Cuestionable discrepancia en las cifras de grandes encuestadoras


El Instituto Federal Electoral (IFE) ha recibido ya 18 solicitudes de empresas interesadas en realizar conteos rápidos o encuestas de salida el próximo primero de julio, dio a conocer el secretario ejecutivo del organismo, Edmundo Jacobo Molina.
Durante el foro Las encuestas y la campaña electoral, el funcionario destacó también el crecimiento sustancial de los sondeos en México, pues pasaron de 57 realizados en 2006, a 134 estudios hasta la fecha.
Por su parte, el consejero electoral Lorenzo Córdova alertó sobre elcurioso crecimiento en los últimos años del número de empresas encuestadoras poco conocidas, al tiempo que recordó las notables diferencias que se han registrado en algunas elecciones estatales entre lo que apuntaban las encuestas –incluso de empresas prestigiadas– y los resultados definitivos.
Los sondeos debían generar confianza y certeza
Córdova destacó la importancia de que las encuestas generen confianza y certeza, si bien es sabido que el mal manejo de un sondeo de opinión tiene como principal sanción el desprestigio social. Por ello, dijo que no es tan normal ver los niveles de discrepancias que hay entre las encuestas para la elección presidencial, que alcanzan diferencias notables que van de 20 a 4 puntos, según la empresa encuestadora.
Al respecto, Gabriela de la Riva, presidenta de la Asociación Mexicana de Agencias de Investigación de Mercado y Opinión Pública, aseguró que lo más valioso que tiene una compañía encuestadora es la credibilidad, de ahí que arriesgarse a participar en un engaño impacta en la subsistencia de la organización y de la empresa, porque traiciona el producto que vende. Los candidatos van y vienen, pero las empresas e investigadores permanecen, comentó.
Al foro asistieron representantes de las empresas Consulta Mitofsky, Covarrubias, Gea-Isa y Bimsa, entre otras, las que coincidieron en justificar las diferencias que existen en los resultados de dos grandes bloques de encuestadoras, mismas que atribuyeron a aspectos metodológicos y a los tiempos en que fueron levantadas.
Ana María Covarrubias reconoció que existe un desconcierto entre la población por los márgenes tan amplios, pero explicó que, en su caso,son ejercicios probabilísticos en los cuales no es posible comparar lo que no es comparable. Sin embargo, destacó que un elemento importante para dar seriedad a una encuestadora es que los movimientos de las preferencias tengan una consistencia explicativa de las razones que lo motivaron.
Roy Campos aseguró a su vez que las encuestas miden las percepciones del momento y no pretenden anticipar quién es el que va a ganar. No se trata de medias verdades, sino de aproximarse a una realidad que es cambiante en el momento siguiente; mide lo que existe en la población, no lo que va a pasar.
Campos reivindicó la importancia de las encuestas como una información socializada.
¿Por qué le pegan a Enrique Peña? Porque es el que va adelante. ¿Por qué después a López Obrador le comenzaron a pegar? Por la percepción de que estaba subiendo en los sondeos, dijo.
Finalmente, Adrián Villegas, director de Estudios Políticos de Ipsos-Bimsa, explicó que las encuestas lo que hacen es narrar el dia a día en las preferencias electorales y no narramos la historia en anticipado.
Alonso Urrutia, La Jornada, 14 de junio.

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