'No garantiza, pero es buena señal'

Aunque consideró que la firma del pacto de civilidad no es una garantía, el presidente del PAN, Gustavo Madero, destacó la importancia de que los candidatos lo hayan firmado porque implica un compromiso para respetar las instituciones y los resultados.

"No, no garantiza, pero es una buena señal", consideró.

El dirigente panista manifestó preocupación por las denuncias que se han recibido de intentos de coaccionar el voto, por lo que pidió a los Gobiernos locales no usar recursos públicos para influir en la votación, y a los simpatizantes de partidos ser respetuosos de quienes piensan diferente.

Josefina Vázquez Mota llegó al IFE en camioneta, acompañada de su asesor Daniel Hernández y su hija Celia María Ocampo. Entró a la sala donde plasmó su firma en compañía de Rogelio Carbajal, representante del blanquiazul ante el IFE, así como por Agustín Castilla y la diputada Kenia López.

La candidata esperó en el vestíbulo la llegada del líder albiazul, Gustavo Madero, y ahí se encontró con Andrés Manuel López Obrador y se dio un primer saludo con beso en la mejilla, gesto que ya no repitieron en el auditorio donde se firmó el pacto.

En la sala estaban otro de sus asesores, Mario Laborín; su coordinadora de comunicación, Irma Pía González; su coordinador de alianzas políticas y líder de la bancada de panista, Carlos Alberto Pérez Cuevas; y la diputada Paz Gutiérrez.

Fue la última en entrar. Escuchó los discursos con cara de sueño, desvelada tras haber festejado en Guadalajara su cierre de campaña, y con tos en varios momentos. Cuando llegó su turno, tuvo que tomar del brazo a Valdés para bajar los escalones, y volver a subirlos después de firmar el pacto.

Al terminar, fue la primera que se acercó a despedirse de López Obrador, de Peña Nieto y de Quadri. Directo a la salida, sin fotos y apoyada en Valdés.


Ixtaro Arteta, Reforma, 29 de junio.