonal, como los explosivos que plantaron ayer (...) en las cercanías de una escuela y en un camino de tránsito permanente de niños”, dijo.
El mandatario subrayó que “el diálogo es con la democracia. El diálogo no es con los terroristas”. “Quiero expresar a los colombianos que el propósito del gobierno es firmeza frente a los terroristas y disposición de avanzar en un diálogo de construcción de consensos con diferentes sectores del pensamiento de la vida nacional”, señaló.
El gobernante propuso “pensar un horizonte de dos líneas”: la derrota de los terroristas y más diálogo con los colombianos de todas las tendencias políticas.
Sobre el terrorismo, manifestó que si se mira “lo que ha ocurrido en España, en Afganistán y en otras partes del mundo, verán que es un tema muy difícil, frente al cual no se puede aflojar”.
En este marco, ayer mismo al menos ocho personas resultaron heridas al estallar un artefacto explosivo abandonado en un supermercado en Apartadó, población de la zona bananera del departamento de Antioquia.
Uribe se refirió en un acto del oficialista Partido Social de Unidad Nacional, también conocido como Partido de la U, a los atentados atribuidos a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), entre ellos la muerte de cinco militares el viernes al estallar minas personales en Antioquia y un atentado fallido contra el ministro de Defensa, Juan Manuel Santos, desvelado el jueves.
Señaló que “esta semana ha sido particularmente difícil. El cobarde terrorismo no enfrenta a nuestros soldados y policías, sino que planta minas antipersonal, como los explosivos que plantaron ayer (...) en las cercanías de una escuela y en un camino de tránsito permanente de niños”, dijo.
El mandatario subrayó que “el diálogo es con la democracia. El diálogo no es con los terroristas”. “Quiero expresar a los colombianos que el propósito del gobierno es firmeza frente a los terroristas y disposición de avanzar en un diálogo de construcción de consensos con diferentes sectores del pensamiento de la vida nacional”, señaló.
El gobernante propuso “pensar un horizonte de dos líneas”: la derrota de los terroristas y más diálogo con los colombianos de todas las tendencias políticas.
Sobre el terrorismo, manifestó que si se mira “lo que ha ocurrido en España, en Afganistán y en otras partes del mundo, verán que es un tema muy difícil, frente al cual no se puede aflojar”.
En este marco, ayer mismo al menos ocho personas resultaron heridas al estallar un artefacto explosivo abandonado en un supermercado en Apartadó, población de la zona bananera del departamento de Antioquia.
EFE, El Universal, 29 de marzo.
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