CIUDAD DE MÉXICO. Un comando interceptó ayer a dos reporteros gráficos de El Diario de Ciudad Juárez, ejecutó a Luis Carlos Santiago Orozco y dejó herido de cuatro impactos de bala a Carlos Manuel Sánchez Colunga, cuando se dirigían en su hora de comida al centro comercial Río Grande.
El ataque contra los periodistas ocurrió cerca de las 14:35 horas en el estacionamiento de un mall en las avenidas Adolfo López Mateos y Paseo Triunfo de la República, sitio que carecía de la habitual vigilancia por parte de elementos federales, encargados de los patrullajes en esa frontera de Chihuahua con Estados Unidos.
Luis Carlos Santiago, de 22 años de edad y ochos meses de colaborar en el periódico, era cercano a Alejo de la Rosa, también miembro del rotativo e hijo del activista Gustavo de la Rosa Hickerson.
El reportero quedó abatido en el interior del auto Platina gris en el que se trasladaba junto con Carlos Sánchez, fotógrafo de 22 años. El vehículo, propiedad de El Diario, estaba asignado justamente a Alejo, quien lo conducía con regularidad. Entre Luis Carlos y la familia De la Rosa existía estrecha amistad desde hace años.
Gustavo De la Rosa Hickerson, visitador especial de la Comisión Estatal de los Derechos Humanos para dar seguimiento a las quejas del Operativo Coordinado Chihuahua, confirmó que su hijo acompañaba a los reporteros gráficos de El Diario y circunstancialmente los dejó minutos antes del ataque.
De la Rosa Hickerson exigió una “profunda y pronta” investigación, ya que si no se detiene a los responsables no se podrá determinar “si se trató de un crimen de la delincuencia común, de la delincuencia organizada o un hecho político”.
Comentó que su hijo y el reportero ejecutado habían tenido diferencias con un grupo de jóvenes, “medio pandilleros, medio drogadictos”, y que, incluso, éstos los habían amenazado.
De la Rosa fue nombrado el pasado 6 de abril visitador especial de la CEDH para dar seguimiento a las quejas del Operativo Coordinado Chihuahua, que abarca elementos militares y oficiales de la Secretaria de Seguridad Pública Federal.
Refirió que en las últimas semanas ha tenido una intensa labor por su función de observación y vigilancia en los operativos. Dijo que recientemente elaboró dos expedientes por homicidio que involucran a agentes de la Policía Federal, y ha llevado pesquisas sobre la operación de bandas de secuestradores, además de presionar cambios operativos en la corporación local y sostener reuniones con las autoridades salientes y entrantes.
Al asumir el encargo, el derechohumanista explicó que entre sus funciones estaban retomar los expedientes que él mismo había señalado en contra de elementos del Ejército por irregularidades y abusos en el marco de las acciones de la operación coordinada Chihuahua.
En los últimos dos años denunció públicamente abusos cometidos en el marco de la lucha contra el crimen organizado, lo que lo llevó a recibir amenazas de muerte. En octubre de 2009 tuvo que solicitar asilo político al gobierno de Estados Unidos, por lo que pasó varias semanas en un centro de detención migratoria. Cuando regresó a Ciudad Juárez continuó con su labor de denuncia.
“No quisiera pensar que lo mataran por mi culpa”, mencionó De la Rosa.
Segob condena hechos
La Secretaría de Gobernación (Segob) condenó la agresión a los periodistas y aseguró que se mantendrá atenta a las investigaciones del gobierno de Chihuahua, además de expresar su apoyo.
“El gobierno federal rechaza toda acción de violencia criminal y condena de manera especial y categórica las agresiones que cometen los delincuentes en contra de quienes realizan un trabajo periodístico”, señaló la dependencia.
El Universal, 17 de diciembre.
El ataque contra los periodistas ocurrió cerca de las 14:35 horas en el estacionamiento de un mall en las avenidas Adolfo López Mateos y Paseo Triunfo de la República, sitio que carecía de la habitual vigilancia por parte de elementos federales, encargados de los patrullajes en esa frontera de Chihuahua con Estados Unidos.
Luis Carlos Santiago, de 22 años de edad y ochos meses de colaborar en el periódico, era cercano a Alejo de la Rosa, también miembro del rotativo e hijo del activista Gustavo de la Rosa Hickerson.
El reportero quedó abatido en el interior del auto Platina gris en el que se trasladaba junto con Carlos Sánchez, fotógrafo de 22 años. El vehículo, propiedad de El Diario, estaba asignado justamente a Alejo, quien lo conducía con regularidad. Entre Luis Carlos y la familia De la Rosa existía estrecha amistad desde hace años.
Gustavo De la Rosa Hickerson, visitador especial de la Comisión Estatal de los Derechos Humanos para dar seguimiento a las quejas del Operativo Coordinado Chihuahua, confirmó que su hijo acompañaba a los reporteros gráficos de El Diario y circunstancialmente los dejó minutos antes del ataque.
De la Rosa Hickerson exigió una “profunda y pronta” investigación, ya que si no se detiene a los responsables no se podrá determinar “si se trató de un crimen de la delincuencia común, de la delincuencia organizada o un hecho político”.
Comentó que su hijo y el reportero ejecutado habían tenido diferencias con un grupo de jóvenes, “medio pandilleros, medio drogadictos”, y que, incluso, éstos los habían amenazado.
De la Rosa fue nombrado el pasado 6 de abril visitador especial de la CEDH para dar seguimiento a las quejas del Operativo Coordinado Chihuahua, que abarca elementos militares y oficiales de la Secretaria de Seguridad Pública Federal.
Refirió que en las últimas semanas ha tenido una intensa labor por su función de observación y vigilancia en los operativos. Dijo que recientemente elaboró dos expedientes por homicidio que involucran a agentes de la Policía Federal, y ha llevado pesquisas sobre la operación de bandas de secuestradores, además de presionar cambios operativos en la corporación local y sostener reuniones con las autoridades salientes y entrantes.
Al asumir el encargo, el derechohumanista explicó que entre sus funciones estaban retomar los expedientes que él mismo había señalado en contra de elementos del Ejército por irregularidades y abusos en el marco de las acciones de la operación coordinada Chihuahua.
En los últimos dos años denunció públicamente abusos cometidos en el marco de la lucha contra el crimen organizado, lo que lo llevó a recibir amenazas de muerte. En octubre de 2009 tuvo que solicitar asilo político al gobierno de Estados Unidos, por lo que pasó varias semanas en un centro de detención migratoria. Cuando regresó a Ciudad Juárez continuó con su labor de denuncia.
“No quisiera pensar que lo mataran por mi culpa”, mencionó De la Rosa.
Segob condena hechos
La Secretaría de Gobernación (Segob) condenó la agresión a los periodistas y aseguró que se mantendrá atenta a las investigaciones del gobierno de Chihuahua, además de expresar su apoyo.
“El gobierno federal rechaza toda acción de violencia criminal y condena de manera especial y categórica las agresiones que cometen los delincuentes en contra de quienes realizan un trabajo periodístico”, señaló la dependencia.
El Universal, 17 de diciembre.
0 Responses to "Atacan a reporteros ligados a ombudsman"
Publicar un comentario