“Invitamos a los jefes de Estado que puedan reunirse para que ellos en forma directa aborden y traten los temas que en esta reunión hemos desarrollado”, dijo el canciller ecuatoriano Ricardo Patiño tras el encuentro de sus pares y representantes de los 12 países integrantes del organismo, que discutieron a puertas cerradas la crisis entre los dos países vecinos.
Esta cita “les va a ser de mucha utilidad” a Colombia y Venezuela para que tengan el camino avanzado” con miras a una solución, dijo el funcionario.
Sin embargo, la reunión cumbre de presidentes se propuso debido a que los cancilleres terminaron sus debates sin haber logrado un consenso. Esto significa que tampoco se pudo sacar adelante un documento oficial al no alcanzarse los acuerdos buscados.
Los cancilleres solicitaron a la presidencia actual que haga la convocatoria formal a los mandatarios con el fin de sentar en la misma mesa a los presidentes Hugo Chávez y Álvaro Uribe, lo más pronto posible, para que sean ellos lo que analicen las diferentes posiciones presentadas este jueves.
Patiño, quien se reunió por separado con sus pares venezolano, Nicolás Maduro, y colombiano, Jaime Bermúdez, antes de la instalación de la reunión extraordinaria de cancilleres, afirmó que en el encuentro de la Unasur se contó con el “voto de confianza” de los secretarios de Relaciones Exteriores para hacer “una síntesis de los puntos en los que consideramos que se podía llegar a un acercamiento”. Pero al final, admitió Patiño, hubo oposición.
En el discurso inaugural el canciller ecuatoriano señaló que la “Unasur no podía permanecer indiferente ante un problema tan importante”. Destacó que Venezuela hizo un pedido “para buscar caminos de entendimiento entre los dos países hermanos” y que “Ecuador ofrece una mesa donde nos sentemos como hermanos”.
A la cita acudieron los cancilleres de Argentina, Héctor Timerman; de Chile, Alfredo Moreno; de Bolivia, David Choquehuanca; de Colombia, Jaime Bemúdez; de Ecuador, Ricardo Patiño; de Perú, José Antonio García Belaúnde; de Uruguay, Luis Almagro, y de Venezuela, Nicolás Maduro.
En contraste, no estuvo presente el secretario general de la Unasur, el ex presidente argentino Néstor Kirchner. En tanto, Brasil, Paraguay, Guyana y Surinam enviaron a sus vicecancilleres.
Sin embargo, a su llegada el canciller colombiano Jaime Bermúdez declaró que venía a esta cita sin “mayores expectativas” y que sólo esperaba ver cómo se “desenvuelve la reunión, al señalar que no asistía el presidente del grupo, Néstor Kirchner, que varios cancilleres delegaron en sus vicecancilleres y otros dijeron que esta reunión no era conveniente.
Añadió que se requiere de consenso para cualquier decisión pero que de antemano conocía la posición de algunos países, y en ese sentido aseveró que su gobierno no se retractaba de sus denuncias.
Además, reiteró su rechazo al “plan de paz” del venezolano Nicolás Maduro, porque éste pasa por no interferir en sus asuntos internos y “capturar a los criminales donde quieran que estén”.
Bermúdez reafirmó que tenían “evidencias” de la presencia guerrilla en Venezuela y pide al organismo regional “un mecanismo eficaz” para que ni la guerrilla ni ningún otro grupo se asiente allí.
Afirmó que el gobierno de Álvaro Uribe “nunca ha cerrado la posibilidad de interlocución con Venezuela”, y que confía en que el próximo presidente Juan Manuel Santos logre su “cooperación”.
Venezuela sufre “graves amenazas” por parte de Colombia, por lo cual se requiere “retomar” el camino de la paz con las guerrillas, señaló a su vez Maduro.
Subrayó que por eso su país pidió a la presidencia pro témpore convocar a la reunión para atender esta situación, así como las “infamias, manipulaciones y mentiras” del gobierno saliente de Uribe.
Se refería así a la denuncia colombiana ante la Organización de Estados Americanos (OEA), del 22 de julio, de que unos mil 500 rebeldes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y del Ejército de Liberación Nacional (ELN) se refugian en suelo venezolano, lo que llevó a que Chávez rompiera en definitiva las relaciones con Colombia.
Cuando se dirigía entrevistarse con Patiño, Maduro respondió a periodistas que lo interrogaban que “hemos verificado que el gobierno de Colombia agrede permanentemente a sus vecinos”.
Aseveró que el Estado colombiano “lo único que genera es guerra interna, amenaza a sus vecinos y abandona su territorio”, y que por eso se debería “construir el camino de una paz justa”.
En Bogotá, Uribe deploró las declaraciones de su par brasileño Luiz Inacio Lula da Silva, quien se habría referido a la crisis colombo-venezolana como si fuera un conflicto originado en “asuntos personales”, e ignora la “amenaza” de la presencia de guerrilleros colombianos en Venezuela.
Apuntó que Lula desconoce los esfuerzos de su gobierno por hallar soluciones mediante el diálogo y que lo único que rechaza es la presencia de las FARC y el ELN en el vecino país.
Pero Brasilia se abstuvo de comentar las críticas, al señalar que Lula se dispone a contribuir “en forma constructiva y franca” para superar la crisis y que conversará mucho con Chávez y Santos.
Mientras, el jefe del Comando Sur estadunidense, general Douglas Fraser, estimó que “no hay razón” para dudar de la validez de la “evidencia” que presentó Colombia de la supuesta infiltración guerrillera en Venezuela y que ese país debe “investigar las denuncias”. Añadió que su país está “estudiando” tales evidencias.
En su momento Venezuela rechazó las “pruebas” presentadas por Colombia en la OEA, al considerar que son fotos de líderes rebeldes en medio de una selva de difícil identificación y de coordenadas geográficas mostradas con imágenes del programa informático Google Earth, de uso comercial y de fácil manipulación.
0 Responses to "Fracasa la junta de cancilleres de Unasur; proponen llamar a cumbre de presidentes"
Publicar un comentario